El Gobierno de Donald Trump trabaja en un plan para recortar los salarios de los trabajadores agrícolas migrantes, incluso al tiempo que busca enviar ayuda directa a los agricultores y ganaderos afectados por la pandemia del coronavirus. El plan, liderado por el jefe de personal de la Casa Blanca, Mark Meadows, y el secretario de Agricultura, Sonny Perdue, reduciría el salario de unos 250.000 trabajadores extranjeros a quienes se les ha otorgado permiso temporal para vivir y trabajar en el país. La medida se tomaría a pesar de que los migrantes han sido declarados “trabajadores esenciales”. En respuesta, la agrupación en favor de los derechos de los inmigrantes Movimiento Cosecha tuiteó: “La vida de los trabajadores esenciales que alimentan al país durante esta pandemia simplemente no es importante para la industria agrícola ni para el Gobierno”.
El Servicio Postal de Estados Unidos está recurriendo al Congreso estadounidense para que le sean adjudicados 89.000 millones de dólares en subvenciones federales, advirtiendo que sin asistencia la pandemia del coronavirus dejará a la agencia insolvente en septiembre. La petición se produjo después de que el Gobierno de Donald Trump bloqueó con éxito una subvención directa de 13.000 millones de dólares otorgados al Servicio Postal en el proyecto de ley de estímulo económico por valor de 2,2 billones de dólares aprobado para contrarrestar la crisis del coronavirus, y en su lugar ofreció a la agencia un préstamo de 10.000 millones de dólares. La directora general del Servicio Postal estadounidense, Megan Brennan, sostiene que esa cifra no es suficiente para evitar que se produzca una interrupción de la entrega regular de correo en septiembre. La inminente crisis se produce al tiempo que muchos estados buscan ampliar la votación por correo antes de las elecciones previstas para noviembre. En un tuit, el senador del estado de Vermont Bernie Sanders instó al Congreso a actuar para salvar al Servicio Postal de Estados Unidos.
En la ciudad de Filadelfia, más de 200 reclusos no violentos fueron liberados de prisión en la primera semana en la que jueces celebraron audiencias de emergencia para reducir la población carcelaria en medio del brote de coronavirus. Los manifestantes han solicitado la liberación de los reclusos desde que comenzaron a imponerse medidas de confinamiento. El viernes, cientos de automóviles se congregaron frente a las cárceles de Filadelfia para llevar a cabo una manifestación bajo la consigna #FreeOurPeople (#LiberenANuestraGente, en español).
En el estado de Arizona, más de 700 personas se realizaron el viernes una manifestación de automóviles frente al Centro de Detención privado Eloy y el centro penitenciario La Palma, próximo a la ciudad de Phoenix, exigiendo la liberación inmediata de todos los inmigrantes que se encuentran bajo custodia mientras los casos de COVID-19 continúan aumentando. Desde la semana pasada, han sido confirmados cinco casos de COVID19 en las cárceles de Inmigración de Arizona, entre ellos dos dentro de La Palma, aunque los activistas sostienen que las cifras reales son probablemente mucho más elevadas. Estas son las palabras expresadas por Stephanie Figgins Ramírez, una activista de la organización Trans Queer Pueblo, en la protesta del viernes.
Stephanie Figgins Ramírez dijo: “Pedimos al gobernador Doug Ducey que presione públicamente al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas para que cierre los centros de detención, libere a todos los migrantes y detenga las los operativos de deportaciones. También pedimos al gobernador Ducey que deje de enviar a personas a los centros del Servicio de Inmigración, poniendo fin a la colaboración del sheriff y de esa agencia en las cárceles del condado”.
En noticias relacionadas, mujeres que se encuentran encarceladas en el centro de detención de Otay Mesa, próximo a la ciudad de San Diego, sostienen que CoreCivic, la compañía privada que administra Otay Mesa, envió un cargamento de mascarillas quirúrgicas a las instalaciones la semana pasada, pero que a las reclusas se les dijo que primero tenían que firmar un documento con una cláusula que protegía a CoreCivic de responsabilidad legal en caso de que se enfermaran. Cuando las mujeres se negaron a firmar, los guardias del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas les echaron gas pimienta. La cláusula ha sido retirada desde entonces. Activistas realizaron una manifestación de vehículos en las inmediaciones de Otay Mesa el sábado en protesta por el ataque.
El brote de coronavirus ha afectado duramente a los trabajadores de la industria alimenticia y se reporta un vertiginoso aumento en los casos de coronavirus en varias plantas de procesamiento de carnes. En la ciudad de Sioux Falls, en el estado de Dakota del Sur, una planta de procesamiento de carne de cerdo perteneciente a la empresa Smithfield Foods cerró después de que casi 240 trabajadores dieron positivo en las pruebas de diagnóstico del virus, lo que representa más de la mitad de los casos activos de COVID-19 en el estado. En una planta de la empresa Cargill Meat Solutions, en el estado de Pensilvania, 130 trabajadores dieron positivo por COVID-19 y muchos otros se reportaron enfermos.
En otra parte de Pensilvania, un representante sindical en el matadero JBS Beef murió el viernes pasado tras contraer coronavirus. Asimismo, se han reportado muertes de trabajadores de mataderos en los estados de Georgia y Colorado. Muchas instalaciones de procesamiento de carne emplean a un gran número de inmigrantes, entre ellos trabajadores indocumentados. El director ejecutivo de Smithfield advirtió que la pandemia pondrá el suministro de carne de Estados Unidos “peligrosamente cerca del límite [de su capacidad]”.
En Guam, la Marina de Estados Unidos informó que aproximadamente 600 marineros dieron positivo por COVID-19 después de evacuar el portaaviones USS Theodore Roosevelt. El exsecretario interino de la Armada Thomas Modly se vio obligado a renunciar la semana pasada, luego de que dijera que Brett Crozier, el excapitán del barco de propulsión nuclear, era “demasiado ingenuo o demasiado estúpido” para estar al mando de la embarcación. El insulto se produjo después de que Crozier envió un memorando a comandantes navales solicitando ayuda cuando su tripulación comenzó a tener casos positivos de coronavirus.
El primer ministro británico, Boris Johnson, fue dado de alta del hospital el domingo, mientras continúa recuperándose tras haber contraído COVID-19. En un mensaje de video, agradeció al personal del Servicio Nacional de Salud que lo atendió.
El primer ministro Boris Johnson dijo: “Hoy me fui del hospital después de una semana en la que el Servicio Nacional de Salud me ha salvado la vida, sin duda. No tengo palabras para expresar la deuda que tengo con ellos”.
Esto se produce a medida que aumentan las críticas sobre la respuesta del Gobierno de Johnson frente a la crisis del coronavirus, incluida la falta de equipos de protección personal y pruebas de detección para los trabajadores del Servicio Nacional de Salud. La cifra oficial de muertes por coronavirus en el Reino Unido ha superado las 10.000, y las autoridades advirtieron que podría llegar a tener el mayor número de muertes de Europa.
En el Vaticano, el papa Francisco dio un sermón de Pascua el domingo a través de una transmisión de video en vivo desde una Basílica de San Pedro casi vacía.
El papa Francisco expresó: “Todo el mundo está sufriendo y necesita unirse para enfrentar la pandemia. Que Jesús resucitado dé esperanza a todos los pobres, a los que viven en las periferias, a los refugiados y a las personas sin hogar”.
Con más de 20.000 muertes, Italia ha sufrido el mayor número de muertes de Europa, y el segundo más alto a nivel mundial después de Estados Unidos. El primer ministro Giuseppe Conte extendió hasta el 3 de mayo las medidas de confinamiento a nivel nacional que originalmente estaban programadas para ser levantadas hoy.
Mientras tanto, España, que ahora tiene más de 17.000 muertes por COVID-19, está reactivando lentamente algunos sectores de su economía. El número diario de muertos en España aumentó nuevamente durante el fin de semana, pero luego cayó a 517 el lunes. Las autoridades dicen que la tasa de nuevas infecciones en España sigue disminuyendo.
En Rusia, los hospitales de Moscú presentan un aumento importante en la cantidad de casos y se han visto desbordados con las admisiones en los últimos días, mientras el número de muertos en Rusia superó los 100. En Moscú, se registraron filas interminables de ambulancias en un hospital el sábado. Uno de los conductores dijo que tuvo que esperar 15 horas para poder dejar a un paciente.
China ha reportado más de 100 nuevos casos de COVID-19 durante el último día, el mayor número de nuevos contagios registrados en el último mes. Las autoridades chinas dicen que la mayoría de los casos son los llamados “contagios importados” por personas que regresan de otros países. El aumento ha avivado los temores de una segunda ola de contagios en China.
Según informes, en Brasil, un adolescente yanomami murió de COVID-19, lo que lo convirtió en el primer miembro de la comunidad en sucumbir al coronavirus. Los líderes yanomamis dicen que sospechan que los mineros de oro ilegales pueden ser responsables de llevar el coronavirus a la comunidad. El fallecimiento del adolescente constituye la segunda muerte de un indígena en Brasil, y se teme un brote mortal masivo entre los grupos indígenas aislados que viven en las profundidades de la Amazonia.
En Brasil, un estudio sobre el efecto de la cloroquina en pacientes con coronavirus se interrumpió después de que 11 de los 81 participantes murieran y otros desarrollaran frecuencias cardíacas irregulares, lo que puede aumentar el riesgo de una arritmia potencialmente mortal. Donald Trump ha promocionado repetidamente la hidroxicloroquina, un derivado de la cloroquina, para tratar el COVID-19.
La República Democrática del Congo reportó dos nuevos casos de ébola durante el fin de semana, pocos días antes de que las autoridades anunciaran el fin del último brote de la enfermedad mortal. La República Democrática del Congo también está luchando por contener un brote de sarampión, y crece el temor de que el nuevo coronavirus se haya extendido mucho más allá de los 235 casos y las 20 muertes que se informaron hasta ahora.
En Liberia, la Policía, utilizando equipos antidisturbios, usó bastones para golpear a las personas que permanecían en las calles de la capital, Monrovia, el sábado, cuando comenzó a regir una cuarentena en la ciudad de un millón de personas. Muchos residentes dijeron que la amenaza del hambre era mucho mayor que la amenaza del coronavirus.
Jettroy Kolleh declaró: “Si hoy les dicen que mañana habrá un estado de emergencia, que todos deberían quedarse en sus casas en cuarentena, entonces, ¿cómo esperan que se puedan alimentar? ¿Sabe qué es lo que va a matar a muchas personas? El coronavirus no va a matar a mucha gente. Es el hambre lo que va a matar a muchos liberianos”.
Los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Rusia y otros países productores de petróleo han llegado a un acuerdo para reducir su producción en diez millones de barriles por día, o una décima parte de la oferta mundial, en respuesta a la caída del precio del petróleo como resultado de la pandemia de coronavirus y de una guerra de precios del petróleo entre Rusia y Arabia Saudí. Sin embargo, los recortes pueden no ser suficientes para levantar los precios, ya que la producción igualmente superaría significativamente la demanda actual.
May Boeve, directora ejecutiva de 350.org, una organización ecologista internacional, condenó el acuerdo y dijo que “no trata la sobreproducción estructural de petróleo y no nos lleva a lo que realmente se necesita: una reducción controlada de la industria de combustibles fósiles. El colapso del precio del petróleo es una advertencia severa para cualquier inversor que piense que aún puede beneficiarse de la financiación de compañías de combustibles fósiles”.
Canadá aprobó un proyecto de ley histórico de 52.000 millones de dólares el sábado que subsidia los salarios en un 75% de trabajadores de empresas que cumplan con ciertos requisitos, con el fin de detener los despidos masivos en medio de la crisis del coronavirus. Canadá ha reportado casi 25.000 casos y más de 700 muertes.
La pareja de Julian Assange está pidiendo a las autoridades del Reino Unido que liberen al fundador de WikiLeaks por temor a una infección por coronavirus, mientras revela que tuvieron dos hijos y se comprometieron mientras Assange se refugiaba en la embajada de Ecuador. En un video publicado por WikiLeaks, la abogada Stella Moris dice que conoció a Assange cuando comenzó a ayudarlo con su caso de extradición. Él enfrenta hasta 175 años de prisión por su papel en la publicación de documentos clasificados de Estados Unidos que exponen crímenes de guerra perpetrados por Estados Unidos en Irak y Afganistán. Assange está actualmente encerrado en la prisión de Belmarsh, en Londres, por haber violado los términos de una fianza, y deberá enfrentar audiencias de extradición el próximo mes.
Tara Reade, quien acusó a Joe Biden de agredirla sexualmente cuando trabajaba en su despacho del Senado en 1993, presentó una denuncia ante la policía de Washington DC. Aunque el plazo de prescripción penal ya se ha cumplido, es decir, el plazo de tiempo en el cual podía presentar una denuncia con Biden, Reade dijo que lo hizo de todas formas por “razones de seguridad”. Durante el fin de semana, el periódico The New York Times publicó un artículo en el que varios testigos corroboran aspectos del relato de Reade. El Times fue criticado por eliminar una frase en el artículo, que también fue tuiteada, que detalla las acusaciones anteriores contra Biden. El periódico originalmente publicó: “No encontramos ningún patrón de conducta sexual inapropiada por parte de Biden, más allá de abrazos, besos y caricias hacia mujeres que han dicho sentirse incómodas por estas actitudes”. El Times luego eliminó la frase “más allá de abrazos, besos y caricias hacia mujeres que han dicho sentirse incómodas por estas actitudes”.