Titulares24 de mayo de 2021

Continúa el alto el fuego entre Israel y la organización Hamas mientras los mediadores egipcios intentan mantener la relativa calma que sucedió al intenso ataque israelí que durante once días devastó la Franja de Gaza y provocó la muerte de al menos 248 palestinos, incluidos 66 menores. Pero las tensiones en la región no cesan: durante el viernes y el fin de semana las fuerzas armadas israelíes y grupos de colonos judíos ingresaron repetidas veces al recinto de la mezquita Al-Aqsa ubicada en la zona ocupada por Israel de Jerusalén Oriental y atacaron a varios fieles palestinos, según informan medios locales. Los habitantes de Gaza han comenzado a limpiar los escombros y evaluar los daños del devastador bombardeo israelí.

Mahmoud Mahdy: “Han destruido nuestros recuerdos, nuestras casas, nuestros apartamentos. Perdimos todo lo que teníamos, desde muebles hasta todos nuestros recuerdos de la infancia. Todo está destruido”.

La ONU anunció que emitirá un llamado de ayuda para la Franja de Gaza. Se teme que los casos de COVID-19 podrían aumentar aún más en esa región después de que los residentes se vieran obligados a huir de sus hogares y apiñarse en refugios para resguardarse de los ataques. Estados Unidos ha dicho que contribuirá a la ayuda para reconstruir Gaza, aunque se niega a condenar los ataques israelíes que causaron muerte y destrucción.

Mientras tanto, grandes manifestaciones en solidaridad con el pueblo palestino se llevaron a cabo en todo el mundo, incluido Estados Unidos. En Londres, se estima que unas 180.000 personas participaron en una marcha en apoyo del pueblo palestino. Estas fueron las palabras expresadas por una manifestante en París.

Nesrine Akhres: “Francia tiene varios acuerdos ventajosos en materia de importaciones con el Estado israelí. Es importante que todos los países que no respeten los derechos humanos sean sancionados, sin distinciones. Es incomprensible que Israel aún tenga completa impunidad al respecto”.

India registró el lunes más de 4.400 nuevas muertes por la COVID-19, lo que eleva su cifra oficial de muertes a más de 300.000 y lo convierte en el tercer país con mayor número de muertes después de Estados Unidos y Brasil. Los casos diarios de coronavirus en India han disminuido de forma significativa desde principios de mayo; el lunes se registraron 220.000 nuevos contagios. Los expertos afirman que tanto la cifra de muertes como la de contagios en ese país podrían ser aún mucho mayores.

Mientras tanto, la cifra total de muertes en América Latina ha superado el millón de muertes por COVID-19, lo que constituye alrededor del 30% del número de muertes en el mundo, a pesar de que el continente solo representa el 8% de la población mundial. El 45% de las muertes de la región corresponden a Brasil. El viernes, el estado de Maranhão emitió una multa al presidente brasileño de extrema derecha, Jair Bolsonaro, por negarse a respetar las normas de salud locales al organizar un acto político multitudinario y no usar mascarilla.
La Organización Mundial de la Salud señaló el viernes que la verdadera cifra mundial de muertes por la COVID-19 es probablemente dos o tres veces mayor que las cifras oficiales reportadas.

En Estados Unidos, el promedio de casos de coronavirus alcanzado en la última semana ha caído por debajo de los 30.000 por primera vez desde junio pasado, y la cifra diaria de muertes es similar a las registradas en ese país entre junio y septiembre de 2020. Los ingresos hospitalarios por coronavirus también continúan bajando en Estados Unidos. Al menos ocho estados del país —Rhode Island, Connecticut, Maine, Massachusetts, New Hampshire, Nueva Jersey, Vermont y Hawái— han administrado como mínimo una dosis de la vacuna contra la COVID-19 al 70% de su población adulta. El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, ha anunciado que a partir de septiembre las escuelas volverán a funcionar de forma totalmente presencial, sin clases virtuales.

El Gobierno de Biden brindará la oportunidad de obtener un estatus de protección temporal a más de 100.000 haitianos que residen actualmente en Estados Unidos. La medida se toma a raíz de la crisis política que atraviesa Haití e incluye permisos de trabajo y estatus de protección contra las deportaciones. El presidente haitiano, Jovenel Moïse, continúa haciendo caso omiso a los pedidos de renuncia, a pesar de que grupos de defensa de los derechos humanos han informado que Moïse autorizó ataques contra civiles en barrios pobres de la ciudad de Puerto Príncipe, y que se llevaron a cabo con impunidad asesinatos selectivos y amenazas contra opositores al Gobierno. El presidente Biden deportó a más haitianos durante sus primeros dos meses en el cargo que Donald Trump en el último año de su presidencia. Visite democracynow.org/es para obtener más información sobre esta decisión del Gobierno de Biden de extender el estatus de protección temporal a los inmigrantes haitianos.

Varios líderes internacionales acusan a Bielorrusia de “terrorismo de Estado” y “secuestro” después de que el Gobierno de ese país ordenara —bajo el falso pretexto de una amenaza de bomba— que un vuelo comercial fuera desviado a la capital de ese país, Minsk, para detener a un periodista crítico con el presidente Alexander Lukashenko. El avión de la aerolínea Ryanair realizaba un vuelo desde Atenas a Lituania, donde vive el periodista Roman Protasevich, de 26 años. Protasevich operaba las redes sociales de Nexta, un medio que cubrió la violenta represión de las protestas contra el Gobierno de Bielorrusia en 2020, que estallaron luego de la controvertida reelección de Lukashenko. La líder de la oposición bielorrusa, Sviatlana Tsikhanouskaya, que también se encuentra exiliada, se pronunció en contra del arresto de Protasevich.

Sviatlana Tsikhanouskaya: “Hoy Lukashenko ha provocado un escándalo internacional, ha utilizado aviones militares contra civiles en Bielorrusia y otros países europeos con el propósito de detener a una sola persona. [Luego de esto] nadie más estará a salvo. A cualquier persona le puede pasar lo que le sucedió a Roman Protasevich”.

En Birmania, Aung San Suu Kyi compareció en persona en una audiencia judicial por primera vez desde que ella y otros funcionarios fueron depuestos tras el golpe de Estado militar ocurrido el 1 de febrero en ese país. La líder birmana está acusada de varios delitos, entre ellos el de poseer “walkie-talkies” de forma ilegal y violar la ley de secretos de Estado. La ONU y otras organizaciones sostienen que estas acusaciones están motivadas por intereses políticos. El equipo de abogados de Suu Kyi afirma que la líder no tiene acceso a los periódicos y que solo está parcialmente al tanto de los eventos que han tenido lugar desde su arresto. Un grupo local de defensa de los derechos humanos sostiene que más de 800 personas han muerto y cerca de 4.300 fueron detenidas desde el 1 de febrero durante las grandes manifestaciones que estallaron en todo el país. Mientras tanto, combatientes rebeldes afirman que mataron a decenas de miembros de las fuerzas de seguridad birmanas durante el fin de semana.

En Bangladesh, la destacada periodista de investigación Rozina Islam obtuvo la libertad bajo fianza después de que su arresto de la semana pasada provocara una oleada de indignación internacional. Islam había informado sobre un caso de corrupción del Gobierno durante la gestión de la pandemia del coronavirus y fue detenida por violar la denominada Ley de Secretos Oficiales, una ley promulgada durante la época colonial cuya infracción conlleva una posible pena de muerte. Grupos a favor de la libertad de prensa están pidiendo que se retiren de inmediato los cargos contra la periodista.

Un potente ciclón se está gestando en el golfo de Bengala que, según se pronostica, impactará el miércoles el noreste de la India con vientos de alrededor de 160 kilómetros la hora. Esto se produce solo una semana después de que el estado de Gujarat, en la costa occidental de la India, sufriera uno de los ciclones más fuertes que ha azotado la región en más de dos décadas y que provocó la muerte de al menos 140 personas. Este fin de semana las autoridades informaron que se habían recuperado 61 cuerpos de una barcaza que se hundió en el mar Arábigo la semana pasada, que transportaba trabajadores del sector petrolero.

En el este de la República Democrática del Congo, al menos 15 personas murieron y miles de personas más se vieron obligadas a huir de sus hogares cuando la lava de un volcán cerca de la ciudad de Goma alcanzó sus pueblos y vecindarios. Los residentes de las zonas afectadas culpan al Gobierno por no haberles advertido de la inminente erupción del volcán.

Ernestine Kabuo: “Estaba con mi esposo, que es de edad avanzada, y no quería salir de casa porque estaba enfermo. No podía caminar. Me dije a mí misma: ’No puedo irme sola de mi casa. Hemos estado casados para bien y para mal. Volví a mi casa para intentar sacarlo, pero no pude. Tuve que escapar y él murió quemado dentro de la casa. No sé qué hacer. Maldigo este día”.

La lava de la erupción se quedó a poco más de un kilómetro y medio del principal aeropuerto de Goma, pero la ciudad, de un millón de habitantes, parece haberse salvado.

Estados Unidos experimentó otro fin de semana de muertos y heridos a raíz de al menos doce tiroteos masivos. Al menos once personas murieron y 69 resultaron heridas por la violencia con armas de fuego que se desató en los estados de Nueva Jersey, Carolina del Sur, Georgia, Ohio y Minesota. La organización sin fines de lucro Gun Violence Archive informó que 2021 es el segundo año consecutivo en el que Estados Unidos ha sufrido más de 60 tiroteos masivos durante el mes de mayo, y que se han registrado más de 229 tiroteos masivos desde el comienzo de 2021.

En Estados Unidos, en el estado de Mineápolis, varios miembros de la comunidad, activistas por los derechos civiles y familiares de George Floyd se reunieron para conmemorar el primer aniversario del asesinato de Floyd, ocurrido el 25 de mayo de 2020. Estas fueron las palabras expresadas por la pastora y organizadora comunitaria Carmen Means.

Carmen Means: “Entonces, ¿qué ha cambiado? Las cosas no han cambiado. Siguen igual. Lo que ha cambiado es que hemos empezado a ver las cosas de otra manera. El 25 de mayo se activó nuestro espíritu de lucha y lo hemos impulsado a otro nivel.

El asesinato de George Floyd a manos de la policía de Mineápolis desencadenó un levantamiento en todo el país y un movimiento global que pedía el fin del racismo y la defensa de las vidas negras. El presidente Biden recibirá mañana a la familia de Floyd en la Casa Blanca.

En el estado de Tennessee, un video recientemente publicado muestra el instante en que agentes de policía de la Cárcel del Condado de Marshall presionan sus rodillas durante casi cuatro minutos contra la espalda de un hombre atado de píes y manos y se burlan de él mientras este les suplica a los oficiales que no puede respirar. William Jennette, un hombre blanco de 48 años, murió durante esta violenta maniobra policial. La Oficina de Medicina Forense del Condado de Marshall dictaminó que la muerte de Jennette fue un homicidio y que murió por una combinación de dos factores: intoxicación por drogas y asfixia. A pesar del fallo, un gran jurado se negó a acusar a ninguno de los oficiales. El video muestra que Jennette gritó: “¡Ayuda! ¡Me van a matar!” mientras los oficiales lo insultaban y uno de ellos le decía: “No deberías poder respirar, estúpido”.

En noticias relacionadas con los medios, los accionistas han aprobado la adquisición, por un valor de 633 millones de dólares, de la empresa de publicación estadounidense Tribune Publishing por parte del fondo de alto riesgo Alden Global Capital, con sede en Nueva York. Los numerosos periódicos de la empresa Tribune Publishing incluyen el Chicago Tribune, The Baltimore Sun y el New York Daily News. El fondo de alto riesgo Alden Global Capital, que ya posee alrededor de 100 periódicos y 200 publicaciones, es conocido por realizar importantes recortes en los periódicos locales para obtener más ganancias. El medio More Perfect Union informa que el fondo Alden redujo drásticamente el personal del periódico The Denver Post en un 75% y cerró seis salas de redacción en 2020. Aproximadamente la mitad de la circulación diaria de periódicos locales en Estados Unidos está actualmente controlada por fondos de alto riesgo.