En Londres, el Tribunal Superior de Justicia británico ha suspendido la extradición de Julian Assange hasta que Estados Unidos brinde garantías de que Assange tendrá un juicio justo en ese país y que no enfrentará la pena de muerte. Si no se garantizan esas condiciones, Assange tendrá derecho a apelar su extradición a EE.UU. en una nueva audiencia. Hablando fuera del tribunal el martes, Stella Assange pidió al Gobierno de Biden que “abandone este vergonzoso caso” contra su esposo. “Julian no debería haber estado en prisión ni un solo día”, agregó. Hablamos con el parlamentario británico Jeremy Corbyn, quien dirigió el Partido Laborista del Reino Unido de 2015 a 2020 y es uno de los dirigentes políticos que reclama que se retiren todos los cargos contra Assange. “La presión debe hacerse ahora sobre el Gobierno de Biden”, sostiene Corbyn. “Si Julian pierde este caso, todos los periodistas serios del mundo serán un poco más cautelosos a la hora de exponer crímenes de guerra, de exponer la codicia corporativa”.
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