Analizamos el intento de golpe de Estado en Sudán, donde el 25 de octubre las fuerzas militares encabezadas por el general Abdel Fattah al-Burhan desplazaron al Gobierno de transición y detuvieron al primer ministro Abdalla Hamdok, así como a otros líderes políticos. Una multitud de manifestantes salió a las calles de Jartum para exigir que el Gobierno sea devuelto a los funcionarios civiles. Soldados sudaneses abrieron fuego y dejaron un saldo de, al menos, diez personas muertas y numerosas heridas. Naciones Unidas condenó el golpe y Estados Unidos suspendió el envió de un paquete de ayuda de emergencia a Sudán por un monto de setecientos millones de dólares. “Nadie apoya este golpe”, afirma Walaa Salah, abogada y activista de derechos humanos que participa en las protestas, en comunicación telefónica con Democracy Now! desde Jartum. “El control militar sería una regresión”. También hablamos con Isma’il Kushkush, periodista sudanés estadounidense que vivió y trabajó en Jartum durante años. Él señala que, para la mayoría de los ciudadanos sudaneses, “lo importante es que se haga la transición a un gobierno civil pleno, que haya elecciones”.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Walaa Salah e Isma’il Kushkush.