Funcionarios británicos han nombrado y congelado los activos de diecinueve de las 24 personas que se encuentran detenidas bajo sospecha de conspirar para derribar aviones comerciales que se dirigían a Estados Unidos. La policía dijo que el plan era hacer pasar explosivos líquidos como bebidas en un máximo de diez aviones, mediante detonadores ocultos en aparatos electrónicos.
El sub-comisario de la Policía de Londres, Paul Stephenson, dijo: “Creemos que el objetivo de los terroristas era introducir explosivos dentro de los aviones en los equipajes de mano y detonarlos en pleno vuelo. También creemos que los vuelos que tenían como objetivo partían del Reino Unido hacia Estados Unidos”.
Todos los detenidos son ciudadanos británicos de entre 17 y 35 años, y se cree que la mayoría de ellos es de origen pakistaní. Se dijo que uno de los sospechosos es una madre joven. Las autoridades británicas afirman que han estado investigando a los sospechosos durante casi un año. Por su parte, Pakistán asegura haber participado en desbaratar el complot. Un representante del gobierno dijo que Pakistán arrestó la semana pasada a dos británicos de ascendencia pakistaní en una operación coordinada. No obstante, mientras que las autoridades británicas estipulan que las principales figuras han sido atrapadas, ABC News citó a funcionarios estadounidenses —cuya identidad no fue revelada— que afirmaron que aún cinco sospechosos se encuentran en libertad.