La Corte Suprema de Estados Unidos anunció el jueves que aceptará un caso que, según especialistas en el tema, podría ser una de las mayores amenazas a la democracia estadounidense desde la fatal insurrección del 6 de enero en el Capitolio. El tribunal escuchará en octubre los alegatos del caso Moore contra Harper, que busca restablecer distritos electorales manipulados que ya fueron anulados por la Corte Suprema de Carolina del Norte. Se trata de los mapas que configuran las elecciones de representantes en el Congreso de Estados Unidos. Un fallo de la Corte Suprema a favor del Partido Republicano de Carolina del Norte podría reactivar una teoría legal marginal —sostenida por la derecha estadounidense— conocida como doctrina de la legislatura estatal independiente. Esto podría despojar a los tribunales estatales de su poder para revocar las leyes estatales, al tiempo que expandiría el poder de las legislaturas estatales de mayoría republicana para controlar las elecciones federales. Hablamos con la profesora de derecho Carolyn Shapiro, directora del Instituto de estudios sobre la Corte Suprema de Estados Unidos de la Facultad de Derecho de Chicago-Kent. Shapiro sostiene que un fallo a favor del Partido Republicano de Carolina del Norte sería “extremadamente problemático desde la perspectiva de la democracia” y “podría causar un enorme caos”.
Para ampliar esta información, vea (en inglés) nuestra conversación con Carolyn Shapiro.