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El pueblo de Ferguson, en el estado de Missouri, parece una zona de guerra tras la quinta noche de protestas por el asesinato del adolescente afroestadounidentes Michael Brown, que fue asesinado a tiros por la policía, a pesar de estar desarmado. La policía intentó dispersar la movilización con gases lacrimógenos, granadas de estruendo y bombas de humo. Al menos 10 personas fueron arrestadas el miércoles, entre ellas el concejal Antoio French, de St. Louis, que durante estos días ha subido a internet videos de las protestas y a principios de esta semana estuvo en Democracy Now! La policía ya había reaccionado fuertemente en una de las primeras manifestaciones, con equipamiento antidisturbios y un enorme vehículo armado estacionado en medio de la calle. Ayer por la noche fueron arrestados periodistas de los periódicos The Washington Post y The Huffington Post y luego liberados sin acusaciones en su contra. Su detención se había producido en un local de Mc Donald’s, donde se encontraban escribendo informes sobre los acontesimientos. La policía de Ferguson se ha negado hasta ahora a dar a conocer el nombre del agente que disparó contra Brown, alegando que temen por su seguridad. También han pedido a los manifestantes que restrinjan las protestas al horario diurno. Desde St. Louis se comunica con nosotros Patricia Bynes, integrante demócrata de la Comisión Municipal de Ferguson. Desde el inicio de las protestas, Bynes ha estado cada noche en las calles documentando los acontecimientos a través de Twitter.
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