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En la matanza más terrible que se haya perpetrado en una escuela primaria en toda la historia de EE.UU., el viernes, 20 alumnos de primer grado y seis miembros del personal fueron asesinados en Newtown, Connecticut. Todos los niños asesinados tenían entre seis y siete años de edad. Todos recibieron varios disparos. En una vigilia realizada en honor a las víctimas el domingo a la noche, el presidente Obama prometió tomar medidas, aunque sin especificar cuáles, para frenar la violencia con armas de fuego en Estados Unidos. “No podemos tolerar más esto”, dijo Obama. “Estas tragedias deben terminar. Y para que terminen, debemos cambiar. ¿Estamos realmente dispuestos a aceptar que somos impotentes para hacer frente a una masacre como ésta, que la política es muy difícil? ¿Estamos dispuestos a aceptar que este tipo de violencia contra nuestros hijos año tras año es de algún modo el precio que debemos pagar por la libertad?”. Nos acompaña Paul Barrett, vicejefe de redacción de la revista Bloomberg Businessweek, y autor de “Glock: The Rise of America’s Gun” (Glock: El auge de las armas de fuego en Estados Unidos).
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