Estados Unidos y la OTAN acusan abiertamente a Rusia de enviar fuerzas de combate a Ucrania y la tensión sigue aumentando. Según las Naciones Unidas, cerca de dos mil seiscientas personas murieron en el este de Ucrania desde abril, mes en que iniciaron los enfrentamientos entre fuerzas ucranianas y rebeldes separatistas pro rusos. El jueves, al menos quince civiles murieron cuando fuerzas ucranianas bombardearon la ciudad de Donetsk en poder de los rebeldes. Mientras tanto, un nuevo informe de la organización Human Rights Watch acusa a los rebeldes de detener a civiles arbitrariamente y someterlos a torturas, tratamiento denigrante y trabajo forzado. El jueves, la OTAN publicó imágenes satelitales que dice muestran artillería, vehículos y tropas rusas en el este de Ucrania y alrededores. Desde Londres se comunica con nosotros Jonathan Steele, ex corresponsal en Moscú del periódico The Guardian y autor de varios libros, entre ellos “Eternal Russia: Yeltsin, Gorbachev, and the Mirage of Democracy” (Rusia eterna: Yeltsin, Gorbachov y el espejismo de la democracia).