Los casos confirmados de coronavirus han sobrepasado los 200.000 en todo el mundo, con más de 8.000 muertes reportadas. Una de las naciones más afectadas es Irán, donde los investigadores advierten que la tasa de contagio no alcanzará su punto máximo hasta mayo, y que hasta 3,5 millones de personas podrían morir a causa del virus. Oficialmente, Irán ha reportado poco menos de 1.000 fallecimientos; no obstante, la Organización Mundial de la Salud estima que la cifra real de muertes podría ser cinco veces mayor. Italia reportó 345 nuevos casos en las últimas 24 horas y el número de víctimas fatales en el país asciende a más de 2.500. En España, el primer ministro, Pedro Sánchez, se dirigió el miércoles a un Parlamento casi vacío, con solo unas pocas decenas de legisladores autorizados a asistir en persona. Se han reportado en España 533 muertes entre casi 12.000 casos confirmados y el país se encuentra bajo medidas de confinamiento a escala nacional. En la capital, Madrid, inmigrantes subieron el martes a la azotea de una cárcel de inmigración en protesta por la deficiencia en el tratamiento médico brindado cuando los reclusos se enferman. En América Latina, el Gobierno guatemalteco suspendió temporalmente la llegada de vuelos de deportación desde Estados Unidos, que transportan a solicitantes de asilo centroamericanos como parte de un acuerdo de asilo entre los dos países. En África, al menos 30 países —que abarcan más de la mitad del continente— han confirmado casos de COVID-19. El presidente de Túnez ordenó un toque de queda nocturno de 12 horas de duración y pidió a los trabajadores que donen la mitad de sus salarios para combatir la pandemia. Costa de Marfil ha cerrado sus centros educativos y se ha unido a otras naciones de África occidental en prohibir vuelos provenientes de países afectados.
En Nueva York, el alcalde Bill de Blasio anunció el martes que pronto se les pedirá a los 8,6 millones de residentes de la ciudad que se resguarden en casa; está previsto que la decisión se tome dentro de las 48 horas. El gobernador Andrew Cuomo contradijo rápidamente la advertencia anunciada por el alcalde.
El gobernador Andrew Cuomo dijo: “Ninguna ciudad del estado puede ponerse en cuarentena sin la aprobación del estado. Y no tengo ningún interés ni plan alguno de poner en cuarentena ninguna ciudad”.
Cuomo ha criticado duramente al Gobierno de Donald Trump por su inacción. El gobernador sostuvo que Nueva York tiene solo aproximadamente 4.000 respiradores, equipos cruciales para mantener vivos a pacientes con problemas respiratorios graves. Un equipo de trabajo del Gobierno advirtió que Nueva York podría tener un déficit de aproximadamente 16.000 respiradores en el pico de la crisis, que, según sostuvo Cuomo, ocurrirá en unos 45 días.
El gobernador Andrew Cuomo dijo: “Estiman que se necesitarán entre 55.000 y 110.000 camas de hospital en ese momento”.
Actualmente Nueva York cuenta con solamente 53.000 camas de hospital. La Autoridad Metropolitana del Transporte de la Ciudad de Nueva York —el mayor sistema de transporte público de Estados Unidos— solicitó al Gobierno federal un rescate financiero de 4.000 millones de dólares, ya que la cantidad de pasajeros se redujo drásticamente.
En Washington, el Gobierno de Donald Trump anunció el martes que apoyará un plan para inyectar más de un billón de dólares en la economía de Estados Unidos, con el objetivo de combatir el colapso económico sin precedentes causado por la pandemia. El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, ha propuesto un paquete de incentivos bajo el cual se entregaría rápidamente un cheque de 1.000 dólares a la mayoría de los adultos estadounidenses, con más pagos directos adicionales posiblemente en los próximos meses. Mnuchin dijo que la pandemia es “peor que los ataques del 11 de septiembre” para la industria aeronáutica y solicitó un rescate financiero de 50.000 millones de dólares. Sara Nelson, presidenta de la Asociación de Asistentes de Vuelo, respondió:
Sara Nelson: “Le hemos dicho al Congreso que cualquier fondo de estímulo para la industria de la aviación debe estar acompañado de normas estrictas. Eso incluye exigir a los empleadores de todo el sector aeronáutico que mantengan el pago y los beneficios para cada trabajador. No usar el dinero de los contribuyentes para darles bonos a los directores ejecutivos o para recompras de acciones o dividendos. No incumplir contratos por razones de quiebra. Y no otorgar fondos federales a las aerolíneas que luchan contra los intentos de sus trabajadores de unirse a un sindicato”.
Neiman Marcus y The Gap se convirtieron el martes en las últimas empresas minoristas de Estados Unidos en anunciar el cierre de sus tiendas en todo el país. General Motors, Ford Motor y Fiat Chrysler anunciaron el martes que mantendrían sus fábricas abiertas por el momento, operando con capacidad limitada y con nuevos protocolos de saneamiento. El sindicato de los trabajadores de la industria automotriz United Auto Workers ha solicitado el cierre de todas las fábricas de automóviles del país durante dos semanas como medida de seguridad. El medio Bloomberg informa que el secretario del Tesoro Mnuchin sostuvo ante senadores republicanos que, sin no se hace nada al respecto, la tasa de desempleo de Estados Unidos podría llegar al 20%. Una encuesta elaborada por la Radio Nacional Pública y el programa de noticias PBS NewsHour halló que casi uno de cada cinco hogares estadounidenses ya ha experimentado una reducción en las horas de trabajo o un despido.
Donald Trump dijo el martes que “siempre supo” que el brote de coronavirus era una pandemia, contradiciendo decenas de declaraciones públicas que ha hecho desde enero en las que minimizaba la amenaza del virus.
El presidente Donald Trump dijo: “Siempre supe que esto es… esto es real… es una pandemia. Me pareció que era una pandemia mucho antes de que le llamaran ‘pandemia’”.
Semanas atrás, Trump dijo que su Gobierno había acabado con el virus; sugirió que la gente enferma con el virus podía ir a trabajar; dijo que el virus desaparecería “milagrosamente” en abril; afirmó que las cifras “iban a mejorar progresivamente”; y tuiteó: “El riesgo es bajo para el estadounidense promedio”. Trump ha afirmado falsamente que “cualquiera que quiera hacerse un test puede hacerlo”.
A medida que los estadounidenses confinados en sus hogares se conectan cada vez más a internet para mantenerse en contacto con sus amigos y familiares, algunos proveedores de internet, entre ellos AT&T y Comcast, han eliminado los límites de datos, sin que el incremento en la demanda de la banda ancha cause interrupciones significativas en el servicio.
La crisis ha renovado los pedidos para que la Comisión Federal de Comunicaciones regule internet como un servicio público y para que se revierta la revocación del Gobierno de Donald Trump de las protecciones de neutralidad de la red. Mientras tanto, Facebook comenzó a censurar los artículos de noticias sobre el coronavirus de varios medios de comunicación el martes, incluyendo The Atlantic, BuzzFeed, Politico y Democracy Now! Un ejecutivo de Facebook dijo que esto se debió a un error en un sistema de inteligencia artificial “antispam”.
En el tercer distrito del Congreso de Illinois, la candidata progresista Marie Newman declaró la victoria en las elecciones primarias del martes contra el conservador demócrata y actual senador Dan Lipinski. Newman ganó el apoyo del senador Bernie Sanders y la congresista Alexandria Ocasio-Cortez tras expresar su respaldo al New Deal Ecológico y Medicare para todos. También está respaldada por la organización a favor de la libertad reproductiva NARAL Pro-Choice America. Lipinski es conocido por sus ideas contra el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo y en enero pidió a la Corte Suprema que anulara el derecho al aborto conforme con el histórico caso Roe contra Wade, una sentencia adoptada por la Corte Suprema en 1973 que garantizó a las mujeres el derecho al aborto en Estados Unidos. También votó en contra de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio en 2010.
El Gobierno chino ha anunciado que expulsará del país a los periodistas estadounidenses que trabajan para los periódicos The New York Times, The Wall Street Journal y The Washington Post. El Gobierno chino también exigió a medios como la revista Time que proporcionen información detallada de sus reportajes en el país. Esto se produce luego de que el Gobierno de Donald Trump limitara el mes pasado a 100 el número de ciudadanos chinos autorizados a trabajar en los medios de su país con sede en Estados Unidos y anunciara que cinco organizaciones de noticias dirigidas por el Estado chino serán tratadas bajo la misma regulación que funcionarios del Gobierno chino.