Miles de manifestantes inundaron los aeropuertos en Estados Unidos el fin de semana, luego de que el viernes el presidente Donald Trump firmara una orden ejecutiva que prohíbe temporalmente que los refugiados ingresen al país y niega el acceso durante 90 días a los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana. Esta severa medida restringió de un momento para el otro el acceso a Estados Unidos de 218 millones de personas provenientes de Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen. Además, suspendió indefinidamente la admisión de refugiados sirios. Hubo viajeros varados en todas partes del mundo, y las autoridades aduaneras detuvieron a muchísimas personas al aterrizar en aeropuertos estadounidenses. El sábado, a medida que se daba a conocer la noticia sobre la orden ejecutiva, miles de personas se trasladaron al aeropuerto John F. Kennedy, en la ciudad de Nueva York, para protestar. Los manifestantes se congregaron fuera de la Terminal 4 y coreaban “¡Déjenlos entrar!”.
Una manifestante expresó: “Estoy aquí como judía-estadounidense. Soy muy consciente de lo que hicimos hace un par de generaciones, y no quiero que lo hagamos otra vez. Los musulmanes son mis hermanos y se merecen estar aquí tanto como yo. Ninguna persona es ilegal”.
La orden del presidente Trump suscitó la presentación inmediata de recursos judiciales y el domingo, varios jueces de California, Massachusetts, Nueva York, Virginia y Washington emitieron permisos de estancias temporales que impiden que se deporte a los titulares de visas válidas. No obstante, algunos legisladores indican que los funcionarios de Aduana y Protección Fronteriza no están obedeciendo lo impuesto por los tribunales. El congresista Don Beyer, del Estado de Virginia, afirmó que los funcionarios del aeropuerto de Dulles, en las afueras de Washington DC, se negaron a comentar si estaban deteniendo a los viajeros y si les habían negado el acceso a sus abogados. El representante Beyer tuiteó: “Estamos viviendo una crisis constitucional. Cuatro miembros del Congreso les pidieron a funcionarios de Aduana y Protección Fronteriza que aplicaran una orden de un tribunal federal, y ellos les dieron la espalda”. En Los Ángeles, oficiales de la policía con equipamiento antidisturbios se desplegaron el domingo mientras miles de manifestantes bloqueaban el tránsito cerca de la Terminal Internacional de Tom Bradley. Miles de personas más protestaron en los aeropuertos de Chicago, Denver, Atlanta, Houston, Seattle y otras ciudades. En San Francisco, los manifestantes bloquearon el domingo todos los puntos de acceso de seguridad de la terminal internacional del aeropuerto de San Francisco. Estas son las palabras de Lara Kiswani, directora ejecutiva del Arab Resource and Organizing Center.
Lara Kiswani dijo: “Les pedimos a los trabajadores que se pongan de nuestro lado y no cumplan con estas órdenes racistas. Les pedimos a los abogados que se pongan de nuestro lado y continúen defendiendo a estos inmigrantes y refugiados. Y le pedimos a la gente que continúe presentándose en los aeropuertos todas las veces que sea necesario. Por más difícil que esto parezca para las personas que se quedan aquí horas y horas, no podemos siquiera imaginarnos lo que están pasando los detenidos y refugiados e inmigrantes del otro lado. Por eso, queremos demostrar valentía, disciplina y rigurosidad, y asegurarnos de que sepan que los vamos a apoyar. Y continuaremos indefinidamente hasta que derrotemos a Trump”.
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