Catherine Pugh, la alcaldesa de la ciudad de Baltimore, en el estado de Maryland, renunció a su cargo en medio de una amplia investigación que se lleva adelante en torno a sus negocios. La semana pasada, el FBI y el Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos allanaron sus dos viviendas, así como su oficina en el ayuntamiento. Parte de la investigación se centra en que la alcaldesa obtuvo más de 700.000 dólares mediante la venta de gran cantidad de sus libros para niños, de edición de autor, a empresas que trataban de obtener contratos municipales y al Sistema Médico de la Universidad de Maryland, del que Pugh formó parte en calidad de miembro de la junta directiva.
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