El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, fue liberado de la prisión de Belmarsh, en Londres —donde pasó los últimos cinco años— tras la firma de un acuerdo de culpabilidad con los fiscales estadounidenses. Después de una batalla judicial de más de una década, Assange ha aceptado declararse culpable de un solo delito grave vinculado a la obtención y divulgación ilegal de material de seguridad nacional de EE.UU., por haber publicado en Wikileaks documentos clasificados que detallan crímenes de guerra estadounidenses en Irak y Afganistán. Según los términos del acuerdo firmado, el editor australiano recibirá una sentencia de prisión que equivale al tiempo que ya ha pasado en Belmarsh y se le permitirá regresar a su casa, desde donde probablemente intentará obtener un indulto. Hablamos con el hermano de Assange, Gabriel Shipton, quien cuenta que recibir la noticia de la liberación de su hermano fue “un momento increíble”. Conversamos con Shipton acerca del caso de Assange, cómo se llegó a los últimos acontecimientos y qué espera que suceda a continuación.
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Transcripción
AMY GOODMAN: El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, está libre. Assange ha sido liberado de prisión en el Reino Unido tras aceptar un acuerdo de culpabilidad con fiscales estadounidenses. Ahora se encuentra volando hacia la isla de Saipán, en el Pacífico, en las Islas Marianas del Norte, donde el miércoles, 26 de junio por la mañana comparecerá ante un juez federal de EE.UU. Como parte del acuerdo de culpabilidad, Assange se declarará culpable de un solo cargo por el delito grave vinculado a la obtención y divulgación ilegal de material de seguridad nacional. Se prevé que Assange sea sentenciado a tiempo ya cumplido y se le permitirá regresar a su casa en Australia.
La impactante noticia pone fin a más de una década de batallas legales que Julian Assange ha enfrentado por haber publicado documentos clasificados que detallaban crímenes de guerra cometidos por EE.UU. en Irak y Afganistán, incluyendo un video que mostraba un helicóptero militar Apache estadounidense disparando y matando a 12 civiles en Bagdad, entre ellos dos periodistas de Reuters. WikiLeaks tituló el vídeo “Asesinato colateral”.
Grupos a favor de la libertad de prensa han denunciado sucesivamente a múltiples Gobiernos estadounidenses por sus ataques contra Assange, quien habría enfrentado una sentencia de hasta 175 años de cárcel en EE.UU. si hubiese sido extraditado y condenado.
Este mes se cumplen doce años desde que Julian Assange entró a la Embajada de Ecuador, donde se le otorgó asilo político. Allí pasaría los siguientes siete años. Los últimos cinco años los ha pasado encerrado en la estricta cárcel de Belmarsh en Londres. Su esposa, Stella Assange, dijo hoy que Julian pedirá un indulto después del acuerdo de culpabilidad.
STELLA ASSANGE: Por supuesto, lo que creo es que el proceder correcto del Gobierno de Estados Unidos debería haber sido abandonar el caso por completo. Intentaremos obtener un indulto, obviamente. Pero el hecho de que haya una declaración de culpabilidad estipulada en la Ley de Espionaje en relación con la obtención y divulgación de información sobre defensa nacional constituye obviamente una preocupación muy seria para los periodistas y los periodistas de seguridad nacional en general.
AMY GOODMAN: Esta mañana, el primer ministro australiano, Anthony Albanese, dijo que quería que Julian Assange fuera llevado de regreso a Australia lo antes posible.
PRIMER MINISTRO ANTHONY ALBANESE: He sido muy claro, como líder laborista de la oposición, pero también como primer ministro, que sin importar las opiniones que la gente tenga sobre el accionar del señor Assange, el proceso se ha prolongado durante demasiado tiempo. No hay nada que ganar al mantenerlo encarcelado y lo queremos de regreso en casa en Australia. Y nos hemos comprometido y hemos defendido los intereses de Australia utilizando todos los canales apropiados para poder lograr un resultado positivo, y lo he hecho desde el principio de mi mandato como primer ministro. Tendré más para decir cuando estos procedimientos legales hayan concluido, lo cual espero sea muy pronto, e informaré como corresponda en ese momento.
AMY GOODMAN: Soy Amy Goodman en Nueva York, con el copresentador de Democracy Now! Juan González, desde Chicago. Hola, Juan.
JUAN GONZÁLEZ: Hola, Amy. Damos la bienvenida a todos nuestros oyentes y espectadores en todo el país y alrededor del mundo.
AMY GOODMAN: Este es un acontecimiento realmente sorprendente. Nos conectamos ahora con tres invitados. Desde Washington D.C. nos acompaña Trevor Timm, director ejecutivo de la fundación Freedom of the Press, la cual ha luchado por mucho tiempo para lograr la liberación de Assange. Desde Sídney, Australia, nos acompaña Antony Loewenstein, periodista independiente que ha apoyado a WikiLeaks por años y autor del libro superventas “El laboratorio palestino: cómo Israel exporta al mundo la tecnología de la ocupación”. También nos acompaña el medio hermano de Julian Assange, el cineasta Gabriel Shipton, desde La Rochelle, Francia.
Gabriel, ¿puede hablar sobre estos últimos acontecimientos, que han sorprendido a mucha gente en todo el mundo? Mientras hablamos, el vuelo de Julian Assange ha hecho una parada en Bangkok; él ha salido de la prisión de máxima seguridad de Belmarsh y se dirige a Saipán, donde se presentará ante un tribunal de distrito de EE.UU. y luego podrá regresar a Australia como un hombre libre. ¿Cómo se dio todo esto?
GABRIEL SHIPTON: Bueno, han pasado años, muchos, muchos años de lucha, en muchos niveles en todo el Gobierno, en el Congreso, a través de los medios de comunicación y de organizaciones no gubernamentales, organizaciones de defensa como la fundación Freedom of the Press de Trevor Timm. Esta ha sido una gran campaña tanto a nivel global como a nivel de bases. Y esta es la culminación de esa campaña.
El Gobierno australiano ha… Como lo acabamos de escuchar del primer ministro, el Gobierno australiano ha estado realmente al frente de la lucha en estos últimos momentos, asegurándose de que Julian pueda regresar a casa. Es el único Gobierno que puede representarlo diplomáticamente. Pero en realidad ha sido la presión del pueblo australiano lo que los llevó a defender tan firmemente a Julian Assange.
He estado hablando con Julian durante la última semana. Se ha estado preparando para subir a este vuelo. Todo parece muy surrealista y abrumador. Estamos muy contentos como familiares de Julian. Sin embargo, todavía tiene un par de obstáculos que superar, como ustedes mencionaron, antes de que llegue completamente sano y salvo a suelo australiano. Pero Stella y mi papá están deseando reunirse con él en la pista de aterrizaje una vez que llegue a Australia. Este es un momento muy feliz para todos nosotros, Amy y Juan.
Y quiero darles las gracias, también, por sus informes sobre este caso. Sin medios de comunicación como el suyo, la gente no hubiera sabido lo que estaba pasando. Y sé que muchos de sus espectadores han abogado por Julian, y quiero agradecerles por ello, también, desde el fondo de nuestros corazones. Y sí, es un momento increíble.
JUAN GONZÁLEZ: Gabriel, durante varias semanas ha habido algunos informes sobre un posible e inminente acuerdo de culpabilidad que supondría la liberación de Julian. ¿Podría hablarnos sobre, en base a sus conversaciones con su hermano, qué fue lo que finalmente logró eso y por qué está volando a las Islas Marianas del Norte para comparecer allí ante un tribunal federal? ¿Qué información tiene usted de eso?
GABRIEL SHIPTON: Hay una… Había una apelación ante el Tribunal Superior, cuya audiencia se iba a celebrar el 9 y 10 de julio en el Reino Unido. Y esa audiencia de apelación fue… La apelación de Julian fue aprobada, y se basaba específicamente en las partes del caso con relación a la libertad de expresión, a que Julian no disfrutaría del derecho a la libertad de expresión si fuera extraditado a Estados Unidos. Entonces, al Departamento de Justicia se le acababa el tiempo para impulsar esto. Dudo que hubieran querido tener un caso de muy alto perfil sobre libertad de expresión en los tribunales del Reino Unido durante esta temporada de elecciones. Así que creo que hubo un poco de presión para resolver esto. También se acercan las elecciones en el Reino Unido. Pero tengo que dar crédito a todo el mundo que ha estado defendiendo esto durante tanto tiempo, porque esto no habría sido posible sin ellos.
La escala en las islas se debe a que es la jurisdicción de EE.UU. más cercana a Australia, para que Julian pueda detenerse allí en su camino de regreso a Australia, y el juez pueda, esperemos, aceptar el acuerdo de culpabilidad. Ese es el motivo por el cual va a hacer una parada allí. Está a solo seis horas de Australia, y está en el camino de regreso del Reino Unido.
JUAN GONZÁLEZ: Y en base a sus conversaciones con Julian en las últimas semanas, ¿cuál es su estado de salud? Porque ha habido muchas preocupaciones durante los años de encarcelamiento y restricciones en cuanto a su salud.
GABRIEL SHIPTON: Sí, bueno, su salud física y su bienestar mental han empeorado durante su tiempo en prisión. Él tiene… bueno, todavía no, pero con suerte, mañana o en los próximos días podrá descansar y recuperarse, y pasar tiempo con sus dos hijos pequeños y su esposa, Stella. Sí, es un momento muy feliz para nosotros. Los médicos con los que he hablado que han visto a Julian han dicho que se puede recuperar. Entonces, esperamos que tenga algo de tiempo para hacer eso, que pueda tener algo de tranquilidad, y escuchar el canto de los pájaros y tal vez nadar en el océano.
Hablé con Julian y me dijo que él estaba esperando a, tal vez, ir a algunos de los lugares o ver algunos de los lugares por los que solía deambular en Melbourne. Pero creo que la vida va a ser un poco diferente para Julian ahora. La última vez que estuvo en Melbourne o en Australia fue hace muchos, muchos años, antes de tener tanta fama o notoriedad. Entonces, la vida va a ser diferente para él, pero será una vida en libertad, algo por lo que todos estamos muy entusiasmados.
AMY GOODMAN: Gabriel Shipton, felicidades. Hermano de Assange, se comunicó con nosotros desde La Rochelle, Francia, donde está en un festival de cine. También es el productor de una película sobre Julian Assange y su padre llamada “Ithaka”. Ahora vamos a una pausa y cuando volvamos hablaremos con Trevor Timm en Washington D.C., en la fundación Freedom of Press, y con Antony Loewenstein, que vive en Australia, a donde Julian Assange se dirige ahora. Quédense con nosotros.
Traducido y editado por Igor Moreno Unanua e Iván Hincapié.