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Durante el fin de semana hubo fuertes protestas contra la brutalidad policial en más de una docena de ciudades a lo largo y ancho de Estados Unidos. Decenas de miles de personas tomaron las calles y bloquearon carreteras, puentes y autopistas. Cientos de personas fueron detenidas en todo el país. Las protestas estallaron ante el asesinato de dos hombres afroestadounidenses a manos de la policía la semana pasada: Alton Sterling en Baton Rouge, Louisiana, y Philando Castilla en Falcon Heights, Minnesota. Pero hay otro caso reciente de violencia policial que fue totalmente ignorado por los medios de comunicación masivos a nivel nacional. El 4 de julio, un oficial de policía de Nueva York que estaba fuera de servicio, Wayne Isaacs, mató de un disparo a Delrawn Small, un hombre afroestadounidense desarmado. Los agentes de policía alegaron inicialmente que Small había golpeado al oficial Isaacs en la cara después de un altercado automovilístico. Sin embargo, se acaba de difundir un video de las cámaras de vigilancia que contradice la versión policial y muestra, en cambio, que Small se acercó al vehículo del oficial fuera de servicio y sin que pasara más de un segundo, éste le disparó. Ampliamos esta información con Roger Wareham, abogado de la familia de Delrawn Small.