Titulares24 de noviembre de 2015

Oficiales militares turcos afirman que derribaron un avión de combate ruso en la frontera con Siria, tras haber advertido a los pilotos que estaban violando el espacio aéreo turco. Rusia niega la acusación. Los rebeldes sirios afirman que al menos uno de los pilotos ha muerto después de que ambos saltaran en paracaídas.

La capital de Bélgica, Bruselas, sigue cerrada mientras soldados y tanques patrullan las calles. Las autoridades belgas continúan buscando a Salah Abdeslam, un sospechoso de los ataques del 13 de noviembre en París, en los que murieron 130 personas. Si bien se prevé que el metro y las escuelas reabrirán el miércoles, Bruselas seguirá en alerta máxima hasta finales de la semana. El primer ministro belga Charles Michel dijo que la amenaza continúa, aunque no especificó cuál era esa amenaza.

Charles Michel dijo: “Seguimos enfrentando el mismo tipo de amenaza que ayer. Los posibles blancos son los mismos que ayer. Les recuerdo que se trata de lugares frecuentados por muchas personas, como zonas de comercios, calles comerciales, centros comerciales y el transporte público”.

En Francia, la policía continúa tomando medidas drásticas con el registro de más de mil viviendas y la detención de más de cien personas. The New York Times informa que oficiales rompieron la puerta de un restaurante que vende hamburguesas de carne halal (permitida en la religión musulmana) y comida mexicana en las afueras de París el fin de semana, pero no hallaron nada. El lunes, la policía afirmó que halló un cinturón con explosivos en el barrio de Montrouge, en las afueras de París, que posiblemente haya sido abandonado por el sospechoso que se dio a la fuga, Salah Abdeslam.

El presidente francés François Hollande se reunirá hoy con el presidente Barack Obama en Washington D.C., donde está previsto que promueva una campaña más intensa contra el autodenominado Estado Islámico. Según las autoridades, el ISIS es responsable de los ataques de París. Francia ha triplicado su capacidad de lanzar ataques contra el Estado Islámico al enviar un portaaviones al Mar Mediterráneo.

Tanto Francia como Rusia han bombardeado intensamente la ciudad siria de Raqqa, la capital de facto del Estado Islámico, donde viven miles de civiles. Activistas en Raqqa informan que se ha utilizado fósforo blanco. Mientras tanto, Estados Unidos lanzó un ataque contra una fuente de ingresos del ISIS, al destruir alrededor de 300 camiones cisterna que transportan petróleo desde el este de Siria. Por su parte, funcionarios rusos han dicho que sus fuerzas mataron a catorce personas acusadas ingresar ilegalmente a combatientes del Cáucaso Norte para que se sumen al Estado Islámico en Siria.

En Mineápolis, Minnesota, cinco manifestantes del grupo Black Lives Matter (“Las vidas afroestadounidenses importan”, en español) recibieron heridas de bala. Los activistas afirman que quienes les dispararon eran defensores de la supremacía blanca y que al menos uno de ellos llevaba una máscara. Los manifestantes estaban acampando frente a una comisaría de policía, donde habían estado manifestándose contra el asesinato policial de Jamar Clark, un aforestadunidense que estaba desarmado. Afirman que los defensores de la supremacía blanca abrieron fuego después de que un grupo de manifestantes intentara que se retiraran del campamento. Jie Wronski-Riley describió el tiroteo al periódico Minneapolis Star Tribune.

Jie Wronski-Riley dijo: “Luego se dieron vuelta y comenzaron a disparar. Al principio no estaba seguro, pensé: ‘están lanzando petardos’, porque era tan fuerte el estruendo y había olor a azufre o algo así por todos lados. Y después, la persona que estaba a mi izquierda se tiró al suelo, la persona a mi derecha se tiró al suelo, y pensé ‘maldición realmente nos están disparando, nos están disparando balas’”.

Los activistas afirman que la policía demoró bastante en responder y roció con gas lacrimógeno a las personas que estaban en los alrededores.

En Oregon, autoridades afirman que un incidente en el que un estudiante universitario negro fue agredido por tres estudiantes blancos es tratado como un posible delito de odio. Tanguy Muvuna, estudiante de la Universidad Lewis and Clark, afirma haber sido golpeado por tres hombres blancos que hicieron uso de insultos racistas, lo amenazaron de muerte y lo obligaron a beber un líquido desconocido.

En Chicago, Illinois, se informó que en el día de hoy se presentarán cargos por asesinato contra un agente de policía blanco que el año pasado efectuó dieciséis disparos contra un joven afroestadounidense y le provocó la muerte. En octubre de 2014, el agente de policía de Chicago Jason Van Dyke le disparó al joven de diecisiete años de edad Laquan McDonald, provocándole la muerte. La policía afirmó que McDonald había arremetido contra el agente con un pequeño cuchillo. Sin embargo, personas que vieron la grabación de video captada por la cámara ubicada en el tablero del patrullero indican que las imágenes contradicen la versión de la policía. Según afirman, se puede observar que el agente Van Dyke abrió fuego contra McDonald mientras este se alejaba caminando y que continuó disparándole incluso mientras el joven yacía tendido en la acera. La semana pasada, un juez de condado determinó que se hiciera pública la grabación del incidente antes de este miércoles. En democracynow.org/es podrá acceder a más información sobre el caso desde Chicago.

La ciudad de Fullerton en California acordó pagar 4,9 millones de dólares en el marco de un juicio civil relativo a un incidente que tuvo lugar en el año 2011, cuando la policía golpeó hasta su muerte a un hombre que padecía una enfermedad psiquiátrica. Los agentes Manuel Ramos y Jay Cicinelli fueron absueltos el año pasado por la muerte de Kelly Thomas, entre cuyas lesiones figuran aplastamiento de tráquea y rotura de huesos faciales. En el transcurso de diez minutos, Thomas fue tirado al suelo, golpeado con una porra, sujetado y golpeado en repetidas oportunidades en las costillas; recibió además rodillazos en la cabeza, descargas eléctricas en cuatro oportunidades y golpes en la cara con la pistola Taser en ocho oportunidades. En una filmación del hecho se lo puede observar suplicando ayuda. Thomas falleció días después del incidente.

El precandidato presidencial republicano Donald Trump redobló sus afirmaciones falsas respecto a que “miles y miles” de musulmanes de Nueva Jersey celebraron los ataques del 11 de septiembre de 2001. Trump sostuvo que después del 11 de septiembre de 2001, hubo “celebraciones al aire libre”. Su contendiente republicano Ben Carson se retractó del apoyo que dio inicialmente a los comentarios de Trump y afirmó haber visto una filmación de gente celebrando pero, según dijo, “no sabía dónde estaban”. En declaraciones efectuadas durante un acto realizado el lunes, Trump redobló además su apoyo a la utilización de técnicas de tortura contra el ISIS, al afirmar que “aprobaría medidas que van más allá [del ahogamiento simulado]”.

Donald Trump afirmó: “¿Si aprobaría el uso del ahogamiento simulado? Les digo, bien, permítanme plantearles algo. Los de la otra parte les cortan las cabezas a nuestros jóvenes y las clavan en un palo. Los de la otra parte construyen esas jaulas de hierro y ponen veinte personas adentro y las tiran al océano durante quince minutos y las sacan quince minutos después. ¿Si aprobaría el uso del ahogamiento simulado? Pueden apostar su culo a que sí lo haría. En un abrir y cerrar de ojos”.

Y Médicos Sin Fronteras identificó a los catorce integrantes del personal hospitalario fallecidos durante el ataque aéreo llevado a cabo el 3 de octubre contra su hospital de Kunduz, Afganistán. En un comunicado, Médicos Sin Fronteras sostuvo que el hospital fue objeto de “precisos y repetidos ataques aéreos durante más de una hora”. Médicos Sin Fronteras expresó además: “Incluso mientras se perpetraban los ataques, nuestros colegas lucharon por sus vidas y por las vidas de sus pacientes con determinación y valentía extraordinarias”. El gobierno de Obama no ha hecho público aún su análisis del ataque, que provocó la muerte de al menos 30 personas.