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Hoy es el segundo día consecutivo de ataques aéreos de Rusia sobre Siria, siendo Rusia el último gobierno extranjero que interviene en una guerra que ya ha matado más de 240.000 personas y causado el desplazamiento de millones. Dicha medida provocó inquietud en las autoridades estadounidenses, que dicen que los ataques rusos no están alcanzando a ISIS sino que están cayendo sobre grupos rebeldes que luchan contra el presidente sirio, Bashar al-Assad, uno de los cuales, si no más, fue entrenado por la CIA. Estados Unidos y Rusia mantienen fuertes discrepancias acerca de la estrategia a tomar frente al conflicto en Siria; Washington pide la salida del presidente sirio, Assad, y Moscú lo respalda. Hoy el Kremlin ha declarado que Rusia se está coordinando con el ejército sirio para atacar tanto blancos de ISIS, como de otras milicias. Rusia es, por lo menos, el décimo gobierno extranjero que lanza ataques aéreos sobre Siria en lo que va del año. Entre los otros países atacantes se encuentran Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, Francia, Australia, Turquía, Israel, Emiratos Árabes Unidos y Jordania. Hablamos del tema con el profesor de la Universidad de Columbia Rashid Khalidi.