La noticia desató el caos en los aeropuertos británicos, en plena temporada de vacaciones de verano. Cientos de vuelos fueron cancelados mientras las aerolíneas impusieron estrictas medidas de seguridad. En varios aeropuertos se desplegaron agentes de policía armados y ya no se permite que los pasajeros lleven equipaje de mano en la cabina. Las autoridades dicen que las aerolíneas marcadas como objetivo de los ataques eran United, American y Continental, con destino a Nueva York, Washington y California.
La revelación provoca aumento en la seguridad y cancelación de vuelos
Titular11 Ago. 2006