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Daniel Pantaleo, el agente de policía que mató a Eric Garner en 2014 con una llave de estrangulamiento ilegal, fue despedido y privado de los beneficios jubilatorios el lunes 19 de agosto. La decisión se tomó más de cinco años después de que Pantaleo sujetara por el cuello a Garner, un hombre afroestadounidense desarmado, hasta que este cayó al piso. Antes de morir, Garner jadeo “No puedo respirar”. A pesar del reclamo de familiares y miembros de la comunidad desde lo ocurrido, Pantaleo siguió en la fuerza policial con tareas de escritorio. El mes pasado, cuando se cumplieron cinco años de la muerte de Garner, el Departamento de Justicia decidió no acusar a Pantaleo de homicidio, a pesar de que la familia Garner y quienes la apoyan les pidieron a las autoridades de la ciudad que lo castigaran a él y a los otros agentes involucrados. Durante estos años, el caso Garner contribuyó a impulsar el movimiento Black Lives Matter y su lucha para que la policía rinda cuentas por sus acciones. Los familiares continúan la lucha por justicia y le pidieron al Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York que despida a los otros agentes involucrados en la muerte de Garner y prometieron bloquear todas las apelaciones que intente hacer la defensa de Pantaleo.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos (en inglés) a la hija menor de Eric Garner, Emerald Garner.
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