El lunes, los tres candidatos republicanos que están en carrera y la candidata demócrata Hillary Clinton se presentaron ante la conferencia pro-Israel del Comité de Asuntos Públicos de Estados Unidos e Israel (AIPAC, por su sigla en inglés). Donald Trump se enfrentó a un boicot de unos rabinos, que declararon sentirse ofendidos por los comentarios del empresario contra mexicanos, musulmanes y judíos, y querían “iluminar con moralidad la oscuridad que ha envuelto la campaña del señor Trump”. Hillary Clinton intentó mostrarse como una aliada más fuerte para Israel que Donald Trump, atacando la reciente declaración de Trump de que sería “neutral” en la negociación de un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos. Muchos vieron el discurso de Clinton como un intento de posicionarse a la derecha de Trump respecto a Israel.
Hillary Clinton declaró: “Es también por eso que, como presidenta, voy a tener un compromiso firme para asegurar que Israel mantenga su ventaja militar cualitativa. Estados Unidos debe proveer a Israel con la tecnología de defensa más sofisticada para que pueda disuadir y detener cualquier amenaza. Eso incluye reforzar las defensas de los misiles israelíes con nuevos sistemas como Arrow Three (Flecha tres) y David’s Sling (Honda de David). Y debemos trabajar juntos para desarrollar una mejor detección de túneles y tecnología para prevenir contrabando de armas, secuestros y ataques terroristas”.
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