La activista por los derechos de las personas transgénero Aimee Stephens falleció a causa de una enfermedad renal a los 59 años de edad. Stephens fue despedida de su trabajo en una funeraria del estado de Michigan en 2013 tras haber comunicado a sus colegas que comenzaría a vivir como mujer. Stephens fue la principal demandante en una histórica causa por los derechos de las personas transgénero que se encuentra pendiente de resolución en la Corte Suprema de Estados Unidos. Stephens viajó a Washington D.C. desde Michigan el pasado mes de octubre para los alegatos orales.
Aimee Stephens dijo: “Me alegro de haber logrado presentar este caso ante los tribunales. Lo que me pasó a mí estuvo mal. Y tengo la esperanza de que podamos resolverlo y corregirlo a partir de ahora. Gracias”.