Sudáfrica ha detenido los planes para distribuir la vacuna contra la COVID-19 desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford después de que demostrara una eficacia mínima para prevenir los casos leves y moderados de coronavirus en las personas que se habían contagiado de la variante dominante en la región, que ha abrumado el sistema de salud de Sudáfrica.
Mientras tanto, el Gobierno británico aseguró a la población que la vacuna de Oxford y AstraZeneca es efectiva a la hora de prevenir las muertes y los casos graves de coronavirus y es eficaz contra la variante prevalente en el Reino Unido.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos han identificado cerca de 700 contagios de las variantes identificadas por primera vez en el Reino Unido, Sudáfrica y Brasil, que podrían haber evolucionado para propagarse con más rapidez o volver a contagiar a las personas que ya han tenido COVID-19.