En su primer viaje a Asia, el secretario de Estado, Rex Tillerson, afirmó desde Corea del Sur que Estados Unidos no descarta implementar medidas militares contra Corea del Norte.
Rex Tillerson dijo: “Quiero ser muy claro: la política de paciencia estratégica ha llegado a su fin. Estamos analizando una nueva gama de medidas diplomáticas, de seguridad y económicas. Todas las opciones están sobre la mesa”.
Esta mañana, Tillerson también visitó la Zona Desmilitarizada en la frontera entre Corea del Norte y del Sur. Esta semana, Estados Unidos, Japón y Corea del Sur llevaron a cabo dos días de ejercicios militares de entrenamiento y enviaron buques de guerra a la misma área donde Corea del Norte disparó cuatro misiles hace una semana. El equipo de elite SEAL 6 de Estados Unidos participó en los ejercicios de guerra por primera vez.
Estos ejercicios de guerra coinciden con la acumulación de equipamiento militar por parte de Estados Unidos en la región. En las últimas semanas, Estados Unidos desplegó un sistema de defensa con misiles llamado THAAD, Sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud, en Corea del Sur. Además, anuncio que desplegará drones de ataque en Corea del Sur.
Durante su viaje por Asia, Tillerson apoyó la propuesta de realizar grandes recortes al presupuesto del Departamento de Estado, a pesar de las advertencias de que los recortes reducirían la capacidad de Estados Unidos de llevar adelante esfuerzos diplomáticos para resolver los conflictos. El secretario de Defensa, James Mattis, dijo notoriamente una vez, cuando se desempeñaba como comandante del Comando Central de Estados Unidos: “Si no se financia el Departamento de Estado en su totalidad, entonces tendré que comprar más municiones”.
Antes de viajar a la Zona Desmilitarizada en la frontera entre Corea del Norte y del Sur, Tillerson había visitado Japón a principios de la semana, donde también pidió que se aplicara un “enfoque distinto” respecto de Corea del Norte, ya que en su opinión los esfuerzos diplomáticos hasta el momento no habían tenido éxito. Con motivo de su visita, varios manifestantes se congregaron en Okinawa para protestar contra la presencia de bases militares estadounidenses en la isla.
El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, continúa perdiendo apoyo para el plan de cuidado de salud de los republicanos. Algunos de los principales líderes del partido admitieron el jueves que no tienen los votos suficientes como para hacer avanzar el proyecto en la Cámara en pleno. El Comité de Presupuesto aprobó el proyecto de ley el jueves con un margen estrecho de 19 votos a favor y 17 en contra. Todos los demócratas del comité votaron en contra del proyecto, al igual que tres republicanos: el congresista republicano de Virginia, Dave Brat; el congresista republicano de Alabama, Gary Palmer, y el congresista republicano de Carolina del Sur, Mark Sanford. Importantes legisladores republicanos y la Casa Blanca admitieron que quizás tengan que introducir cambios en el proyecto de ley para que la Cámara lo apruebe, aunque el presidente de la Cámara de Representantes Ryan se enfrenta a una división entre los republicanos, ya que algunos miembros de su partido piden que los recortes a Medicaid se produzcan incluso más rápido, mientras que otros piden que Medicaid y otras disposiciones de protección para los ciudadanos de bajos recursos se mantengan.
El presupuesto propuesto por el presidente Trump generó muchas críticas el jueves, de parte de legisladores tanto demócratas como republicanos. El presupuesto de 2018 propone un aumento sin precedentes por un total de 54.000 millones de dólares para gastos militares, a la vez que recorta programas ambientales, de vivienda, diplomáticos y educativos.
También propone un recorte del 31% para la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por su sigla en inglés) y la eliminación de 3.200 fuentes de trabajo. En caso de aprobarse, el presupuesto de la EPA sería el más bajo de los últimos 40 años. El jueves, el director de la oficina de Gestión y Presupuesto, Mick Mulvaney, se refirió al financiamiento de programas sobre el cambio climático como “una pérdida de dinero”.
Mick Mulvaney afirmó: “Sobre el tema del cambio climático, creo que el presidente fue bastante claro: ya no vamos a destinar más dinero a eso; consideramos que hacerlo es una pérdida del dinero de la población. Esto está directamente vinculado a su compaña”.
El presupuesto propuesto por Trump también recortaría los gastos del Departamento de Estado y USAID en un 28%, y rebajaría millones de dólares destinados al financiamiento para la ONU, en un momento en el que esta entidad afirma que el mundo enfrenta la mayor crisis humanitaria desde la Segunda Guerra Mundial. El jueves, Human Rights Watch pidió que Trump continuara financiando programas de derechos humanos en todo el mundo.
Louis Charbonneau dijo: “Muchos conflictos están basados en violaciones y abusos de los derechos humanos, y el hecho de que Estados Unidos recorte los fondos podría tener como resultado mucha inestabilidad y conducir a un aumento de las violaciones de derechos. El Congreso tiene la oportunidad de dar un paso adelante —y definitivamente deberían darlo— y asegurarse de que Estados Unidos no se aleje de los compromisos asumidos para mantener el sistema internacional de derechos humanos en vigencia desde la Segunda Guerra Mundial, que incluye a la ONU”.
El presupuesto de Trump también representa una amenaza para varios programas de ayuda a la población pobre en Estados Unidos, como el programa de Asistencia Energética para Hogares de Bajos Ingresos, que ayuda a tener acceso a la calefacción durante el invierno, y el programa de Subvenciones en Bloque para el Desarrollo Comunitario, que financia, entre otras cosas, el programa Meals on Wheels, para alimentar a adultos mayores, personas pobres, veteranos de guerra y discapacitados. Por más información sobre el presupuesto propuesto por Trump, con Ralph Nader, visite www.democracynow.org/es.
El presidente Trump mantiene su posición sin pruebas de que el ex presidente Obama habría intervenido sus teléfonos en la Torre Trump durante las elecciones de 2016, incluso aunque importantes legisladores sigan desestimando las denuncias. El jueves, el presidente del Comité de Inteligencia del Senado, Richard Burr, y su vicepresidente, Mark Warner, publicaron una declaración en la que sostienen: “En función de la información que tenemos disponible, no vemos indicios de que la Torre Trump fuera el objetivo de vigilancia de ningún elemento del gobierno estadounidense ya sea antes o después de las elecciones de 2016”. La declaración se produjo sólo horas después de que Trump le dijera el periodista de Fox News Tucker Carlson que pronto proporcionaría pruebas, y que sus denuncias se basan, en parte, en un informe que había visto en Fox News.
Donald Trump sostuvo: “Vi a tu amigo Bret Baier, ayer, hablando sobre determinadas cosas complejas que estaban sucediendo y sobre las escuchas telefónicas. Y dije: 'Un momento, se está hablando mucho sobre las escuchas telefónicas'”.
El secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, también intentó defender las acusaciones sin pruebas de Trump durante un polémico intercambio de 20 minutos con los periodistas durante la conferencia de prensa del jueves.
Periodista: “¿Usted afirma que el presidente mantiene su posición con respecto a las denuncias de que el ex presidente Obama ordenó la intervención de los teléfonos o la vigilancia de la Torre Trump, a pesar de que el Comité de Inteligencia del Senado sostenga que no hay indicios de que esto haya sucedido?”.
Sean Spicer: “Primero que todo [el Presidente] mantiene las denuncias. Pero usted está describiendo de forma errónea lo que sucedió hoy en el Senado”.
Periodista: “El Senado dijo que no han encontrado indicios. Estoy leyendo textualmente la declaración”.
Sean Spicer: “No, no. Lo sé. Lo entiendo. Al mismo tiempo, reconocieron que no habían estado en contacto con el Departamento de Justicia. Pero vuelvo a lo que dije en un comienzo, es interesante… Esperen…”.
Hoy el presidente Trump se reunirá con la canciller alemana Angela Merkel en la Casa Blanca. Los mandatarios tienen previsto realizar una conferencia de prensa conjunta, la primera del presidente Trump desde que afirmara, sin ofrecer ninguna prueba, que el presidente Obama habría intervenido sus teléfonos en la Torre Trump. Luego de la conferencia de prensa, Trump volverá a Florida, en el quinto viaje a su club Mar-a-Lago desde que asumió la presidencia. The Hill informa que Trump ha pasado casi un cuarto de su período en funciones en su club privado.
En Estados Unidos están pidiendo la renuncia del principal asesor contra el terrorismo del presidente Donald Trump, Sebastian Gorka, después de que el periódico judío-estadounidense The Forward informara que Gorka es un “miembro juramentado” de un grupo húngaro de extrema derecha aliado a los nazis. The Forward señaló el jueves que miembros de la orden Vitézi Rend han confirmado que Gorka juró lealtad al grupo, que según el Departamento de Estado de Estados Unidos estaba “bajo la dirección del gobierno nazi de Alemania” durante la Segunda Guerra Mundial. Si el informe es cierto, significa que Gorka podría haber mentido en su solicitud de inmigración a Estados Unidos, que requiere que la persona revele si tiene vínculos con ese tipo de organizaciones. Gorka ha negado los informes de su participación en el grupo aliado de los nazis, y dijo a la revista Tablet: “Nunca he sido miembro de Vitézi Rend”. Visite democracynow.org/es para ver más información sobre Sebastian Gorka.
En Siria, el jueves por la noche murieron al menos 40 personas por un ataque aéreo a una mezquita durante las plegarias de la tarde en la población de Al Jina. El Pentágono confirmó que realizó un ataque aéreo el jueves por la noche en la misma zona, pero niega haber atacado la mezquita. En lugar de eso, el Pentágono afirma que el ataque se dirigió a una reunión de Al Qaeda a 15 metros de distancia de una mezquita, que según el ejército estadounidense se mantiene intacta. Activistas sirios y periodistas en el lugar niegan la versión del ejército estadounidense. Este es el periodista Bilal Abdul Kareem.
Bilal Abdul Kareem declaró: “Detrás de mí, todo esto era una parte del complejo. El gobierno de Estados Unidos admitió haber lanzado un ataque aéreo aquí anoche. Pero dijeron que lo hicieron a 15 metros de la mezquita. Pueden observar y ver que la mezquita está aquí y todo eso, que ha sido derribado por el ataque, lo que hay detrás de mí, era parte del complejo de la mezquita”.
En Nueva York se ha programado una segunda audiencia para el caso de dos tribus indígenas de Namibia que presentaron una demanda contra el gobierno alemán para exigir una indemnización por el genocidio de 100.000 personas en lo que actualmente es Namibia, realizado por Alemania entre 1904 y 1908. Los asesinatos fueron perpetrados por tropas imperiales alemanas cuando la región era una colonia alemana. Esta masacre se considera el primer genocidio del siglo XX.
La ciudad más grande de Brasil, São Paulo, se paralizó el jueves cuando los trabajadores del transporte, maestros y otros trabajadores del sector público organizaron una huelga general de 24 horas para protestar contra las reformas de las pensiones propuestas por el presidente brasileño, Michel Temer, así como contra la corrupción generalizada y la impunidad de los políticos. El fiscal general de Brasil actualmente procura investigar a 83 legisladores por denuncias de corrupción. Esta es una de las manifestantes.
Palmira Domingues expresó: “Me enfurece ver el país en ruinas por los robos [de los políticos]. Ahora tenemos que arreglar las cosas por estos robos que han hecho, los privilegios que siempre han tenido, las pensiones que tienen para sus hijos. Y ahora tenemos que pagar por esto. No voy a pagar esa factura, voy a pagar mi factura”.
En más noticias de Estados Unidos, el jueves, el gigante de la comida rápida McDonald’s pareció atacar brevemente al presidente Donald Trump, cuando la cuenta corporativa de Twitter publicó: “@realDonaldTrump Eres una desagradable vergüenza de presidente y nos encantaría tener a @BarackObama de nuevo. Además, tienes las manos diminutas”. El tuit fue eliminado 20 minutos después, y McDonald’s se disculpó más tarde, alegando que su cuenta había sido hackeada. El jefe de comunicaciones globales de McDonald’s, Robert Gibbs, se desempeñó previamente como secretario de prensa del expresidente Obama.
Un funcionario de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por su sigla en inglés) enfrenta acusaciones de haber intentado detener una investigación sobre el herbicida Roundup de Monsanto. El funcionario Jess Rowland estaba a cargo de probar los riesgos del producto de producir cáncer. No obstante, según un informe judicial, Rowland habría informado a un gerente de Monsanto, en una conferencia telefónica en 2015: “Si logro frenarla, debería obtener una medalla”, en referencia a una investigación sobre los productos químicos que contiene Roundup. Un juez federal afirma que Rowland parecía tener una relación “altamente sospechosa” con Monsanto. Rowland también supervisó un comité que halló que no había suficientes pruebas para concluir que el glifosato, uno de los químicos clave en Roundup, causa cáncer.
En Florida, la principal fiscal del área metropolitana de Orlando anunció que no procurará la pena de muerte en ningún caso de homicidio en primer grado.
Aramis Ayala enunció: “Tras una cuidadosa revisión y consideración de la nueva ley, bajo mi gestión no voy a procurar la pena de muerte en los casos que lleguen a mi oficina”.
El anuncio del jueves de la fiscal Ayala desató indignación, porque tenía asignado procesar el caso de Markeith Loyd, quien está acusado de matar a su exnovia embarazada y a un oficial de policía de Orlando en enero. Después de su anuncio, el gobernador de Florida, Rick Scott, le pidió a Ayala que se retirara del caso, y cuando ella se negó, la retiró igualmente y se lo reasignó a otro fiscal. Mientras tanto, en Los Ángeles, un juez revocó la condena por homicidio a un hombre que ha pasado 32 años en la cárcel por un crimen que siempre sostuvo no haber cometido.
El ex sheriff del condado de Los Ángeles ha sido declarado culpable de cargos de obstaculizar una investigación del FBI sobre el abuso de reclusos en las cárceles del condado de Los Ángeles, que incluye golpizas a reclusos que estaban esposados. Lee Baca dirigió el departamento del sheriff del condado durante 15 años, y fue uno de los sheriffs más poderosos de Estados Unidos. Ahora enfrenta hasta 20 años en la cárcel federal por cargos relacionados con sus intentos de frustrar la investigación del FBI y luego encubrir sus acciones.
El hijo de la leyenda del boxeo Muhammad Ali, Muhammad Ali Jr., afirma haber sido interrogado en un aeropuerto de Estados Unidos por segunda vez en un mes; esta vez en el aeropuerto de Washington DC, donde intentaba abordar un vuelo a Fort Lauderdale, Florida, donde vive. Muhammad Ali Jr., o Muhammad Ibn Ali, dice haber sido identificado como sospechoso por funcionarios de la Administración de Seguridad en el Transporte, quienes le preguntaron número de seguro social, lugar de nacimiento y le pidieron un pasaporte estadounidense para abordar el vuelo, a pesar de que ya les había mostrado su licencia de conducir estadounidense. Muhammad Ibn Ali también fue detenido e interrogado durante más de dos horas sobre su nombre y religión a fines de febrero, cuando voló a Florida desde Jamaica, donde estaba celebrando el Mes de la Historia Negra. Este es Muhammad Ibn Ali en una entrevista para Democracy Now! tras esa primera detención.
Muhammad Ali Jr. declaró: “La primera pregunta que me hicieron fue: ‘¿Cómo te llamas?’ La segunda fue: ‘¿De dónde había tomado mi nombre?’ Y la tercera fue: ‘¿De qué religión eres?’ Así que contesté: ‘Mi nombre es Muhammad Ibn Ali. Tomé mi nombre de mi madre y padre. Ellos me criaron. Ellos me dieron el nombre de Muhammad Ali desde mi nacimiento’. Y les dije: ‘Soy musulmán’. Obviamente, creo que no me creyeron, así que me llevaron a otra habitación, la de la parte de atrás, y me hicieron la misma serie de preguntas. Realmente me causó sorpresa, conmoción y temor, porque soy un ciudadano estadounidense, así que no veo por qué me detuvieron en primer lugar”.
Visite democracynow.org/es para ver la entrevista completa a Muhammad Ali Jr., el hijo mayor de Muhammad Ali, junto con su madre, Khalilah Camacho-Ali, quien también fue detenida.