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En el mes de abril, millones de creyentes de todo el planeta se preparan para celebrar Semana Santa, Pascua Judía y Ramadan en la era del coronavirus. En este contexto, la Catedral de San Juan el Divino de Manhattan ha decidido abrir sus puertas e instalar cuatrocientas camas para pacientes que no tengan COVID-19 y, con ello, permitir que los hospitales dispongan de más espacio para quienes tienen coronavirus. Pero hay un problema: se trata de un acuerdo entre la ciudad y el grupo cristiano fundamentalista Samaritan’s Purse, liderado por Franklin Graham, un virulento predicador islamofóbico, enemigo del derecho a abortar y contrario a las personas LGBTQ. La semana pasada, el grupo construyó un hospital de campaña en Central Park para recibir pacientes que no acceden al Hospital Mount Sinai. El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, prometió enviar asistentes para monitorear la actividad del grupo y evitar la discriminación de pacientes.
Para conocer novedades sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con el obispo Clifton Daniel, deán de la Catedral de San Juan el Divino de la Ciudad de Nueva York. Daniel afirma que rechaza los valores del grupo Samaritan’s Purse pero que, a pesar de eso, acepta su ayuda. “Nuestro trabajo es salvar vidas y ayudar a la gente”, dice el deán Daniel. “Si estás en el desierto muriéndote de sed y alguien te alcanza un vaso con agua, no le vas a pedir su licencia de conducir. Simplemente le dices ’gracias’”.