En Estados Unidos, miles de personas se congregaron el lunes en la ciudad de Houston, en el estado de Texas, para rendir homenaje a George Floyd, dos semanas después de su muerte a manos de la policía en la ciudad de Minneapolis. Su hermano Terrence Floyd habló con la prensa frente a la iglesia Fuente de Alabanza donde se realizó un evento conmemorativo en honor de George Floyd y un velatorio público.
Terrence Floyd sostuvo: “Les diré lo siguiente: si [a George Floyd] le hubieran dicho que tenía que sacrificar su vida para unir al mundo, conociéndolo, sé que lo hubiera hecho. Y, quiero decir, una vez más, que amo estas muestras de cariño y que estemos todos acompañándonos en este dolor como una familia”.
El reverendo Al Sharpton estuvo presente junto a los hermanos de George Floyd y a familiares de Trayvon Martin, Eric Garner, Botham Jean, Ahmaud Arbery y Michael Brown. El abogado de la familia Floyd, Benjamin Crump, también intervino durante la ceremonia.
Benjamin Crump afirmó: “O Estados Unidos destruirá el racismo o el racismo destruirá a Estados Unidos. En el nombre de George Floyd”.
El funeral de George Floyd tiene lugar este martes en Houston, su ciudad natal, donde será sepultado junto a su madre.
En la ciudad de Minneapolis, en Estados Unidos, el ex agente de policía Derek Chauvin compareció por primera vez ante un tribunal por la muerte de George Floyd mediante videoconferencia desde una prisión de máxima seguridad. Su fianza fue fijada en 1,25 millones de dólares o un millón de dólares bajo determinadas condiciones.
Las autoridades de Austin, capital del estado de Texas, enfrentan nuevos interrogantes sobre la muerte de un hombre afroestadounidense llamado Javier Ambler, acaecida en marzo del año pasado. Ambler falleció tras ser detenido por un oficial adjunto del sheriff del condado de Williamson, quien comenzó una persecución en contra de Ambler cuando este no bajó las luces de los faros delanteros de su camioneta al sobrepasar el vehículo policial. Imágenes captadas por la cámara corporal de uno de los oficiales presentes, recientemente publicadas, revelan que Ambler recibió reiteradas descargas con una pistola eléctrica mientras decía “Sufro de insuficiencia cardíaca congestiva” y “No puedo respirar”.
El siguiente es un fragmento de la escena grabada por la cámara.
Policía 1: “¡La otra mano!”
Javier Ambler: “Estoy a punto de arrodillarme, señor”.
Policía 1: “¡La otra mano!”
Javier Ambler: “Estoy a punto de dársela, señor”.
Policía 1: “¡Deme su mano!”
Policía 2: “Señor, necesito que obedezca”.
Javier Ambler: “Señor”.
Policía 2: “Voy a dispararle con una pistola eléctrica”.
Policía 1: “¡Acuéstese boca abajo, sobre el estómago! ¡Boca abajo sobre el estómago!”
Javier Ambler: “Señor, no puedo respirar”.
Policía 1: “¡Boca abajo!”
Javier Ambler: “¡No puedo respirar!”
Policía 1: “¡Acuéstese boca abajo sobre el estómago! ¡Boca abajo sobre el estómago! Deje de resistirse”.
Policía 2: “Deténgase”.
Javier Ambler: “¡No puedo respirar!”
Policía 1: “Deje de resistirse”.
Policía 2: “Deténgase”.
Javier Ambler: “¡Señor!”
Policía 2: “Debe obedecer”.
Javier Ambler: “¡No me estoy resistiendo!”
Policía 1: “¡Deje de resistirse!”
Javier Ambler: “¡No puedo respirar!” *
Los detalles sobre la muerte de Ambler solo salieron a la luz ahora, luego de que el periódico Austin American-Statesman presionara para que se publicaran las imágenes de las cámaras corporales y los informes internos de la Policía sobre el fallecimiento. Hasta la semana pasada, la familia de Ambler solo sabía que este murió bajo custodia policial. Su muerte también fue filmada por el reality show “Live PD”, que se emite por el canal A&E, pero las imágenes nunca fueron reveladas públicamente. Ambler era un exempleado del Servicio Postal y padre de dos hijos. El fiscal de distrito del condado de Travis ha anunciado que el caso será presentado ante un gran jurado en los próximos meses.
En el estado de Nuevo México, también en Estados Unidos, un policía de la ciudad de Las Cruces fue acusado de homicidio involuntario por la muerte de un hombre tras una parada de tráfico que tuvo lugar en febrero. El agente Christopher Smelser, quien permanece en libertad bajo fianza, está acusado de causar la muerte de Antonio Valenzuela al inmovilizarlo mediante una maniobra de presión sobre el cuello. En un video recientemente publicado, filmado por una cámara que estaba en la solapa de uno de los agentes, puede escucharse a Smelser decirle a Valenzuela “Voy a [improperio] asfixiarte, hermano”. Incluso después de que Valenzuela perdiera el conocimiento, el video muestra que Smelser no intentó ayudarlo. En cambio, se le escucha describir su encuentro con Valenzuela como una “buena peleíta”. Antonio Valenzuela era padre de cuatro hijos y se desempeñaba como pintor. Según reporta el periódico The Washington Post, la ciudad de Las Cruces, en Nuevo México, tuvo la tasa más alta de muertes a manos de la policía de todas las ciudades de Estados Unidos entre 2015 y 2019.
En el Capitolio, legisladores demócratas de la Cámara de Representantes y el Senado presentaron el lunes un proyecto de ley de reforma policial. Estas son palabras de la presidenta del Bloque Afroestadounidense del Congreso, Karen Bass.
Karen Bass expresó: “La Ley de Justicia en la Vigilancia Policial plantea un enfoque audaz y transformador del mantenimiento del orden por parte de la Policía en Estados Unidos. Nunca más el mundo debería ser sometido a presenciar lo que vimos en las calles de Minneapolis: el lento asesinato de un individuo a manos de un oficial de policía uniformado”.
La Legislación facilitaría la persecución penal en situaciones de abuso policial, crearía un registro nacional para hacer un seguimiento de casos de conductas indebidas y prohibiría el traspaso de ciertos equipos militares a los departamentos de Policía. La reforma prohibiría también las llaves de estrangulamiento y otras prácticas que han causado la muerte de personas.
Antes de presentar los proyectos de ley, un grupo de destacados legisladores demócratas, entre ellos la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, el líder de la minoría del Senado Chuck Schumer, el congresista Jim Clyburn y el senador Corey Booker se arrodillaron simbólicamente en el Salón de la Emancipación del Capitolio durante ocho minutos y 46 segundos, el tiempo que Derek Chauvin presionó su rodilla contra el cuello de George Floyd en el suelo mientras respiraba con dificultad y moría lentamente.
En Nueva York, fue liberado de prisión Ramsey Orta, el hombre que filmó el arresto y la muerte de Eric Garner a manos de la policía. Orta cumplía una condena de cuatro años por cargos relacionados con armas y drogas, pero se le otorgó libertad anticipada debido a la pandemia de coronavirus.
En el estado de Virginia, en Estados Unidos, un hombre que dice ser líder del Ku Klux Klan fue arrestado luego de conducir su automóvil contra un grupo de manifestantes en la capital del estado, Richmond, el domingo por la noche. Harry Rogers fue acusado de agresión con lesiones. Las autoridades locales lo describieron como un “líder declarado del Ku Klux Klan y propagandista de la ideología confederada”. Mientras tanto, en la ciudad de Bakersfield, en California, se han registrado recientemente al menos tres casos en los que conductores arremetieron contra manifestantes con sus vehículos. El sábado, un hombre afroestadounidense de 55 años llamado Robert Forbes murió tras ser atropellado a principios de semana por un conductor blanco. No se han presentado cargos, pero los testigos han acusado al conductor de tratar de atropellar manifestantes de manera intencional.
En la ciudad de Seattle, un hombre afroestadounidense resultó herido el domingo cuando un conductor chocó su vehículo contra una multitud de manifestantes y comenzó a disparar. El conductor, Nikolas Fernández, se encuentra detenido por sospecha de agresión en primer grado.
En más noticias sobre Seattle, manifestantes claman victoria tras establecer una zona barricada alrededor de un edificio donde se encuentra una comisaría de Policía. En ese lugar se registraron protestas, con una brutal represión policial, durante ocho días. La comisaría se encuentra actualmente tapiada con tablas. La jefa de Policía de Seattle, Carmen Best, describió la medida como un esfuerzo por mostrar “confianza y desescalar la violencia”. El viernes, Seattle anunció una prohibición de 30 días sobre el uso de gas lacrimógeno, pero los agentes continuaron utilizándolo contra los manifestantes durante el fin de semana. Mientras tanto, el Concejo Municipal de Seattle ha comenzado a discutir la desmilitarización o la reducción de fondos asignados a la fuerza policial. El lunes, la concejal de la ciudad de Seattle Kshama Sawant presentó un proyecto de ley para prohibir a la Policía el uso de armas químicas y llaves de estrangulamiento.
La muerte de George Floyd ha provocado grandes cambios a nivel mundial en la forma en que los Gobiernos abordan la violencia policial. El lunes, Francia prohibió el uso de llaves de estrangulamiento por parte de la policía durante los arrestos. En el Reino Unido, más de 160 miembros del Parlamento escribieron una carta dirigida a la Secretaria de Estado para el Comercio Internacional en la que se exige que el Reino Unido suspenda la exportación de equipos antidisturbios, gases lacrimógenos y balas de goma a Estados Unidos. “No deberíamos ayudar a Donald Trump a reprimir a su propio pueblo”, escribió el parlamentario laborista Jeremy Corbyn en Twitter.
Mientras que las peticiones para recortar los fondos asignados a la Policía crecen en Estados Unidos, el candidato demócrata para la presidencia Joe Biden se ha manifestado en contra de esa política. El lunes, un portavoz de su campaña dijo que Biden “no cree que la Policía deba recibir menos fondos”. Mientras tanto, Joe Biden viajó a Houston el lunes para reunirse con la familia de George Floyd.
En la Cisjordania ocupada, palestinos se manifestaron el lunes en Ramala contra el plan de Israel de anexar Cisjordania. Los manifestantes también llevaban carteles en honor a George Floyd y en solidaridad con el levantamiento contra la brutalidad policial en Estados Unidos. Se trata de una de las tantas protestas de este tipo llevadas a cabo en los territorios palestinos ocupados y en Israel en los últimos días. El sábado, el senador Bernie Sanders se dirigió a las multitudes a través de una transmisión de video en una manifestación en Tel Aviv, durante la que dijo a los manifestantes que “la anexión debe ser detenida”.
Mientras tanto, en la ciudad cisjordana de Belén, se pintó un mural de George Floyd en el muro de separación con Israel. Esto es lo que dijo Mahmoud Abiedalla, quien tuvo la idea inicial del mural de homenaje.
Mahmoud Abiedalla declaró: “Pintamos en el muro del apartheid, por el que estamos atrapados, para dar un mensaje de solidaridad con los estadounidenses y de solidaridad con las personas negras que están siendo oprimidas en Estados Unidos, donde se puede ver la discriminación racial entre personas blancas y negras”.
En otras noticias sobre esa región, el Gobierno israelí revirtió recientemente la flexibilización de las restricciones impuestas por el coronavirus tras registrarse un aumento en los casos.
En noticias sobre inmigración, una queja presentada por dos grupos defensores de los derechos de los inmigrantes acusa al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de rociar un desinfectante contra el coronavirus probablemente peligroso más de 50 veces al día en el Centro de Detención Adelanto en California, en áreas mal ventiladas y con condiciones de hacinamiento. Las personas recluidas allí han reportado hemorragias nasales, desmayos, dolores de cabeza, dolor de estómago y una sensación de ardor en la piel después de entrar en contacto con el químico.
En noticias relacionadas, al menos un solicitante de asilo recluido por el Servicio de Inmigración en el Centro de Detención de Port Isabel, ubicado en el sur de Texas, ha entrado en su segunda semana de huelga de hambre en protesta por las condiciones precarias de detención y la falta de protección contra la COVID-19.
En España, un ex coronel del Ejército salvadoreño compareció el lunes ante un tribunal de Madrid para ser juzgado 30 años después de haber presuntamente orquestado en 1989 los asesinatos de seis sacerdotes jesuitas, así como de una madre y su hija adolescente en El Salvador. Cinco de las víctimas eran de nacionalidad española. Inocente Orlando Montano se desempeñó como Ministro de Seguridad de El Salvador y está acusado de ordenar el ataque, que fue llevado a cabo por una fuerza de contrainsurgencia entrenada por Estados Unidos. Montano vivió en Estados Unidos durante 16 años y fue extraditado a Madrid en 2017. De ser condenado, Montano podría enfrentar hasta 150 años de prisión.
La pacifista y exmonja Liz McAlister, de ochenta años de edad, fue condenada por irrumpir en la Base de Submarinos Navales de Kings Bay el 4 de abril de 2018, en protesta contra los programas de armas nucleares estadounidenses. La sentencia contra McAlister establece como pena el tiempo que ya cumplió la activista en prisión preventiva. La base de Georgia alberga al menos seis submarinos de misiles balísticos nucleares, cada uno de los cuales lleva 20 armas termonucleares Trident. Seis compañeros de McAlister, del grupo conocido como los 7 Plowshares de Kings Bay, que también están acusados por el hecho, serán sentenciados a finales de este mes. El lunes, durante la audiencia de la sentencia, McAlister sostuvo: “No me disculpo por lo que hice Creo que las armas son completamente destructivas para la vida”. Además de recibir como sentencia el tiempo que ya ha cumplido en prisión, la activista deberá pagar 25 dólares por mes y pasar tres años en libertad bajo supervisión. Liz McAlister estuvo en Democracy Now! en octubre de 2019 después de haber estado presa durante 17 meses.
Liz McAlister expresó: “Si alguna vez se utilizaran las municiones que hay en esos submarinos Trident, sería el fin de la vida en la Tierra. Sería el fin de la vida en la Tierra. Tengo que decir que no a eso. No tenemos derecho a destruir la creación de Dios”.
“Haga clic aquí para acceder a la entrevista completa con Liz McAlister (en inglés)”:
https://www.democracynow.org/es/2019/10/21/kingsbay_plowshares_seven_activists_trial