En Irak, el número de civiles fallecidos el mes pasado alcanzó la cifra más alta desde que comenzó el aumento de soldados estadounidenses en febrero. Los registros del gobierno indican que casi dos mil civiles iraquíes murieron en mayo. El número de muertos fue casi un 30% más alto que en abril. Además, se estima que al menos 174 soldados y policías iraquíes murieron durante el mismo período de tiempo.
Mientras tanto, catorce soldados estadounidenses murieron durante los primeros tres días de junio. A excepción de uno de ellos, todos murieron en atentados con bombas que fueron colocadas al borde de carreteras. El número de soldados estadounidenses que murieron en la guerra ahora se aproxima a los 3.500. Mayo fue el tercer mes más letal de la guerra para las fuerzas estadounidenses, ya que se informó la muerte de 127 soldados.
Crece la preocupación de que se abra un nuevo frente en la guerra de Irak. El domingo, las fuerzas turcas bombardearon una región montañosa del norte de ese país y trasladaron tanques a la frontera iraquí. Turquía dijo que el blanco del ataque eran combatientes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán, o PKK.
En otra noticia de Irak, la organización Reporteros Sin Fronteras solicita que se establezca una unidad de la policía especial iraquí para que investigue el asesinato de periodistas. Doce periodistas fueron ultimados en mayo, lo que lo convirtió en el mes más letal de la guerra para los trabajadores de los medios. El jueves, el camarógrafo iraquí Saif Fakhry, que trabajaba para Associated Press, fue asesinado a balazos en Bagdad. Esa misma semana, el corresponsal de la Agencia de Noticias Nacional de Irak Abdul Rahman al-Isawi fue sacado por la fuerza de su casa y asesinado a balazos. Nazar Abdul Wahid, un periodista de la Agencia de Noticias Aswat al-Irak, fue asesinado frente a un hotel, y Mahmoud Hakim Mustafa, quien dirigía un periódico, también fue asesinado a balazos cerca de su casa en el norte de Irak.
Los candidatos presidenciales demócratas se reunieron anoche en New Hampshire para llevar a cabo un debate. El ex senador John Edwards acusó a los senadores Hillary Rodham Clinton y Barack Obama de no ofrecer un liderazgo fuerte para poner fin a la guerra.
Obama y Clinton rechazaron las críticas de Edwards
El ex senador Mike Gravel dijo que los demócratas también son cómplices de la guerra de Irak. El congresista Denis Kucinich dijo que el Congreso tiene la facultad de poner fin a la guerra ya mismo, simplemente cortando los fondos. Luego del debate, el senador Chris Dodd criticó a la CNN por darle más tiempo a los senadores Obama y Clinton. Obama habló durante dieciséis minutos. Dodd, Kucinich, Gravel y el senador Joe Biden tuvieron menos de nueve minutos al aire cada uno.
Mientras los demócratas debatían sobre la guerra, el hombre que comandó las fuerzas de la coalición dirigidas por Estados Unidos durante el primer año de la guerra, dijo que Estados Unidos se puede olvidar de ganar la guerra en Irak. En su primera entrevista desde que se retiró, el teniente general del Ejército, Ricardo Sánchez, le dijo a la Agencia France Press: “Pienso que si hacemos lo correcto política y económicamente hablando, con los líderes iraquíes correctos, aún podemos lograr al menos un estancamiento donde nadie gane o pierda, por así decirlo, no un estancamiento pero al menos evitar la derrota”. Sánchez es el ex líder militar de más alto rango en sugerir que el gobierno de Bush no tuvo el éxito esperado en Irak.
Un buque de guerra estadounidense bombardeó una aldea del norte de Somalia. Este fue al menos el tercer ataque estadounidense contra ese país en lo que va del año. Los funcionarios estadounidenses dijeron que el blanco de los ataques era una base dirigida por militantes islámicos. Este ataque con bombas tuvo lugar cinco meses después de que los soldados etíopes respaldados por Estados Unidos invadieron Somalia y derrocaron a la Unión de Cortes Islámicas. Mientras tanto, el Primer Ministro de transición del país, Ali Mohammed Ghedi, sobrevivió a un intento de asesinato. El domingo, un terrorista suicida estrelló un coche bomba contra las puertas de la residencia del Primer Ministro. Ghedi resultó ileso, pero seis de sus guardaespaldas y un estudiante local murieron en la explosión.
En Líbano, la lucha entre los soldados libaneses y los militantes islámicos se extendió al sur del país. Durante las últimas dos semanas, las fuerzas libanesas han estado bombardeando el campo de refugiados palestino del norte Nahr el-Bared, en su lucha contra el grupo Fatah al-Islam. Los residentes locales dijeron que los combates se extendieron al campo de refugiados palestino del sur Ein al-Hilweh el domingo, luego de que el Ejército ignoró un plazo límite para levantar el sitio del campo Nahr el-Bared fijado por un grupo militante local. Grupos de ayuda advirtieron que los refugiados que se encuentran dentro del campo Nahr el-Bared están afrontando una escasez severa de alimentos, agua y medicamentos.
Al menos 113 personas han muerto desde el 20 de mayo, y aproximadamente 25.000 refugiados palestinos han huido del campo Nahr el-Bared debido a que las condiciones humanitarias están empeorado.
Expedientes militares demuestran que el hombre saudí que se suicidó la semana pasada en Guantánamo era un veterano del Ejército saudí que se había entrenado con fuerzas estadounidenses. El hombre, Abdul Rahman Ma’ath Thafir al-Amri, estuvo detenido en Guantánamo durante más de cinco años. Funcionarios estadounidenses dicen que fue detenido por primera vez en Afganistán mientras combatía con el Talibán. El New York Times informa que Al-Amri había participado en varias huelgas de hambre. Su peso disminuyó de alrededor de 69 kilos a tan sólo 40 kilos. Al-Amri es el cuarto prisionero que se suicida en Guantánamo.
En Nueva York, funcionarios estatales y federales del cumplimiento de la ley dicen que desarticularon una conspiración para hacer estallar el Aeropuerto Internacional JFK. Tres hombres fueron detenidos el fin de semana en Nueva York y en la isla caribeña de Trinidad. Entre los sospechosos se encuentra un ex trabajador de carga del aeropuerto y un ex parlamentario de Guyana, en América del Sur. Los funcionarios dicen que los hombres —junto con un informante del gobierno— vigilaron el aeropuerto, pero nunca encontraron explosivos. No queda claro el papel que jugó el informante. Se trataba de un narcotraficante que estaba preso, y había accedido a infiltrarse en el grupo a cambio de una condena menor.
En materia de medios de comunicación, Rubert Murdoch tiene programado reunirse hoy con la familia Bancroft para expresar su interés de comprar el Wall Street Journal y la empresa que lo controla, Dow Jones. El periódico The Observer, de Londres, informa que algunos periodistas del Journal podrían realizar un paro si Murdoch compra el periódico. La empresa News Corp. de Murdoch ya es una de las mayores empresas de medios de comunicación del mundo. El grupo de empresas que controla incluye a la cadena de televisión Fox, la editorial de libros Harper Collins, el New York Post, Myspace.com, el Weekley Standard y otras muchas empresas de medios.
El juicio por crímenes de guerra del ex Presidente liberiano Charles Taylor comenzó en La Haya por su participación en la guerra civil de Sierra Leona. Taylor fue acusado de once cargos de crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, y violaciones al derecho internacional humanitario.
Charles Taylor boicoteó la apertura del juicio, al afirmar que no creía que el proceso fuera conducido con justicia.
En Alemania, ya comenzaron las protestas masivas contra la cumbre del G8 que se realizará esta semana, reuniendo a las naciones más industrializadas. El sábado, 80.000 manifestantes salieron a las calles de Rostock. La marcha fue pacífica, pero al finalizar, se produjeron enfrentamientos sangrientos entre la policía y algunos manifestantes. Los manifestantes acusaron a la policía de hacer un uso excesivo de la fuerza y de provocar los enfrentamientos callejeros. Al menos 128 manifestantes fueron arrestados, a la vez que otros 500 resultaron heridos, según los organizadores de la protesta. La policía dijo que más de 400 oficiales también fueron heridos.
Mientras tanto, cientos de organizaciones de activistas y ONG de todo el mundo se reúnen en Alemania para la conferencia del G8.
Max Lawson, de Oxfam, criticó cómo las naciones del G8 se relacionan con África.
La propuesta del Presidente Bush de una nueva estrategia de cambio climático que rechace el establecimiento de topes obligatorios a las emisiones de gases de efecto invernadero también fue criticada antes de la cumbre del G8.
Mientras tanto, China reveló su primer plan nacional para combatir el cambio climático. El país asiático señaló que pretende disminuir su energía en un quinto antes de 2010, pero que no hará sacrificios a costa del desarrollo económico. Además, recalcó que no se comprometería a cumplir ningún límite máximo de emisiones de gases de efecto invernadero. Muchos analistas creen que China podría superar a Estados Unidos este año como el mayor emisor de gases de efecto invernadero. China dijo que los países ricos fueron responsables de la mayoría de los gases de efecto invernadero generados durante el siglo pasado, y que tenían una responsabilidad indiscutible de hacer más para enfrentar el problema.