El ex Presidente de Honduras Manuel Zelaya llevó a cabo el jueves su primera conferencia de prensa desde que fue exiliado a República Dominicana la semana pasada. Zelaya partió de Honduras el mismo día en que su sucesor, el Presidente Porfirio Lobo, asumió el mando. Los seguidores de Zelaya boicotearon la elección de Lobo en protesta por el régimen golpista que derrocó al mandatario. El Congreso de Honduras le otorgó a Zelaya amnistía política, pero puede ser acusado de cargos penales si regresa al país. El jueves, Zelaya dijo que eran sus acusadores los que deberían ser enjuiciados.
Manuel Zelaya dijo: “Los que quieren juzgarme a mí son mis adversarios, esos no son jueces. Los que no han querido levantar un solo proceso, fíjense bien, un solo dedo en contra de los asesinos, de los criminales, de los homicidas, de los que torturaron al pueblo hondureño y lo siguen torturando, y a su servidor también lo atacaron en la sede diplomática (…), esos no pueden ser jueces, esos no pueden juzgar a nadie”.