Donald Trump realizó una visita inesperada de Acción de Gracias a Afganistán, donde anunció que ha reabierto las negociaciones de paz con los talibanes, luego de que Trump suspendiera abruptamente las negociaciones el pasado mes de septiembre. En las declaraciones que efectuó el jueves, Trump sostuvo además que Estados Unidos exige ahora un alto el fuego por parte de los talibanes, un giro en la postura de negociación que arroja confusión sobre la estrategia de Estados Unidos.
La visita de Trump a Afganistán tuvo lugar al tiempo que funcionarios afganos afirmaron que un ataque con avión no tripulado de Estados Unidos provocó la muerte de cinco personas al impactar contra un automóvil en el que era trasladada a un hospital una madre que había sufrido complicaciones a raíz de un parto en su domicilio. El ataque, ocurrido al sureste de Afganistán, provocó la muerte de la madre de 25 años de edad, Malana, tres de sus familiares y el conductor del vehículo. Estados Unidos afirma estar investigando los informes sobre víctimas civiles. Anteriormente, el Pentágono había declarado que los fallecidos durante el ataque en la provincia de Khost eran talibanes.
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