Cuba respondió al anuncio que hizo el viernes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien afirmó que dará marcha atrás en la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, y que restablecerá las restricciones migratorias y comerciales. El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, se refirió al discurso de Trump como un “espectáculo grotesco” y prometió que Cuba nunca extraditaría a los estadounidenses que recibieron asilo político en Cuba, tal como Assata Shakur, una activista miembro de las Panteras Negras, condenada a muerte por el asesinato de un policía estatal de Nueva Jersey, ocurrido en un tiroteo que también resultó en la muerte de uno de sus compañeros y en el que ella misma recibió dos disparos de la policía.
Bruno Rodríguez expresó: “Con relación al tema de los llamados fugitivos estadounidenses en Cuba, puedo reafirmar que en uso de la ley nacional y el derecho internacional y de la tradición latinoamericana, Cuba ha concedido asilo político o refugio a luchadores por los derechos civiles de Estados Unidos. Por supuesto que estas personas no serán retornadas a Estados Unidos, que carece de base legal, política y moral para reclamarlos”.