Mientras Estados Unidos aumenta las operaciones militares en Siria, analizamos el grupo Khorasan, una organización militar misteriosa que el gobierno de Obama invocó para justificar los ataques. Hace un mes, nadie había escuchado el nombre de Khorasan, pero ahora los funcionarios estadounidenses afirman que dicho grupo plantea una amenaza inminente para Estados Unidos. Mientras empiezan los ataque sobre Siria, los funcionarios estadounidenses dijeron que Khorasan “se estaba acercando a la fase de ejecución” de un ataque en Estados Unidos o Europa, más probablemente un intento de poner una bomba en un avión comercial en vuelo. Nos acompaña Murtaza Hussain del sitio de noticias The Intercept, cuyo nuevo artículo, escrito en colaboración con Glenn Greenwald, se titula “The Khorasan Group: Anatomy of a Fake Terror Threat to Justify Bombing Syria” (El grupo Khorasan: anatomía de un falso terrorismo para justificar el bombardeo de Siria).
Transcripción
AMY GOODMAN: Pasamos ahora a hablar con Murtaza Hussain, reportero en The Intercept, que, junto con Glenn Greenwald, ha escrito el artículo titulado: “El grupo de Khorasan: Anatomía de una falsa amenaza terrorista para justificar el bombardeo en Siria”.
Murtaza, bienvenido a Democracy Now! Murtaza nos acompaña desde Toronto. ¿Podría hablar acerca de su investigación sobre el llamado grupo Khorasan?
MURTAZA HUSSAIN: Sí, el grupo Khorasan es un grupo que saltó por primera vez a los medios de comunicación alrededor del 13 de septiembre, más o menos una semana antes de que la campaña de bombardeos de Estados Unidos en Siria comenzara. Hasta ese momento, nadie había oído hablar de este grupo. No era conocido en los círculos de inteligencia ni entre las personas que siguen el tema de Siria. Y de repente vemos que en los medios de comunicación esto se está describiendo como la mayor amenaza terrorista que emana de ese país, y una amenaza directa para Estados Unidos, a diferencia de ISIS. Así que, esto terminó siendo una de las principales justificaciones para la guerra en Siria, y los ataques aéreos militares que se llevan a cabo en Siria, y se convirtió en la principal narrativa de los medios para justificar esa acción.
AMY GOODMAN: Háblenos, por ejemplo, de dónde obtuvo su nombre el grupo Khorasan.
MURTAZA HUSSAIN: El grupo Khorasan, el nombre en sí mismo, no denota a ningún grupo dentro de Siria del que se haya oído hablar antes. Es un nombre que se ha desarrollado dentro del gobierno de EE.UU. para describir un cierto conjunto de grupos— individuos dentro del grupo Jabhat al-Nusra, que es una de las facciones de la oposición que luchan contra el gobierno sirio. Jabhat al-Nusra se cree que también es una franquicia de Al Qaeda en Siria, pero a diferencia de Al-Qaeda, se centra exclusivamente en luchar contra el gobierno de Bashar Assad. Así, con el fin de justificar estos ataques contra este grupo, EE.UU. tenía que crear un nuevo nombre para designar estos pocos individuos dentro de ese grupo a los que están buscando para atacar, por lo que desarrollaron este nombre, el grupo de Khorasan, y se identificó a varios combatientes que, dicen, planearon ataques contra Estados Unidos, al tiempo que se oponían al gobierno de Bashar Assad, y se llevaron a cabo los ataques bajo esa justificación. Ahora, dentro de Siria, la gente ve a este grupo como indistinguibles del grupo regular de Jabhat al-Nusra, y está siendo visto como un ataque a ese grupo. Es por eso que ayer salió una declaración del líder de este grupo jurando venganza por la muerte de sus comandantes.
AMY GOODMAN: Escuchemos ahora a la reportera de CNN para el Pentágono Barbara Starr, hablando del grupo Khorasan.
BARBARA STARR: Lo que estamos escuchando de un alto funcionario estadounidense, la razón por la que atacaron a Khorasan en este momento, es que se tenían información de inteligencia de que el grupo de veteranos de Al Qaeda estaba en las etapas de planificación de un ataque contra el territorio estadounidense y / o planeando un ataque contra un objetivo en Europa. Y la información indicó que Khorasan estaba en el proceso, tal vez en la fase final, de la planificación de ese ataque.
AMY GOODMAN: Esa fue Barbara Starr de CNN. ¿Cuál es su respuesta?
MURTAZA HUSSAIN: En los días previos al ataque, varias fuentes anónimas sugirieron que un ataque era inminente. Sugirieron que había una amenaza contra las aerolíneas mediante el uso de bombas caseras o de ropa inflamable. Y dijeron que, como Barbara Starr mencionó, estaban en las etapas finales de la planificación de este ataque. Después de que los ataques aéreos se llevaran a cabo, varios funcionarios estadounidenses comenzaron a alejarse de esta estimación, diciendo que la definición de “inminente” no era clara, y que cuando estamos hablando de un ataque que está a punto de suceder, no estamos seguros de lo que eso significa exactamente. Así que, en retrospectiva, esta definición de que un ataque es inminente y esta caracterización de una amenaza proveniente de este grupo, muy definida y clara, se convirtió en algo no muy claro después de los ataques, y sugirieron, a través de The New York Times, que los ataques eran meramente intenciones, y que no existió ninguna amenaza real en contra de Estados Unidos. Por lo tanto, la justificación real para los ataques aéreos fue completamente negada después de que los ataques terminaran, algo que es muy preocupante.
AMY GOODMAN: Explique a qué se refiere, al decir que fue negado justo después de que los ataques comenzaran, después de que la justificación hubiera surtido efecto.
MURTAZA HUSSAIN: Correcto. Después de que se llevaran a cabo los ataques, y que se realizaran declaraciones diciendo que había personas que habían sido asesinadas, y que el grupo se había dispersado, James Comey y muchos otros dentro de la clase dirigente de EE.UU. comenzaron a decir: “Bueno, ya sabes, habíamos dicho que los ataques de este grupo eran inminentes”. Pero, ¿qué significa en realidad 'inminente'? Podría ser en seis meses, podría ser en un año. Y otros funcionarios anónimos comenzaron a decir que no había ninguna amenaza en absoluto, no había ningún plan en marcha para atacar a Estados Unidos. Y luego, salió a la luz que el grupo de Khorasan en sí, sobre el que habíamos oído decir en los medios de comunicación que era un nuevo enemigo y una amenaza para Estados Unidos, no existía en realidad como tal; se trataba simplemente de un grupo de personas a quienes EE.UU. había designado como una facción de la oposición siria lista para ser atacada. Así que, toda la narración que se había desarrollado, incluido dentro de los medios de comunicación, fue completamente desemascarada como una mentira tras los bombardeos. Y lo interesante fue que Ken Dilanian reportó la historia por primera vez en la agencia de noticias Associated Press, diciendo que se trataba de una nueva amenaza y un nuevo grupo, y fue una de las primeras personas en desbaratar después la historia, diciendo que los funcionarios estadounidenses estaban agregando más “matices”, esa es la palabra que utilizó, a sus advertencias anteriores sobre el grupo. Así, que ha sido un caso realmente indignante de manipulación mediática, en la que los medios de comunicación hicieron suyo este relato de una amenaza de un nuevo grupo terrorista, y luego, después de que se llevaran a cabo los bombardeos, que fueron justificados por la existencia de este grupo, inmediatamente cambiaron de opinión, diciendo que en realidad no había ninguna amenaza inminente, y el grupo en sí mismo no existe. Así que realmente fue un fracaso de los medios de comunicación, parecido a los que hemos visto varias veces en el pasado.
AMY GOODMAN: Usted mencionó a Ken Dilanian de AP. The Intercept acaba de publicar otro artículo: “El hombre de la limpieza de la CIA: los artículos de un periodista del LA Times eran aprobados por la agencia antes de su publicación”. Ken Silverstein escribe: “Un prominente reportero de seguridad nacional del diario Los Angeles Times presentaba rutinariamente borradores y resúmenes detallados de sus historias a los hombres de prensa de la CIA antes de su publicación, de acuerdo con documentos obtenidos por The Intercept”. Y continúa: “el intercambio de correos electrónicos entre los oficiales de asuntos públicos de la CIA y Ken Dilanian, ahora reportero de inteligencia para Associated Press, que previamente había cubierto a la CIA para el Times, demuestran que Dilanian disfrutaba de una estrecha relación de colaboración con la agencia, prometiendo explicitamente una cobertura positiva de las noticias, y en ocasiones enviando a la oficina de prensa los borradores completos de sus artículos para que fueran revisados antes de su publicación. En, al menos, un caso, la reacción de la CIA parece haber dado lugar a cambios significativos en el reporte que fue publicado finalmente en [Los Angeles] Times. ¿Cuál es su respuesta a esa pieza?
MURTAZA HUSSAIN: Es correcto. Así que, en esencia, el gobierno buscará a periodistas dóciles y dispuestos para trabajar con ellos y filtrar historias como esta. Así, en lo que respecta a esos reportajes sobre la CIA, a este reportero le fueron vetados sus artículos. Prometió una cobertura favorable a cambio de acceso. Y de nuevo en este caso, los reportajes sobre el grupo Khorasan fueron publicadas en primera instancia por este reportero. Y, ya sabes, el papel de los medios de comunicación es hacer preguntas e investigar esas afirmaciones a fondo, pero en cambio las declaraciones fueron hechas publicas a través de periodistas, conocidos por dar una cobertura favorable, y por, ya sabes, dar por buena la versión del gobierno a cambio de tener acceso. Y parece que esto sucedió de nuevo, ya que aquí hubo un periodista que publicó la historia, sin contrastar quién era el grupo Khorasan, ni la veracidad de esas afirmaciones, sino que fueron publicadas en los medios de comunicación, y se convirtió en una historia sobre los medios de comunicación en sí misma. Así que creo que estamos viendo como se repite la misma narrativa, igual que lo detallamos en la historia anterior.
AMY GOODMAN: Querría hablar de otro reporte que usted escribió, Murtaza, titulado: “¿Por qué el Estado Islámico en realidad no es islámico”. En él se hace referencia a una carta firmada por muchos musulmanes. ¿Puede explicar quien ha escrito esta carta y a quién fue enviada?
MURTAZA HUSSAIN: Se trata de una carta abierta publicada y enviada al líder del Estado Islámico, Abu Bakr al-Baghdadi, de parte de más de 120 de los más destacados expertos en religión de entre los académicos musulmanes del mundo. Y allí estaban el mufti de Egipto, Bosnia, Nigeria y otros muchos países de todo el mundo, incluyendo Estados Unidos. Y ellos publicaron una carta abierta, condenando punto por punto las prácticas del llamado Estado Islámico. Sólo a partir de un punto de vista teológico, ofreciendo una crítica muy rigurosa del grupo, y me resulta que, según sus normas, es antiislámico. Ahora, esto se remonta a la pregunta de qué es o qué no es islámico. El Islam no es un monolito; sino que es objeto de interpretaciones por parte de las personas que toman parte en él. Y, sabes, este grupo concluyó que eran decididamente anti-islámicos. Creo que la mayoría de los musulmanes de todo el mundo concluirían que son anti-islámicos, a pesar de sus pretensiones en sentido contrario. Así, mi argumento en el artículo es que cuando se les identifica como islámicos, y se dice que son la definición del Islam, se está aceptando su versión. Esa es la legitimidad que quieren y que hoy no tienen, y son ampliamente rechazados por los musulmanes de todo el mundo. Así que es importante decir que si bien, ya sabes, pueden participar en el diálogo islámico y utilizar los símbolos del Islam, no podemos permitir que ningún grupo de extremistas defina de ningún modo una fe o una civilización, con la que se identifican más de un mil millones de personas en todo el mundo.
AMY GOODMAN: Bueno, vamos a vincular a sus artículos en democracynow.org. Quiero darles las gracias por estar con nosotros. Hemos estado hablando con Murtaza Hussain, periodista de The Intercept. Sus últimos reportajes son: “El grupo de Khorasan: Anatomía de una falsa amenaza terrorista para justificar el bombardeo de Siria”, y “¿Por qué el Estado Islámico no es realmente islámico”. Esto es Democracy Now!, democracynow.org, El informativo de guerra y paz.
Traducido por Glenda Rosado e Igor Moreno. Editado por Igor Moreno y Democracy Now! en Español.