Titulares06 de julio de 2017

El gobierno encabezado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó el miércoles con emprender acciones militares contra Corea del Norte en respuesta a su programa de armas nucleares. El gobierno sostuvo que Estados Unidos está dispuesto a defenderse y a defender a sus aliados. La amenaza se produjo un día después de que Corea del Norte probara exitosamente un nuevo misil balístico intercontinental que Estados Unidos afirma que tiene capacidad de llegar a Alaska. La embajadora de Estados Unidos ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, convocó una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad.

Nikki Haley dijo durante la reunión: “Sus acciones están rápidamente descartando la posibilidad de una solución diplomática. Estados Unidos está dispuesto a utilizar toda nuestra capacidad para defendernos y defender a nuestros aliados. Parte de esa capacidad son nuestras poderosas fuerzas militares. Recurriremos a ellas si es necesario, pero preferiríamos no tener que llegar a eso”.

Haley dijo que Estados Unidos pronto propondrá nuevas sanciones contra Corea del Norte, y añadió que Estados Unidos estaba dispuesto a “emprender nuestro propio camino” si los miembros de la ONU no están de acuerdo con sus condiciones. Mientras tanto, Rusia y China instaron a ejercer la moderación. El embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Vladimir Safronkov, instó a Estados Unidos y Corea del Sur a detener los ejercicios militares conjuntos, a la vez que exhortó a Corea del Norte a que detuviera los ensayos con misiles y ojivas. Safronkov también pidió a Estados Unidos que desmantelara el sistema de misiles antibalístico THAAD.

Vladimir Safronkov, declaró: “El despliegue del sistema THAAD en el noreste de Asia es una grave amenaza a la estabilidad estratégica de la región, incluida la de Rusia y China, y sin duda no sirve para desnuclearizar a la Península de Corea sobre la base del principio de asegurar la paz y la estabilidad en la región”.

El nuevo presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, también se ha opuesto al sistema de misiles THAAD. El mes pasado ordenó una investigación tras enterarse de que se habían desplegado cuatro lanzamisiles adicionales en Corea del Sur.

En Polonia, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo en un importante discurso hoy que el futuro de la civilización occidental corre peligro por las amenazas del “terrorismo y el extremismo”. Trump pronunció su discurso en la plaza Krasinski, cerca del lugar donde ocurrió el levantamiento de Varsovia contra los nazis en 1944. Antes de pronunciar su discurso, Trump habló brevemente en una conferencia de prensa conjunta con el presidente de Polonia, Andrzej Duda. Trump reiteró sus recientes ataques contra la cadena de noticias CNN, a la que calificó de “noticias falsas”. También afirmó que Rusia probablemente haya interferido en las elecciones de Estados Unidos en 2016.

El presidente Donald Trump dijo: “Se han cometido errores. Estoy de acuerdo, creo que fue Rusia, pero creo que probablemente fueron otras personas o países, y no creo que haya nada malo en esa afirmación. Nadie lo sabe con certeza”.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, viajará a Hamburgo, Alemania, donde se reunirá con otros líderes de las principales economías del mundo en la Cumbre del G-20, entre ellos con el presidente ruso, Vladimir Putin. Antes de la Cumbre, miles de personas se manifestaron en la ciudad.

Uno de los manifestantes, Georg Ismael, declaró: “Queremos denunciar que 20 delincuentes peligrosos de todo el mundo se reunirán aquí. Son responsables de los gastos militares más elevados, han participado en todas las guerras del mundo, son responsables de la catástrofe climática y del congelamiento o la reducción significativa de nuestros salarios”.

El miércoles, mil manifestantes se vistieron de gris y caminaron por las calles de Hamburgo, en una procesión de “zombis”, para simbolizar la apatía política.

En Irak, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtieron que alrededor de 20.000 civiles siguen atrapados en Mosul, mientras combatientes del autoproclamado Estado Islámico (ISIS) luchan por el control de su último bastión en la ciudad. La coordinadora de la ONU para asuntos humanitarios en Irak, Lise Grande, dijo que los civiles siguen estando en una situación de “extremo peligro” y añadió que la destrucción en el oeste de Mosul no tiene precedentes.

Lise Grande: “En el oeste de Mosul estamos siendo testigos del peor daño de todo el conflicto. En los barrios donde el combate ha sido más feroz, vemos niveles de daño que no se pueden comparar con nada que haya ocurrido hasta el momento en Irak”.

La ONU advirtió que restaurar la infraestructura básica de Mosul costará más de 1.000 millones de dólares.

Mientras tanto, en Siria, miles de residentes continúan huyendo de la ciudad de Raqqa mientras las milicias respaldadas por Estados Unidos intensificaban la ofensiva contra la ciudad controlada por el autoproclamado Estado Islámico (ISIS). El miércoles, civiles que habían escapado de la ciudad llegaron a un campamento de socorro al aire libre en las afueras de Raqqa y declararon haber sufrido constantes ataques aéreos, incursiones militares con artillería y hambre extrema.

Djazia, una mujer desplazada de Raqqa, declaró: “Nos fuimos por los combates. Teníamos miedo, tenemos hijos. Casi nos morimos de hambre y nadie nos ayudó”.

Oubayd, un hombre desplazado de Raqqa, enunció: “Ahora estamos desplazados y vivimos al aire libre. Estas son las pertenencias de nuestra casa, las hemos conseguido hoy. Esto es lo que tenemos. Son las últimas cosas que teníamos en la casa”.

Cerca de 200.000 personas han sido desplazadas de Raqqa y se espera que sean más quienes huyan, a medida que el combate se intensifique. Los ataques aéreos liderados por Estados Unidos han matado a cientos de residentes, en lo que los investigadores de la Organización de las Naciones Unidas han calificado de “impactante pérdida de vidas civiles”.

En Venezuela, decenas de partidarios del presidente Nicolás Maduro asaltaron la Asamblea Nacional el miércoles, donde atacaron a los legisladores de la oposición con piedras y palos y lanzaron petardos. Un video de la caótica escena muestra a dos miembros de la asamblea con el rostro ensangrentado. Al menos siete legisladores resultaron heridos. En un desfile militar que celebraba el aniversario de la independencia de Venezuela, el presidente Maduro condenó la violencia.

El presidente Maduro expresó: “He sido informado —mientras se desarrollaba este imponente acto cívico-militar— que han ocurrido unos hechos extraños, siempre extraños donde está la oposición, en la puerta este y algunos pasillos y jardines internos de la Asamblea, unos hechos de riña, de violencia. Yo condeno absolutamente esos hechos, hasta donde los conozco en este momento”.

Al menos 90 personas han muerto durante las últimas semanas, en las que se han sucedido disturbios políticos en Venezuela. Los manifestantes de la oposición que esperan derrocar al presidente Maduro han establecido puestos de control, han organizado protestas masivas y han asesinado a un juez que encarceló a un líder de la oposición.

Mientras tanto, el oficial de la policía venezolana que dirigió la semana pasada un ataque desde un helicóptero contra el Ministerio del Interior y el Tribunal Supremo de ese país, publicó un nuevo video el miércoles, en el que promete una segunda ola de ataques. Oscar Pérez aparentemente grabó el video desde su escondite, tras abandonar el helicóptero durante su huida.

Oscar Pérez expresó: “Hay 30 millones de venezolanos que van con la verdad. Y tendrán que meter preso al país completo para poder callar nuestra misión, nuestro deber, nuestro patriotismo, nuestra lucha. Saldremos a la calle y estaremos allí con ustedes. No están solos”.

Los líderes de la oposición han acusado al presidente Nicolás Maduro de trabajar con Pérez para organizar los ataques de la semana pasada, que dañaron edificios del gobierno pero no hirieron a nadie. Maduro calificó el ataque de “terrorismo” y de intento de golpe de Estado.

En Virginia, Estados Unidos, los funcionarios penitenciarios se preparan para ejecutar a un hombre condenado con un cóctel de inyección letal de tres fármacos que algunos críticos dicen que lo conducirá a una muerte tortuosa equivalente al ahogamiento. William Morva, de 32 años de edad, tiene programado recibir los fármacos letales hoy a las nueve de la noche en el Centro Correccional Greensville. Según los registros de la autopsia, la última persona presa ejecutada por Virginia hace seis meses, Ricky Gray, murió después de que el mismo método de inyección letal le provocara un edema pulmonar agudo; esto efectivamente provocó que Gray se ahogara con fluidos teñidos de sangre, los cuales tosió durante la ejecución. Los abogados de Morva argumentan que este método es inconstitucional, cruel e inusual.

En Chicago, una ola de violencia durante el fin de semana de 4 días por el feriado del Día de la Independencia de Estados Unidos dejó un saldo de 102 víctimas, con 15 muertos y 86 heridos por disparos. La policía afirma que los fuegos artificiales de aficionados confundieron y saturaron el sistema informático ShotSpotter, que utiliza micrófonos para rastrear disparos y alertar a la policía. La persona más joven que resultó lesionada fue un niño de 13 años de edad, herido de gravedad por disparos efectuados el viernes.

En Nueva York, el personal del hospital Bronx-Lebanon sigue de luto luego de que un médico matara a uno de sus excolegas y dejara a otros seis heridos en un tiroteo que se produjo el viernes. El Dr. Henry Bello utilizó un rifle de asalto AR-15 que compró legalmente en una tienda de armas en el norte de Nueva York, a pesar de que tenía antecedentes penales por encarcelamiento ilegal y de haber dejado su trabajo en el hospital en abril por “problemas personales” no especificados.

Mientras tanto, el congresista estadounidense Steve Scalise regresó a cuidado intensivo mientras se recupera de varias cirugías tras un ataque perpetrado el mes pasado, en el que también resultaron heridas otras cuatro personas. Los médicos afirman que Scalise está en riesgo de infección debido a que una ronda de municiones de un rifle de asalto AR-15 ingresó en su cadera, provocando ruptura de huesos y vasos sanguíneos.

Y en Turquía, Amnistía Internacional pide la liberación de la directora de sus operaciones turcas y otros siete activistas de derechos humanos, después de que fueran detenidos por la policía el miércoles mientras dictaban un taller. En una declaración, el secretario general de Amnistía Internacional, Salil Shetty, pidió la liberación de Idil Eser y de quienes fueron detenidos junto a ella, y agregó: “La detención en régimen de incomunicación de Eser y la de otros defensores de los derechos humanos que asistían a un evento de rutina es un grotesco abuso de poder y resalta la precaria situación que enfrentan los activistas de derechos humanos en el país”.