El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aceptó formalmente la nominación como candidato presidencial del Partido Republicano el jueves 27 de agosto por la noche, ante una multitud de unas 1.500 personas en el jardín sur de la Casa Blanca. Desafiando las normas de distanciamiento social, las y los asistentes se sentaron sin ninguna distancia entre sí y poca gente llevaba tapaboca. Si bien Estados Unidos registra cerca de 180.000 muertes por coronavirus —por lejos el número más alto del mundo—, Trump defendió repetidamente el manejo que ha hecho su gobierno de la pandemia. Además, advirtió sobre el caos y la violencia que habría en el país si gana Joe Biden, pero no hizo referencia al ataque policial a Jacob Blake en Kenosha, Wisconsin, ni al hecho de que uno de sus partidarios, de 17 años, haya asesinado a dos manifestantes en esta misma ciudad.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con el historiador Rick Perlstein, que sostiene que Trump da “una imagen del mundo que no se condice con la realidad” y que incita a la gente a actuar con violencia.