El gobierno de Obama advirtió que miles de niños indocumentados corren el riesgo de ser deportados, tras la ola de inmigración proveniente de América Central. Más de 47.000 niños no acompañados fueron capturados en la frontera de Estados Unidos desde octubre, huyendo de la violencia y la pobreza existentes en sus países de origen. El martes, el Secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, dijo a legisladores que Estados Unidos prepara más centros de detención para albergar a los inmigrantes indocumentados.
Johnson expresó: “Estamos creando espacio adicional para la detención de adultos que traen a sus hijos, y pretendo considerar cada opción a fin de contener esta corriente. Hablamos de grandes cantidades de niños, sin sus padres, que han llegado hasta nuestra frontera, con hambre, con sed, con miedo, exhaustos y vulnerables. La manera en que tratamos a los niños, en particular, es un reflejo de nuestras leyes y nuestros valores”.
La mayoría de los niños provienen de El Salvador, Guatemala y Honduras, y muchos de ellos han venido solos.