En el Capitolio de Estados Unidos, los máximos funcionarios de inteligencia dijeron a una audiencia receptiva, integrada por legisladores demócratas y republicanos de la Comisión de Servicios Armados del Senado, que Rusia intentó interferir en las elecciones de noviembre mediante una serie de manipulaciones y filtraciones.
James Clapper, el director de inteligencia nacional saliente declaró: “Rusia asumió una postura cibernética aún más agresiva al aumentar las operaciones de espionaje cibernético, filtrar datos robados de estas operaciones y atacar sistemas de infraestructura de vital importancia”.
Varios críticos, entre ellos el periodista Glenn Greenwald, han cuestionado la afirmación de que Rusia interfirió en las elecciones de noviembre. Cabe recordar que James Clapper mintió anteriormente al declarar bajo juramento en el Congreso. En marzo de 2013, el senador Ron Wyden le preguntó a Clapper: “¿La Agencia Nacional de Seguridad recopila todo tipo de información sobre millones o cientos de millones de estadounidenses?”, a lo que Clapper respondió: “No, señor”. Más tarde Clapper se defendió al afirmar que había respondido a la pregunta “de la manera en que faltaba menos a la verdad”. Donald Trump tiene programado reunirse hoy con Clapper, el director de la CIA John Brennan y el director del FBI James Comey, quienes afirman que presentarán pruebas al presidente electo de que hackers rusos interfirieron en las elecciones de noviembre.