El lunes, Bernie Sanders hizo campaña en Puerto Rico, donde las elecciones primarias demócratas se celebrarán el 5 de junio. Sanders dijo que la deuda de 70.000 millones de dólares de Puerto Rico debe ser reestructurada de forma que no profundice su crisis económica.
Sanders expresó: “Es moralmente inaceptable que los fondos buitre pidan que Puerto Rico despida a maestros, cierre escuelas, recorte las pensiones y anule el salario mínimo, para que ellos puedan obtener grandes ganancias a costa del sufrimiento y de la miseria de los niños y de la gente en Puerto Rico. No podemos dejar que esto pase, y no lo permitiremos”.