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Los hospitales de Nueva York no pueden obligar a las personas gestantes a dar a luz sin un o una acompañante elegida. Así lo afirma una orden ejecutiva del el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo. La orden fue emitida el domingo 29 de marzo en respuesta a un intento de los centros hospitalarios NewYork-Presbyterian y Mount Sinai de excluir a los y las acompañantes de las salas de parto, lo que causó una indignación generalizada. Pero, ¿cómo afrontan las personas gestantes las nuevas pautas y la incertidumbre en las condiciones hospitalarias durante la pandemia de COVID-19?
Para conocer más sobre el tema, vea (en inglés) nuestra conversación con Amy Littlefield, periodista independiente que trabaja sobre la intersección entre religión y atención médica. Ella nos cuenta lo que está atravesando ahora, al final de su gestación. Su artículo para el portal Insider se titula: “I’m nine months pregnant, and I’m bringing my baby into a world I no longer understand. I have to remain hopeful anyway.”. (Estoy embarazada de nueve meses y trayendo a mi bebé a un mundo que ya no entiendo. De todos modos, tengo que mantener la esperanza).