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Indiana enfrenta boicots y una feroz crítica después de la nueva medida del gobernador Mike Pence, que podría sancionar la discriminación al permitir que los propietarios de comercios se rehúsen a atender a clientes homosexuales, en nombre de “la libertad religiosa”. Connecticut fue el primer estado que boicotea oficialmente a Indiana por dicha medida, y San Francisco y Seattle también impusieron prohibiciones contra los viajes financiados por la ciudad a dicho estado. Nueve directores de empresas, entre ellos los titulares de Angie’s List y Eli Lilly, escribieron cartas pidiendo a los funcionarios del estado de Indiana que “tomen medidas inmediatas” para garantizar que no se sancione la ley ni que se aliente la discriminación. El sábado, miles de personas marcharon por las calles de Indianápolis para pedir la renuncia de Pence. Los detractores de la medida convocaron a un boicot y algunos, entre ellos el ex jugador estrella de la NBA Charles Barkle, piden que el próximo campeonato de basquetbol universitario Final Four, no se juegue en dicho estado. Quienes apoyan la medida dijeron que otros diecinueve estados tienen leyes similares y que a Indiana la están criticando indebidamente. Pence dijo que buscará una nueva medida para “aclarar la intención” de su nueva ley, aunque agregó que la protección a los homosexuales no “está en mi agenda”. Nos acompaña Eunice Rho, defensora y consejera política de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles.
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