La Asociación Médica de Nigeria ha alertado sobre la propagación de enfermedades transmitidas por el agua en ese país, luego de las inundaciones sin precedentes que causaron la muerte de más de 600 personas y dañaron o destruyeron por completo más de 200.000 viviendas. Organizaciones de ayuda humanitaria afirman que las inundaciones han provocado un gran aumento en los casos de cólera y otras enfermedades prevenibles como la diarrea y la fiebre tifoidea. Las personas sobrevivientes están cada vez más indignadas por la ineficiente respuesta de las autoridades nigerianas ante las inundaciones, que han obligado a un millón y medio de personas a abandonar sus hogares.
Chinyere Johnson: “Mi casa y mi comunidad están inundadas; la gente está sufriendo; no hay agua potable ni luz. Es una situación terrible”.