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En Chicago el 3 de febrero estallaron las protestas por la liberación anticipada del exagente de policía blanco Jason Van Dyke que, en 2014, había sido condenado por matar a un joven negro de 17 años llamado Laquan McDonald. Van Dyke fue el primer agente de policía de Estados Unidos acusado de homicidio por haberle disparado a una persona mientras estaba de servicio. Lo condenaron a casi siete años de cárcel, pero fue liberado antes de tiempo por “buen comportamiento” tras cumplir apenas poco más de tres años de la condena. Su sentencia por asesinato se produjo recién un año después del ataque, cuando activistas de la comunidad presionaron para que la policía de Chicago publicara las imágenes de video que mostraban a Van Dyke disparando a McDonald por la espalda 16 veces mientras el adolescente se alejaba de la escena. Hablamos con el organizador comunitario Will Calloway que presionó para que se publicara el video, y con el activista Justin Blake, tío de Jacob Blake, víctima de un ataque policial. Blake apoya los pedidos al Fiscal General, Merrick Garland, para que presente cargos federales de derechos civiles contra Van Dyke. Ambos fueron detenidos y se presentaron cargos en su contra a nivel federal después de que participaran en las protestas el 3 de febrero.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Will Calloway y Justin Blake.