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Protestas en Palestina después de que Trump declarara que Estados Unidos reconocerá Jerusalén como la capital de Israel
Decenas de miles de palestinos participaron en protestas a lo largo de Cisjordania y la Franja de Gaza tras el anuncio del presidente estadounidense, Donald Trump, de que iba a reconocer Jerusalén como la capital de Israel y a iniciar un proceso para trasladar la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén. Decenas de palestinos resultaron heridos durante la represión a las manifestaciones por parte de soldados israelíes. Al menos 16 manifestantes fueron hospitalizados. El control de Jerusalén es uno de los asuntos más polémicos entre israelíes y palestinos. El ejército israelí tomó el control de Jerusalén Oriental en 1967 y ha ocupado el territorio desde entonces. Sin embargo, desde hace mucho tiempo los palestinos consideran que Jerusalén será la capital de su futuro país. Un alto funcionario palestino, Jibril Rajoub, declaró que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, no será bienvenido en la ciudad palestina de Belén, ubicada en los territorios ocupados de Cisjordania, durante su visita programada para este mes. Desde 1967, el Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas aprobaron en conjunto decenas de resoluciones en las que instan a Israel a poner fin a la ocupación de Jerusalén Oriental. El presidente palestino, Mahmoud Abbas, declaró que el anuncio de Trump implicaba que Estados Unidos había abdicado de su papel de mediador para el proceso de paz en Medio Oriente. El principal negociador palestino, Saeb Erekat, dijo que “el presidente Trump acaba de destruir toda política que implique una solución de dos Estados”. Estas son declaraciones de Erekat emitidas el martes.
Saeb Erekat enunció: “Esta medida es prejuiciosa y dictaminadora, y cierra las puertas para las negociaciones. Creo que el presidente Trump esta noche descalificó a Estados Unidos de América para desempeñar cualquier papel en un proceso de paz. Creo que esta noche está fortaleciendo las fuerzas de los extremistas en esta región como nadie lo ha hecho antes; este es un acto, una declaración, totalmente injustificada, totalmente inaceptable. Jerusalén, Jerusalén Oriental, es un territorio ocupado, ningún país en la Tierra ha reconocido la anexión de Jerusalén Oriental por parte de Israel, excepto el presidente Trump esta noche”.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, fue el único entre los líderes mundiales en opinar que la medida de Trump era un “paso importante hacia la paz”. El anuncio ya ha provocado una importante reacción a nivel internacional, con críticas emitidas por líderes de Reino Unido, Francia, Irán, Jordania, Egipto, Turquía, la Liga Árabe y otras naciones. Los palestinos han convocado a “tres días de furia” en los que habrá protestas en los territorios ocupados por Israel. En la actualidad, 86 naciones tienen sus embajadas en Tel Aviv y ninguno país la tiene en Jerusalén. Estas son declaraciones que efectuó el papa Francisco el martes.
El papa Francisco expresó: “Mis pensamientos están con Jerusalén. En este aspecto, no puedo ocultar mi gran preocupación sobre la situación que se ha desarrollado en los últimos días. En el ínterin quiero hacer un llamado urgente a todo el mundo a respetar el statu quo de la ciudad, respetando las resoluciones pertinentes de Naciones Unidas. Estoy orando para que predominen la sabiduría y la prudencia, para evitar nuevos elementos de tensión en un entorno global que ya está muy afectado por tantos conflictos crueles”.
Trump pide fin de bloqueo saudí en Yemen, pero continúa apoyando la guerra
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, le pidió a Arabia Saudí que ponga fin al bloqueo de Yemen para permitir el acceso a comida, agua, medicina y ayuda humanitaria, de extrema necesidad en el país asediado. Trump hizo ese pedido a pesar de que Estados Unidos continúa proporcionándole un apoyo militar masivo a la campaña de bombardeos sobre Yemen dirigida por la coalición saudí, incluyendo armas e imprescindibles repostajes en vuelo a aviones de guerra de la coalición. A principios de este año, Trump negoció un acuerdo de armas con Arabia Saudí por 110.000 millones de dólares.
Mientras tanto, en la capital de Yemen, Saná, se informó que rebeldes hutíes abrieron fuego contra un grupo de manifestantes mujeres que exigían la devolución del cuerpo del ex presidente Ali Abdullah Saleh. El líder de larga trayectoria fue asesinado por rebeldes hutíes a principios de esta semana, luego de que cambiara de bando en la actual guerra y diera su apoyo a la coalición dirigida por Arabia Saudí. Activistas informan que hubo mujeres heridas en la represión y al menos 50 fueron arrestadas. La muerte del ex presidente Ali Abdullah Saleh fue confirmada el lunes, luego de que un video publicado por rebeldes hutíes mostrara al cuerpo sin vida de Saleh en la parte trasera de una camioneta. Saleh fue asesinado, al tiempo que en la capital, Saná, continúan los duros combates entre hutíes y las fuerzas alineadas con el movimiento político al que pertenecía Saleh. Este asesinato podría agravar la guerra civil en Yemen, que ha llevado a siete millones de personas al borde de la hambruna, además de avivar una epidemia masiva de cólera.
Por otra parte, un ataque aéreo de la coalición liderada por Arabia Saudí, que recibe el respaldo de Estados Unidos, causó la muerte de al menos 12 personas en la ciudad de Saada el domingo. Este es Megahed Gassar, quien resultó gravemente herido en el bombardeo.
Megahed Gassar declaró: “Dirigieron el ataque contra mi casa, donde teníamos entre 18 y 20 invitados. Toda la familia se encontraba adentro, así como nuestro ganado. Se perdió todo. No quedó nada”.
El sábado, altos funcionarios de las Naciones Unidas solicitaron a la coalición liderada por Arabia Saudí que pusiera fin al bloqueo de los puertos de Yemen sobre el Mar Rojo y advirtieron que “el riesgo de una hambruna generalizada en cuestión de meses es muy real”.
En Siria, 27 civiles murieron en ataque a suburbio de Damasco
En Siria, aviones de guerra atacaron este fin de semana residencias de la ciudad de Guta Oriental, cercana a Damasco y que es controlada por los rebeldes. En el ataque murieron 27 civiles y decenas resultaron heridos. Un video publicado por la agrupación de defensa civil conocida como los Cascos Blancos muestra a los trabajadores sacando cuerpos de edificios reducidos a escombros; entre los heridos y muertos había niños.
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