En la ciudad de Boston, Estados Unidos, un entrenador y 13 padres, entre los que se encuentra la actriz de Hollywood Felicity Huffman, aceptaron declararse culpables de fraude en el marco de la investigación del escándalo de admisiones universitarias de élite conocido como “Operación Varsity Blues”. Huffman admitió haber pagado 15.000 dólares para que alguien hiciera trampa en los exámenes SAT de su hija. El dinero fue canalizado por medio de una organización benéfica establecida por Rick Singer, autor intelectual de la trama de admisiones fraudulentas.
La Universidad de Stanford anunció esta semana que expulsó a un estudiante que, según afirman, estaba vinculado a una “donación” de 500.000 dólares a la organización benéfica de Singer y que proporcionó información falsa en su solicitud de acceso.
Mientras tanto, el periódico The Boston Globe informó la semana pasada que la Universidad Harvard investiga la venta de una propiedad perteneciente al entrenador de esgrima del centro educativo al padre de un estudiante que fue admitido poco después en la universidad y en el equipo de esgrima. No se cree que el caso esté relacionado con la “Operación Varsity Blues”.