En Egipto, opositores al presidente Abdel Fattah el-Sisi afirman que han enfrentado actos de violencia y otros obstáculos que les impiden inscribir a sus candidatos para las elecciones presidenciales que se celebrarán en diciembre en ese país. Según la ley egipcia, los candidatos tienen hasta el 14 de octubre para obtener al menos 25.000 firmas de sus seguidores. Sin embargo, decenas de personas han sido detenidas al intentar presentar sus firmas, mientras que otras han sufrido ataques por parte de grupos violentos bien organizados integrados por activistas a favor del Gobierno. Estas fueron las palabras expresadas por Rania el-Sheik, quien afirma que su delegación fue atacada por un grupo de “matones” mientras intentaban recabar firmas.
Rania el-Sheik: “Cuando vimos que se estaba gestando la pelea, tratamos de apartarnos. Bueno, lo intentamos. Me tiraron del pelo y empezaron a golpear a mi colega en el hombro”.
Ahmed Tantawi, un crítico acérrimo del presidente el-Sisi y la figura más destacada de la oposición que intentaba competir contra él en las elecciones, suspendió temporalmente su campaña la semana pasada después de que la policía arrestara a decenas de sus partidarios. Mientras tanto, investigadores del laboratorio interdisciplinario Citizen Lab y de la firma consultora de Google Threat Analysis Group hallaron que el teléfono personal de Tantawi había sido jaqueado por el software espía Predator y que las autoridades egipcias podrían estar detrás de ese jaqueo. Mohamed Anwar al-Sadat, líder del Partido de Reforma y Desarrollo de Egipto y sobrino del expresidente egipcio, pidió al Gobierno de el-Sisi que brindara las garantías para la celebración de unas elecciones libres y justas.
Mohamed Anwar Esmat Sadat: “Si las elecciones no se celebran de la manera que todo el mundo espera que se haga, esto tendrá resultados realmente malos para la reputación y la credibilidad de este régimen, e incluso para su futuro”.