En Siria, el alto el fuego se sigue debilitando después de que bombarderos liderados por Estados Unidos atacaran un puesto militar sirio, matando a decenas de soldados del gobierno y permitiendo que combatientes del ISIS invadieran a los sobrevivientes. Funcionarios militares estadounidenses se han hecho cargo del ataque del sábado, cerca de Deir ez-Zor, donde murieron más de 60 soldados sirios, afirmando que creyeron erróneamente que los objetivos eran unidades del ISIS. El ataque se produjo menos de una semana después de iniciado un cese del fuego mediado por Estados Unidos y Rusia que pretendía separar a las facciones en guerra y permitir que llegara ayuda humanitaria a las ciudades sitiadas. Este hecho condujo a Rusia a convocar una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, donde el embajador Vitaly Churkin cuestionó si el ataque había sido programado para deshacer el alto el fuego.
Vitaly Churkin enunció: “Es bastante significativo y, francamente, sospechoso que Estados Unidos decidiera llevar a cabo este ataque aéreo en particular en este momento. ¿Por qué, de repente, Estados Unidos elige ayudar a las fuerzas armadas sirias que defendían Deir ez-Zor? Después de todo, no hizo nada cuando el ISIS avanzaba en Palmira. El ISIS marchó cientos de kilómetros sin ser atacado por la coalición”.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia acusó a la Casa Blanca de defender al ISIS; por su parte, el gobierno de Siria dijo que el ataque demostró que Estados Unidos estaba ayudando al grupo en un intento de derrocar al régimen de Bashar al Assad. La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Samantha Power, denunció tales demandas y criticó a Rusia por convocar la reunión del Consejo de Seguridad.
Samantha Power expresó: “Si determinamos que efectivamente atacamos al personal militar sirio, esa no era nuestra intención. Nosotros, por supuesto, lamentamos la pérdida de vidas. Dicho esto, incluso para los estándares de Rusia, la estratagema de esta noche, repleta de moralismo y grandilocuencia, es particularmente cínica e hipócrita”.
Tras el bombardeo estadounidense hubo informes de otras violaciones al alto el fuego en toda Siria, incluyendo al menos cuatro ataques aéreos en Alepo.