De acuerdo a la ONU, el número de víctimas fatales por la lucha en el este de Ucrania se eleva a más de 5.300 desde el mes de abril del año pasado, tras la destitución del presidente Victor Yanukovich. Además, un millón y medio de personas fueron desplazadas. Como la violencia se intensifica, el gobierno de Obama ahora está considerando entregar armas directamente a las fuerzas ucranianas que luchan contra los rebeldes respaldados por Rusia. Washington ya proporciona equipamiento militar no letal a Ucrania, pero según se informa, funcionarios jerárquicos se inclinan por el envío de armas, desde rifles hasta armas antitanques. El papel de EE.UU. y los aliados europeos en Ucrania dio lugar a que el ex líder soviético Mijail Gorbachov acusara a occidente de arrastrar a Rusia a una nueva Guerra Fría. Nos acompaña Stephen Cohen, profesor emérito de política y estudios rusos en la Universidad de Nueva York y Princeton.
Transcripción
AARON MATE: La ONU ha elevado el número de muertos por los combates en el este de Ucrania a más de 5.300 personas desde el pasado mes de abril, tras el derrocamiento del presidente ucraniano, Viktor Yanukovich hace un año este mes. Otros 1,5 millones de personas han sido desplazadas. De acuerdo con los rebeldes apoyados por Rusia en Donetsk, los bombardeos en el este de Ucrania mataron al menos a ocho personas e hirieron a otras 22 en el día de ayer. Ucrania dice que cinco más de sus soldados han muerto. Esto sucede al tiempo que la Casa Blanca está considerando armar a Ucrania en su lucha contra los separatistas apoyados por Rusia. Washington ya suministra equipo militar no letal a Ucrania, pero hay una creciente presión para enviar armas, desde rifles a armas antitanque. El lunes, la portavoz del Departamento de Estado Jen Psaki fue cuestionada acerca de la política de Estados Unidos.
MATTHEW LEE: Hay toda una plétora de informes que han aparecido esta mañana que dicen que el gobierno está reconsiderando proveer asistencia letal al gobierno de Ucrania. ¿Podría hablar sobre estos informes?
JEN PSAKI: Bueno, Matt, estamos evaluando constantemente nuestras políticas en Ucrania para asegurarnos que están respondiendo de manera apropiada y calibrada para lograr nuestros objetivos. Estamos particularmente preocupados por la reciente escalada de la violencia separatista y por los intentos separatistas de ampliar el territorio que actualmente controlan, más allá de la línea de alto de fuego acordado en Minsk, así como por el creciente número de víctimas civiles y militares.
MATTHEW LEE: De acuerdo, pareciera que usted no está diciendo que no, que estos informes están equivocados. ¿Es preciso entonces decir que este tipo de asistencia es ahora parte de la conversación?
JEN PSAKI: Bueno, no hemos puesto opciones dentro o fuera de la mesa, Matt. Es un debate en curso. Obviamente tenemos que tomar en cuenta los acontecimientos sobre el terreno. Pero no tengo nada que decir en términos de las deliberaciones internas.
REPORTERO: ¿Por qué querría el presidente entrar en una “guerra indirecta” con Rusia?
JEN PSAKIi: Bueno, yo no creo que nadie quiera entrar en una guerra de poder con Rusia. Y ese no es el objetivo. Nuestro objetivo aquí es cambiar el comportamiento de Rusia. Esa es la razón por la que hemos aplicado las sanciones. Ciertamente queremos ayudar a Ucrania, un gobierno soberano, para que prospere y pueda avanzar en este período de transición. Se han tomado decisiones. Estoy hablando sobre el hecho de, por supuesto, preservar el derecho de considerar una serie de opciones.
AARON MATE: Esa era la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki. El jueves, el secretario de Estado John Kerry viajará a Kiev para reunirse con los líderes de Ucrania.
AMY GOODMAN: La semana pasada, el exlíder soviético Mijail Gorbachov acusó a occidente de arrastrar a Rusia a una nueva Guerra Fría. Dijo, cito: “Si llamamos a una espada, espada, Estados Unidos nos ha empujado a una nueva Guerra Fría, tratando de implementar abiertamente su idea general de triunfalismo. ¿Dónde va a llevarnos a todos? La Guerra Fría ya está encendida. ¿Qué sigue? Por desgracia, no puedo decir con firmeza que la Guerra Fría no dará lugar a una caliente. Temo que pudieran aceptar el riesgo”, dijo. El lunes, la canciller alemana Angela Merkel dijo que el conflicto no puede resolverse militarmente.
CANCILLER ANGELA MERKEL: Alemania no apoyará a Ucrania con armas. Estoy firmemente convencida de que este conflicto no puede resolverse militarmente, y por lo tanto, insistimos en que, por un lado, vamos a imponer sanciones, si es necesario— lo hemos hecho de forma conjunta en Europa— y, por otro lado, vamos a utilizar todos los medios diplomáticos para resolver este conflicto a través de conversaciones o, al menos, aliviarlo.
AMY GOODMAN: Para hablar más sobre la crisis en Ucrania, nos acompaña Stephen Cohen, profesor emérito de estudios rusos y de política en la Universidad de Nueva York y en la Universidad de Princeton. Su libro más reciente: “Soviet Fates and Lost Alternatives: From Stalinism to the New Cold (El destino sovietico y las alternativas perdidas: Del estalinismo a la Nueva Guerra Fría). War”, ha sido publicado en edición de bolsillo.
Bienvenido a Democracy Now! profesor Cohen.
STEPHEN COHEN:Gracias.
AMY GOODMAN: ¿Qué está pasando en Ucrania?
STEPHEN COHEN:¿Qué está pasando en Ucrania? Gorbachov estaba en lo cierto. Estamos en una nueva Guerra Fría con Rusia. El epicentro de la nueva Guerra Fría no es en Berlín, como la anterior, sino que es justo en las fronteras de Rusia, por lo que es mucho más peligrosa. Tú y yo hemos hablado de esto desde febrero. Lo que yo preví en febrero ha ocurrido, lamento decirlo: Una disputa política en Ucrania se convirtió en una guerra civil ucraniana. Rusia respaldó a un lado; Estados Unidos y la OTAN, al otro. Así que no es sólo una nueva Guerra Fría, es una guerra de poder. Estamos armando a Kiev. Los rusos están armando a los combatientes del este. Y creo que, aunque no quiero echar a perder el día de nadie— Te dije en febrero que esto tenía el potencial de convertirse en un nuevo enfrentamiento al estilo del de los misiles en Cuba, con riesgo de guerra. Ahí es donde estamos ahora. Y creo que Gorbachov estaba en lo cierto.
AARON MATE: Hubo un alto de fuego en septiembre. ¿Qué ha pasado desde entonces?
STEPHEN COHEN:Bueno, nunca fue respetado en su totalidad. Y el problema principal fue que había muchas disposiciones del alto el fuego, que se suponía que detendrían los combates en el este y conducirían a las negociaciones directas entre el gobierno rebelde, o combatientes—los que llamamos “separatistas”. No eran separatistas cuando todo esto comenzó, pero ahora son separatistas: Ellos no quieren vivir más con Kiev. Pero se suponía que debían conducir a negociaciones. Lo más importante que ocurrió fue que se requería que ambas partes retiraran su artillería, principalmente Kiev, porque Kiev estaba bombardeando las ciudades capitales del este de Ucrania— Luhansk y Donetsk. Esa artillería nunca se retiró. Se suponía que se iban a retirar 30 kilómetros. Cuanta distancia se retiraron, no lo sé. Pero como ustedes saben, la semana pasada esas ciudades han sido bombardeadas de nuevo. Así que el alto el fuego fue respetado de forma marginal por un par de meses, pero hace aproximadamente una semana, hace 10 días, la lucha se intensificó. Ahora hay una disputa, ya que ha eliminado la posibilidad de negociación de nuevo: ¿Quién comenzó la escalada? El Departamento de Estado, usted escuchó a Psaki decir que fue Rusia y los agentes rusos. Rusia y los rebeldes dicen que fue Kiev. Pero estamos en medio de una “niebla de guerra”. Esa expresión proviene de la Primera Guerra Mundial, creo, cuando había tanta desinformación— no teníamos correo electrónico entonces, y la información viajaba más lentamente— que a percepción de lo que estaba pasando se distorsionó, se corrompió por las noticias. Y eso llevó a la guerra. La “niebla de guerra” actual se deriva de esto y es peor porque se mueve tan rápido, en las redes sociales, que lo que tienes es toda esta desinformación que proviene de Kiev, de Moscú, de Washington. Y que nosotros tres nos sentemos y digamos quién lanzó el primer golpe hace 10 días es casi imposible.
AMY GOODMAN: El lunes, tres grupos de estudio prominentes de Estados Unidos— la Institución Brookings, el Consejo del Atlántico y el Consejo de Chicago sobre Asuntos Mundiales— emitieron un informe conjunto instando a Estados Unidos a proporcionar 3 mil millones de dólares a Ucrania en ayuda militar en los próximos tres años. El exsubsecretario de Estado Strobe Talbott coescribió el informe. Él es ahora presidente de Brookings.
STROBE TALBOTT: En el contexto de lo que está sucediendo en Ucrania en la actualidad, la manera correcta de caracterizarlo es un acto de guerra por parte de la Federación Rusa. Esto significa que lo que esta sucediendo hoy en Ucrania es literalmente una invasión, y no una guerra de poder. Es literalmente una invasión de las fuerzas armadas rusas. Es literalmente una ocupación de gran parte, mucho más allá de Crimea, del este de Ucrania. Y es una anexión virtual de una gran cantidad de territorio más allá de Crimea. Y en ese sentido, esta es una gran amenaza para la paz de Europa, para la paz de Eurasia, y por lo tanto una amenaza para los intereses de Estados Unidos y, diría, una amenaza para las posibilidades de tener un siglo XXI pacífico.
AMY GOODMAN: Ese era el exsubsecretario de Estado Strobe Talbott, ahora presidente de Brookings. Su respuesta.
STEPHEN COHEN:Bueno, él es mucho más que eso. La gente tiene que dejar caer sus máscaras y decir cuál es su interés personal en esto. Strobe Talbott, a quien conozco desde hace años, fue el arquitecto de la política estadounidense que llevó a esta crisis. Él fue “la mano rusa”, como llamó a su libro de memorias, durante la presidencia de Clinton, cuando comenzó la expansión de la OTAN hacia Rusia. Hay que entender lo que dijo— y el lanzamiento de este informe ha estado preparandose. Y si nos fijamos en los autores, son los líderes del partido de la guerra de Estados Unidos, las personas que literalmente quieren un enfrentamiento militar con Rusia. Deténgase y piense lo que eso significa. Deténgase y piense lo que eso significa, como si Rusia fuera a retroceder. Pero las personas que firmaron este informe —y han estado llevando a cabo durante días— están diciendo que —acaba de decir esto literalmente— el futuro del siglo XXI está en juego en Ucrania. Deténgase y piense lo que eso significa. Luego continuó diciendo cosas que son fundamentalmente falsas, que Rusia ha invadido y se ha anexado el este de Ucrania. Quiero decir, cuando al Departamento de Estado se le preguntó hace unas semanas: “¿Puede confirmar la presencia de las tropas rusas en el este de Ucrania?” El Departamento de Estado, que induce a error acerca de esta historia todo el tiempo, dijo: “No, no podemos”. Esto es a lo que me refiero al hablar acerca de la “niebla de guerra”, en la que se nos dice que Rusia se ha anexado el este de Ucrania, que el mundo, el futuro del mundo está en juego, y, básicamente, lo que están haciendo es pidiendo que se vaya a la guerra con Rusia.
AMY GOODMAN: Vamos a continuar esta discusión en un minuto. Estamos hablando con el profesor Stephen Cohen, profesor emérito de política y estudios rusos en la Universidad de Nueva York y en la Universidad de Princeton. Estaremos de vuelta con él en un minuto.
[Pausa]
AMY GOODMAN: Nuestro invitado es profesor emérito profesor emérito de política y estudios rusos en la Universidad de Nueva York y la Universidad de Princeton, Stephen Cohen. Su último libro es Soviet Fates and Lost Alternatives: From Stalinism to the New Cold War (El destino sovietico y las alternativas perdidas: Del estalinismo a la Nueva Guerra Fría). ¿Aaron?
AARON MATE: Sí. en esta cuestión de la participación de Rusia en Ucrania, y la expansión de la OTAN, supongo que usted reconoce que Putin está desestabilizando Ucrania— envió armas, envió tanques, de algún modo envió algunas tropas. ¿El argumento entonces es que está actuando no paea restablecer el imperio soviético, sino para detener la invasión de la OTAN? ¿Es ese su argumento?
STEPHEN COHEN: Ese es mi argumento simplificado. Pero déjeme hacerle una pregunta. Cinco millones de personas, aproximadamente, viven en esta zona del este de Ucrania. Han vivido allí durante siglos. Sus abuelos, sus padres están enterrados allí. Sus hijos van a la escuela allí. Esa es su casa. ¿Es que ellos no tienen humanidad ni voluntad? Hemos tomado— No yo, sino la prensa principal en este país se refiere a ellos como los “matones de Putin”. ¿Dónde está la humanidad de estas personas que están muriendo, ahora ya casi 6.000? Un millón se han convertido en refugiados. Son personas. ¿Quién está luchando? En primer lugar, las familias, los adultos, de estas personas. ¿Han tenido la ayuda de Rusia? Absolutamente. ¿Ha tenido Kiev la ayuda de Occidente? Miles de millones de dólares. El general de Hodges— no sé exactamente lo que hace, pero él es un oficial estadounidense de la OTAN— anuncia públicamente que está en Ucrania para entrenar a la Guardia Nacional. Ambas partes están implicadas militarmente. Pero no nos engañemos: Si no había una rebelión autoctona en el este de Ucrania, no habría una guerra civil ucraniana. ¿Está Putin en complicidad con el este? Sí. ¿Estamos instigando al oeste y a Kiev? Sí.
AMY GOODMAN: Vamos a ir a Hodges por un minuto. El mes pasado, los soldados estadounidenses de la segunda Caballería viajaron al estado soviético de Letonia para un ejercicio militar, apodado Solución Atlantica, para entrenar a soldados de Letonia, otros países bálticos y Polonia. Adicionalmente, EE.UU. llevó más de 50 unidades de equipo militar, incluidos 17 vehículos blindados, Stryker, que se quedará en Europa. Ben Hodges, de quien ha hablado, es el comandante general del Ejército de Estados Unidos en Europa.
GEN. BEN HODGES: La decisión de dejar el equipo en Europa fue tomada el año pasado. Así que, más de 200 tanques y vehículos de combate de infantería, no se ha tomado aún la decisión de donde permanecerán. Por supuesto, algunos se quedarán en Alemania, en una base estadounidense, pero estamos mirando opciones para dejar algunos en Letonia, Lituania, Estonia, Polonia, Rumania, Bulgaria.
AMY GOODMAN: Ese era Ben Hodges, el comandante general del Ejército de Estados Unidos en Europa. Por lo tanto, llevar ese equipamiento al exestado soviético de Letonia y los demás, ¿qué significado tiene?
STEPHEN COHEN:¿Qué? ¿Su presencia en Letonia? Bueno, él está ahora en Ucrania. Lo que significa es que estamos movilizándonos militarmente— con “nosotros”, me refiero a la OTAN, pero Estados Unidos dirige la OTAN. Ya escuchó lo que dijo Strobe Talbott: Tenemos que hacer todo lo que haga falta para defender Ucrania. Por cierto, él no menciona que hay dos ucranias. ¿Qué pasa con las personas en el este de las que acabamos de hablar? ¿No tienen la humanidad? Pero estamos en el borde de la guerra con Rusia. Se ha referido a mí como emérito. Eso significa viejo. Eso significa que recuerdo cosas. Y recuerdo que cuando llegamos a este tipo de extremos en la Guerra Fría, durante la última Guerra Fría, hubo personas que se manifestaron en oposición en este país, no sólo gente como nosotros tres, gente común, estoy hablando de senadores, miembros del Congreso— incluso el gobierno estaba dividido— The New York Times, The Washington Post. Ahora tenemos el silencio de los halcones. El partido de la guerra estadounidense está en marcha. Usted puede ver lo cerca que estamos, literalmente, de una confrontación militar con Rusia. Y no hay una sola palabra de oposición por parte de la clase dirigente y los medios convencionales de este país. Entonces, ¿es esto bueno o malo? ¿Vamos a la guerra? ¿Tuvimos un debate antes de que invadimos Irak? Lo tuvimos. Y aquellos de nosotros que se opusieron a ello perdimos el debate. Pero tuvimos un debate. Esa “democracia ahora”, no hoy, no en Estados Unidos. No hay debate alguno. Por lo tanto, el peligro es grande. No hay oposición. Toda esta gente de la que ustedes han hablado —Strobe Talbott, el general Hodges, cualquier personas que aparezca en la pantalla, porque sólo hablan para estadounidenses— están en marcha.
AARON MATE: ¿Qué está impulsando esta política por parte de EE.UU.? Muchas personas que participaron en la Guerra Fría ya no están en el poder. ¿Están tratando de revivir esa época? ¿Es una cuestión de la ampliación de la OTAN, o confrontar a Putin porque no les gusta? ¿Cuál es la fuerza impulsora?
STEPHEN COHEN:Todo lo anterior, creo. No lo sé. No soy lo suficientemente inteligente como para decírselo. Los historiadores mirarán al pasado— Suponiendo que haya historiadores para mirar al pasado, porque ambas partes están movilizando sus armas nucleares. Rusia ya ha dicho que si se enfrenta a una fuerza abrumadora en sus fronteras, usará armas nucleares tácticas. Son armas nuclear pequeñas, pero son las armas nucleares. ¿Cuándo fue la última vez que escuchó a un gran potencia de decir eso? Decimos— Obama, nuestro presidente, dice: “Estamos modernizando nuestras armas nucleares”. ¿Qué significa eso? Las estamos redistribuyendo, apuntando aún más hacia Rusia. ¿Por qué sucede esto en Estados Unidos? No lo sé. Creo que hay un montón de factores mezclados, una especie de resaca ideológica de la vieja Guerra Fría. Pero la demonización de Putin se ha vuelto tan extrema en este país, No recuerdo— y entré en este campo de trabajo en los años 60— no recuerdo a Estados Unidos demonizar nunca a un líder comunista soviético en la forma en que nuestros líderes lo están haciendo— Obama, Hillary Clinton, refiriéndose a él como un Hitler. Mire, si Putin es Hitler, claramente tenemos que ir a la guerra. Esa es la lógica, ¿no es así? ¿Y dónde están las voces que dicen que esto es una locura? Él puede ser un nacionalista ruso. Él puede ser intimidante. ¿Pero Hitler?
AMY GOODMAN: Durante una entrevista en la cadena CNN que se transmitió el domingo, el presidente Obama reconoció que Estados Unidos desempeñó un papel activo en el derrocamiento del presidente electo de Ucrania, Viktor Yanukovich, el febrero pasado. PRESIDENTE BARACK OBAMA: Putin tomó esta decisión en torno a Crimea y Ucrania, no debido a ninguna gran estrategia, sino esencialmente porque él fue sorprendido por las protestas en Maidan y por la huida de Yanukovich después de haber negociado un acuerdo para la transición de poder en Ucrania.
AMY GOODMAN: Los comentarios del presidente Obama fueron noticia en Rusia. Este es el canciller ruso Sergey Lavrov.
SERGEY LAVROV: Tengo dos observaciones que son importantes. Ha habido confirmación de que Estados Unidos estaba directamente involucrado, desde el principio, en este golpe de Estado antigubernamental. Y el presidente Obama, literalmente, lo llamó “la transición de poder”. En segundo lugar, me gustaría señalar que la retórica de Obama muestra la intención de Washington de continuar haciendo todo lo posible por apoyar incondicionalmente a las autoridades de Ucrania, que al parecer han tomado un rumbo hacia una solución militar al conflicto.
AMY GOODMAN: Ese era el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia y, antes de eso, el presidente Obama.
STEPHEN COHEN: Sí, el presidente Obama dijo algo que, indudablemente, luego se le dijo que no debería haber dicho, porque no estaba claro a qué se estaba refiriendo. Muchas personas han argumentado que Estados Unidos organizó un golpe de Estado en febrero para derrocar al presidente de Ucrania y llevar al poder de este nuevo gobierno proestadounidense, prooccidental. No sé si eso es cierto. Pero lo que Obama dijo lleva a la gente a pensar que es lo que él estaba reconociendo. No lo estaba haciendo. Esto es lo que sucedió. Y tiene razón acerca de Crimea. Él simplemente reveló ese secreto por accidente. Un acuerdo fue negociado en febrero. Recordemos lo que pasó. Fue hace sólo un año. Los ministros de Exteriores de Europa, al tiempo que la violencia hacía estragos en las calles de Kiev, apresuraron a Kiev y negociaron un acuerdo entre el presidente en ejercicio y los líderes de la oposición— Yanukovich— que iba a formar un gobierno de coalición y convocar a nuevas elecciones en diciembre. Y todo el mundo piensa, “La violencia se ha evitado. Estamos de vuelta a una ruta democrática”. ¿Y qué pasó? Al día siguiente, una muchedumbre salió a las calles, asaltó el palacio presidencial; Yanukovich, el presidente, huyó a Rusia. Pero ahora sabemos que cuando ese acuerdo fue alcanzado por los ministros europeos, Putin y Obama hablaron por teléfono, y Putin le dijo a Obama, “¿Apoyas esto?” Y Obama dice: “Lo estoy. Vamos a volver al camino pacífico”. Y entonces él le pregunta a Putin, “¿Apoyas esto?” Y Putin dijo: “Al cien por ciento”. Y al día siguiente, eso sucedió. Entonces, algo sucedió durante la noche. Obama perdió el control de la situación. No sabía lo que estaba pasando. Pero cuando dice que negociaron una transición pacífica del poder, él no se está refiriendo al derrocamiento de Yanukovich; él está refiriéndose al acuerdo que firmó para mantener al presidente de Ucrania en el cargo por otros ocho o nueve meses hasta las elecciones nacionales. Por lo tanto, ahora se han confirmado las oscuras sospechas de Rusia de que la CIA o alguien llevó a cabo un golpe de Estado. Estoy seguro de que Obama se arrepiente de haber dicho eso. Pero no tengo nada claro— voté por él dos veces— si el presidente Obama entiende lo que está pasando en Ucrania, porque dijo una serie de cosas que son tan divergentes de los registros históricos que, o bien está recibiendo malos consejos, o no está prestando atención. No sé cuál de las dos.
AARON MATE: ¿Puede esbozar para nosotros la lucha que ha tenido lugar desde abril? La ONU dice ahora que la cifra de muertos es de más de 5.300. Samantha Power, la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, ha elogiado la respuesta de Kiev y dijeron que practicaban “notable, casi inimaginable, moderación “en sus ataques contra los separatistas.
STEPHEN COHEN: Bueno, me da vergüenza ser un ciudadano estadounidense. Recordemos que cuando la embajadora Power no era la embajadora Power ella era la gran arquitecta e ideóloga de la responsabilidad para proteger a los civiles. ¿Correcto? Todo el mundo está familiarizado con eso.
AMY GOODMAN: Explíquelo brevemente.
STEPHEN COHEN: Bueno, explíquelo usted.
AMY GOODMAN: Explíquelo usted.
STEPHEN COHEN: Ya lo ha hecho en su programa. Bueno, significa que Estados Unidos está obligado a hacer todo lo lo posible para prevenir un desastre humanitario ya sea por medio de medidas naturales o bélicas. Y esa ha sido la política oficial estadounidense desde Clinton. Si se trata de una política sabia o no, yo no lo sé. Pero el arquitecto de ahora dice lo que está pasando en el este de Ucrania— y hay mucho más de 5.000 muertos; Incluso la ONU ha dicho que realmente no lo sabemos, pero digamos 5.300. También hay un millón y medio de refugiados, la mayoría de ellos han huido a Rusia, pero algunos a otras partes de Ucrania. Y Estados Unidos está diciendo— y en el Departamento de Estado y en la Casa Blanca y en la ONU, con Samantha Power— que Kiev ha sido moderado. Muy bien, revisemos esto. ¿Cómo ha llamado Kiev a su operación militar en el este desde abril? Una operación antiterrorista. Literalmente, esas son las palabras. Si yo declaro que eres un terrorista— no un rebelde, no un adversario político, sino un terrorista— Yo no hablo contigo, te mato. Y eso es lo que Kiev ha estado haciendo, con el apoyo de Estados Unidos. Ha estado destruyendo los centros civiles del este de Ucrania. ¿Se han defendido los rebeldes? ¿Han matado a miembros del ejército de Ucrania? Absolutamente. Pero, ¿qué estamos haciendo apoyando a un gobierno que está bombardeando a civiles? Y, por cierto, Amnistía Internacional, Human Rights Watch, muchas otras organizaciones ya han dicho estos son crímenes de guerra. Y, sin embargo, el gobierno estadounidense no lo ve mal.
AMY GOODMAN: Antes escuchamos a Angela Merkel, la canciller alemana. Dijo que Alemania no apoyará a Ucrania con armas. Ella apoya las sanciones. Dice que sólo hay una respuesta diplomática. ¿Cuál es la solución? ¿Y qué piensa acerca de las sanciones, y la primera plana de The New York Times hablando sobre EEUU armando a Ucrania?
STEPHEN COHEN: Amy, ¿qué me está haciendo? Usted está enseñando a cada persona que se ha comportado imprudentemente en un papel de liderazgo y preguntándome lo que pienso de ellos.
AMY GOODMAN: Sí.
STEPHEN COHEN: Sí. Qué pienso de ellos, que necesitamos algunos líderes. Ahora bien, pensé, cuando le visité en febrero o enero, que la solución era la canciller de Alemania, Merkel. ¿Por qué? Debido a que Alemania es el motor de Europa. Debido a Merkel habla ruso y alemán, y Putin habla ruso y alemán. Pueden hablar, como usted y yo hablamos, y entienden los matices. Merkel ha dicho, todo el tiempo, esto no puede ser resuelto por medios militares, debe haber negociaciones. Y, sin embargo, políticamente, ella apoyó cada escalada de la crisis. ¿Por qué ha hecho eso? Porque ella era, y tal vez ella podría seguir siendo, la figura clave aquí.
AMY GOODMAN: Y ella viene a la Casa Blanca el lunes.
STEPHEN COHEN: Sí, pero ella ha estado en Ucrania. Ella ha estado en todas partes. Ella se mueve. Hay distancia entre la Casa Blanca y Berlín, no hay duda. Merkel podría terminar esto, o ella podría recorrer un largo camino. Ella podría plantarse: no más sanciones, no más implicación de la OTAN. Detente y piensa quien es ella. El único país solvente de Europa. Y mira lo que está pasando en Grecia. Quiero decir, ellos pueden salir de la UE. A propósito, si el Reino Unido sale de la UE en mayo, cuando va a tener lugar el referéndum, ¿quién dirigirá Europa? Alemania. Y la actitud de Alemania hacia Rusia y China es fundamentalmente diferente de la actitud de Washington. Así que podemos estar observando aquí, de manera oculta, no sólo la escisión de Europa, sino la deriva de Alemania, y la parte de Europa que sigue Alemania, lejos de Estados Unidos. Todo está en juego en esta guerra civil. ¿Cómo salir de ella? Es la misma solución que hablamos aquí hace meses: un alto el fuego; retirada de la artillería para que las ciudades de Donetsk, donde están los rebeldes, no sean bombardeadas; La disposición de Kiev a sentarse, en una mesa de este tamaño, bajo los auspicios de las grandes potencias, y hablar con los rebeldes. ¿Qué autonomía serán cedidas? Una especie de federalismo, una especie de devolución de la autoridad. Los gobernadores de las regiones de Ucrania son nombrados en Kiev. Nuestros gobernadores no son nombrados en Washington; los elegimos. No hay federalismo allí. Todo el mundo dice que federalismo significa una toma de control de Rusia. Pero Alemania tiene un sistema federal, Canadá tiene un sistema federal, nosotros tenemos un sistema federal. Son cosas difíciles, pero se pueden lograr. Pero, ¿sabé como arreglar esto? A través del liderazgo. ¿Dónde está el liderazgo? ¿Dónde está el presidente Obama? ¿Dónde está la canciller Merkel? Y el liderazgo en Ucrania, quiero decir, Poroshenko, él es el presidente del país. Él no tiene poder. Él no tiene poder. Él no es el líder. El poder está con la gente en Ucrania que controlan los batallones armados y lo que queda del ejército. Así que ni siquiera sabemos qué tipo de régimen o de liderazgo es posible en Kiev ahora mismo.
AMY GOODMAN: Bueno, profesor Stephen Cohen, vamos a seguir cubriendo esto. Le agradecemos que haya estado con nosotros. Profesor emérito de política y estudios rusos en la Universidad de Nueva York y en la Universidad de Princeton. Su libro más reciente, “Soviet Fates and Lost Alternatives: From Stalinism to the New Cold War” (El destino sovietico y las alternativas perdidas: Del estalinismo a la Nueva Guerra Fría). está ya disponible en edición de bolsillo. Vamos a vincular a sus escritos recientes sobre Ucrania en TheNation.com.
Traducido por Constanza Sánchez Chiappe e Igor Moreno. Editado por Igor Moreno y Democracy Now! en Español.