Mientras tanto en Ciudad del Vaticano, el Papa Benedicto XVI reiteró sus recientes llamados a un inmediato cese del fuego.
El Papa Benedicto XVI dijo: “Nuestros ojos están llenos de imágenes horribles de los cuerpos mutilados de tanta gente, especialmente de niños, y estoy pensando específicamente en Qana en el Líbano. Quisiera reiterar que nada puede justificar el derramamiento de sangre inocente, por ningún motivo y de dónde sea que provenga. Con el corazón colmado de pesar, renuevo una vez más un fuerte llamado al inmediato cese de todas las hostilidades y de toda la violencia”.