Cómo llegó Wisconsin a convertirse en el laboratorio del Partido Republicano para desmantelar la democracia en Estados Unidos

AMY GOODMAN: Esto es Democracy Now!, democracynow.org, el informativo de guerra y paz. Soy Amy Goodman. Continuamos nuestra conversación con Ari Berman, uno de los periodistas que más cubre lo relacionado con derechos electorales, reportero del medio Mother Jones, autor del libro “Give Us The Ballot”, que analiza el pasado y el presente de la lucha por el derecho al voto en EE.UU. Su artículo más reciente se titula “Cómo llegó Wisconsin a convertirse en el laboratorio del Partido Republicano para el desmantelamiento de la democracia”. Ari, ¿puede explicar lo que ha encontrado?

ARI BERMAN: Absolutamente, Amy, y gracias por invitarme al programa para hablar de este tema. Wisconsin es de verdad un caso de estudio de cómo los republicanos están desmantelando la democracia en tiempo real, en este mismo momento, pero también es un proyecto que lleva en pie más de una década, durante la cual los republicanos han intentado crear un escenario en el que sus mayorías no resulten afectadas por los votos y en el que puedan controlar el estado sin importar lo que suceda políticamente. Primero fue la elección del gobernador Scott Walker en 2011 y el subsecuente debilitamiento de los sindicatos, la restricción del derecho al voto, el desmantelamiento del sistema de financiación de campañas del estado. Luego fue la manipulación extrema de los distritos electorales, que básicamente les ha dado a los republicanos el control de la Legislatura estatal durante la última década. En 2011, los republicanos aprobaron los mapas electorales más manipulados del país. En 2021 aprobaron una nueva redistribución, más manipulada, de los distritos electorales. Ahora los republicanos en la Legislatura estatal están a punto de obtener una mayoría cualificada en el estado, lo que les permitiría anular cualquier veto por parte del gobernador demócrata Tony Evers, si es reelegido. Lo que tenemos en Wisconsin es una paradoja. Es un estado bastante disputado, pero en la Legislatura estatal están a punto de alcanzar una supermayoría republicana de dos tercios, lo que significa que la Legislatura está completamente alejada de la realidad del resto del estado y se han negado a aprobar medidas populares como la expansión de Medicaid o controles para la venta de armas. Se negaron a derogar una prohibición del aborto de 1849 que no establece excepciones para casos de violación o incesto. En el dictamen del caso “Dobbs vs. Jackson Women’s Health Organization”, el juez de la Corte Suprema Samuel Alito dijo que hay que dejar el tema del aborto en manos de los representantes elegidos por el pueblo. Pero lo que Wisconsin ha demostrado es lo desconectados que están los representantes del pueblo del pueblo mismo.

AMY GOODMAN: Hable sobre lo que representa la manipulación de los mapas electorales y cómo Wisconsin ha sido un laboratorio en el país para temas que van desde la asistencia social hasta este tipo de manipulación electoral. Y luego, ¿cómo encaja esto en otra contienda para un escaño en el Senado federal que esta siendo seguida muy de cerca y en la cual Mandela Barnes podría dar la sorpresa y derrotar a Ron Johnson?

ARI BERMAN: Es importante tener en cuenta que Wisconsin ha tenido una larga historia progresista durante muchos años. Era un estado que sentó las bases para políticas como la seguridad social, el derecho de negociación colectiva y la elección directa de los miembros del Senado de EE.UU. a principios del siglo XX. Durante el gobierno de Scott Walker, el estado se convirtió en un laboratorio para el conservadurismo antidemocrático. Grupos como la Fundación Bradley han invertido mucho dinero para tratar de privatizar las escuelas, desmantelar los sindicatos y las leyes de financiamiento de campañas y para suprimir el derecho al voto. Eso se ha acelerado dramáticamente con la manipulación extrema que estamos viendo de los mapas electorales. Básicamente, lo que los republicanos pueden hacer en Wisconsin es que pueden anular la voluntad del electorado. No tienen que aprobar políticas populares y pueden hacer cosas extremas porque sienten que no tendrán que rendir cuentas. Los demócratas a menudo obtienen más votos que los republicanos, pero los republicanos tienen estas grandes mayorías en la Legislatura estatal. En 2018, por ejemplo, los demócratas ganaron las cinco contiendas a nivel estatal en Wisconsin, incluida la Gobernación. Los demócratas recibieron el 53% de los votos para la Asamblea Estatal pero solo obtuvieron el 36% de los escaños. En este momento hay una contienda muy reñida para la Gobernación, así como para el Senado de Estados Unidos, pero los republicanos podrían estar a punto de obtener una mayoría de dos tercios en la Legislatura. Esa es una situación muy preocupante para la democracia, porque eso significa que, esencialmente, esa Legislatura, con distritos fuertemente manipulados y sin mecanismos de rendición de cuentas, podría estar a cargo de la celebración de las elecciones en el estado. Eso pone en grave riesgo la limpieza de las elecciones presidenciales de 2024.

AMY GOODMAN: Usted ha escrito sobre cuál es el plan republicano para un gobierno de un solo partido este año. Explique a qué se refiere.

ARI BERMAN: Básicamente, lo que los republicanos quieren hacer es tomar el control en 2022 en estados clave como Wisconsin, para que Trump pueda llevar a cabo con éxito un golpe de Estado en 2024. Ustedes recordarán que Trump les pidió a las Legislaturas estatales controladas por los republicanos, en lugares como Wisconsin, que revocaran el mandato del pueblo. No lo hicieron así porque en algunos casos no tenían el poder de hacerlo. En Wisconsin, el gobernador certifica el resultado de las elecciones presidenciales. Lo que los republicanos quieren hacer es obtener una mayoría cualificada de dos tercios en Wisconsin para que la Legislatura, cuyos distritos están altamente manipulados, esté a cargo de certificar las elecciones. Eso podría significar que podrían anular el resultado del voto popular en estos estados. Creo que es muy importante tener en cuenta que en estas elecciones estatales de 2022 se va a elegir a gobernadores, secretarios de Estado estatales, fiscales generales estatales, pero también quién controla las Legislaturas, y eso va a tener un gran impacto en si tendremos unas elecciones limpias en 2024. Creo que mucha gente solo presta atención a las elecciones presidenciales, pero si pasan por alto estas elecciones de mitad de mandato luego va a ser demasiado tarde. Lo que suceda en los estados tendrá un gran impacto sobre lo que suceda a nivel nacional. Wisconsin se ha convertido en el laboratorio para el desmantelamiento de la democracia, no solo en ese estado, sino en todo el país. La supresión de votantes, el debilitamiento de los sindicatos, los ataques a las leyes de financiamiento de campañas, estas son cosas que sucedieron en Wisconsin y luego se exportaron a otros estados para convertirse no solo en un modelo estatal, sino también en un modelo nacional. Así que lo que está pasando en lugares como Wisconsin no solo afecta a Wisconsin, sino a todo el país.

AMY GOODMAN: Por último, hablando de Mandela Barnes, el actual vicegobernador que podría convertirse en la primera persona negra en representar a Wisconsin en el Senado federal, si derrota al republicano Ron Johnson en noviembre. Durante las protestas en Kenosha, Wisconsin, en 2020, hablamos con Barnes y le pregunté qué se estaba haciendo a nivel estatal en torno a la reforma policial.

MANDELA BARNES: Presentamos, o el gobernador presentó un paquete legislativo. Sabemos que un paquete legislativo no va a resolver los problemas profundos, ya que se necesita un esfuerzo coordinado. Necesitamos tomar medidas en todos los niveles de gobierno reimaginando la forma en que mantenemos la seguridad de la gente. El eje central es asegurarse de que hay financiación lista para prevenir la violencia, como programas para interrumpir los ciclos de violencia, pero también ofrecer apoyo a las organizaciones comunitarias, ofrecer apoyo a los programas de capacitación laboral, o lo que sea necesario, para crear comunidades, para crear sociedades donde las personas tengan la oportunidad de prosperar, donde menos policías sean necesarios para responder a cualquier cosa que ocurra.

AMY GOODMAN: Ese era Mandela Barnes, quien podría ser la primera persona en representar a Wisconsin en el Senado de Estados Unidos. ¿Puede hablar sobre esta elección al Senado de Wisconsin, estado que usted ha recorrido, y de qué otras contiendas considera importantes en este decisivo año electoral?

ARI BERMAN: En primer lugar, creo que es importante tener en cuenta que la reforma de la justicia penal era muy popular en Wisconsin, y cuando fue presentada ante la Legislatura esta fuertemente manipulada Legislatura no tomó ninguna medida al respecto. Así que la falta de una reforma de la justicia penal en Wisconsin también es víctima de la manipulación de los distritos electorales. Pero los republicanos están machacando a Mandela Barnes en el tema de “Desfinanciar a la policía”. Cuando estuve allí, no paraban de emitir anuncios de la campaña de Ron Johnson diciendo que Mandela Barnes quería desfinanciar a la policía. Eso no es verdad. Han tergiversado sus palabras. Pero creo que la idea que están tratando de crear es que la elección del primer Senador negro de Wisconsin parezca algo que da miedo y es peligroso y que va a traer más crimen. Así que creo que Ron Johnson está llevando a cabo una campaña muy racista contra Mandela Barnes. Creo que eso está siendo negativo para Mandela Barnes y que lo va a tener difícil para contrarrestar esos ataques y lograr un puesto en el Senado de EE.UU. Pero las elecciones en este estado están muy reñidas. No solo estoy poniendo atención al Senado de EE.UU; estoy poniendo atención a si Tony Evers, el gobernador demócrata, es reelegido, así como a si los republicanos obtienen una mayoría cualificada en la Legislatura estatal. Así que creo que hay muchas contiendas electorales realmente importantes. Creo que Wisconsin es un claro microcosmos de lo que ocurre en el resto del país, y estas elecciones estatales tienen una tremenda importancia, y tienen una tremenda importancia no solo para la política estatal, sino también para la nacional.

AMY GOODMAN: Ari Berman, gracias por estar en nuestro programa. Reportero senior de la revista Mother Jones. Enlazaremos a su artículo titulado “Cómo Wisconsin se convirtió en el laboratorio republicano para el desmantelamiento de la democracia”. Ari es autor de “Give Us the Ballot”, que analiza el pasado y el presente de la lucha por el derecho al voto en EE.UU. Tras la pausa, vamos a Florida, a hablar con el activista por el derecho al voto Desmond Meade sobre cómo el gobernador republicano Ron DeSantis está tratando de asustar a personas exconvictas para que no voten mediante el uso de su recién formada “policía electoral” llevando a cabo arrestos de personas acusadas de fraude electoral. Volvemos en 30 segundos.

Traducido y editado por Igor Moreno Unanua e Iván Hincapié.