En Canadá, la policía federal realizó el jueves una redada en los campamentos de protesta de los defensores de las tierras indígenas que han estado bloqueando durante meses la construcción de un polémico oleoducto en el territorio sagrado Wet’suwet’en. Varios activistas indígenas fueron arrestados cuando la policía hizo cumplir una orden judicial para expulsar a las personas que luchan contra la construcción del oleoducto Coastal GasLink, de casi 650 kilómetros de largo y con un costo de 4.700 millones de dólares, por parte de la empresa TransCanada. Estas son las palabras de una de las manifestantes durante la redada del jueves por la noche.
Manifestante: “¡No son bienvenidos aquí! ¡No son aliados de la gente! ¡Están dañando nuestra tierra! ¡Nos están hiriendo a nosotros! ¡Están matando a nuestra gente! ¡No se detendrán nunca hasta que se den cuenta de que se equivocan!”.