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Una nueva investigación incriminatoria del medio ProPublica revela que el juez de la Corte Suprema Clarence Thomas asistió a múltiples eventos de recaudación de fondos vinculados a los multimillonarios hermanos Koch, quienes han creado una red de incidencia política que aporta millones de dólares a causas conservadoras y canaliza grandes donaciones a las campañas del Partido Republicano. Hablamos del tema con Justin Elliot, reportero de ProPublica que cubre temas de corrupción y ética en la Corte Suprema, quien señala que el juez “no reveló nada de esto, como es debido, en sus declaraciones financieras anuales”. Elliot explica que podría haber un conflicto de intereses, ya que Thomas “está pasando tiempo con personas como los Koch que tienen un interés activo en las decisiones de la Corte Suprema”. A la vez, en estos momentos se está revisando un caso que la Corte Suprema trató en la década de 1980, conocido como “Chevron”, que sentó un precedente sobre el poder de las agencias federales para emitir regulaciones en áreas que van desde el medio ambiente hasta los derechos laborales y la protección del consumidor. Con la revisión del caso se busca, justamente, limitar ese poder. “Si esta doctrina establecida en el caso “Chevron” es anulada por la Corte Suprema, para las empresas será muchísimo más fácil impugnar una regulación que no les gusta”, dice Elliott.
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