Titulares25 de septiembre de 2020

Por segundo día consecutivo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se negó a comprometerse a aceptar los resultados de las elecciones presidenciales de noviembre si resulta vencedor su rival Joe Biden. El mandatario fue consultado acerca de las elecciones el jueves, cuando salía de la Casa Blanca para hacer campaña en el estado de Carolina del Norte.

El presidente Donald Trump sostuvo: “Queremos asegurarnos de que las elecciones sean honestas y no estoy seguro de que puedan serlo. No sé si pueden serlo con toda esta situación… de papeletas de voto por correo no solicitadas. Se están enviando a toda la población millones [de papeletas] que no fueron solicitadas”.

La amenaza hecha por Trump de invalidar la voluntad de los votantes causó alarma generalizada entre demócratas y progresistas. El jueves, el senador independiente del estado de Vermont, Bernie Sanders, pronunció un importante discurso en el que sostuvo que el futuro de la democracia estadounidense está en riesgo.

El Senador Bernie Sanders expresó: “Debemos garantizar, en este momento sin precedentes en la historia de Estados Unidos, que esta sea una elección libre y justa, una elección en la que los votantes no se sientan intimidados, una elección en la que se cuenten todos los votos y una elección en la que el perdedor acepte los resultados”.

En el Congreso de Estados Unidos, el director del FBI, Christopher Wray, afirmó el jueves ante el Comité de Seguridad Nacional del Senado que no ha visto evidencias del fraude electoral generalizado vinculado a las papeletas de votación por correo que denuncia el presidente Trump.

Christopher Wray declaró: “Históricamente nunca se ha detectado ningún tipo de intento coordinado de fraude electoral a nivel nacional en elecciones importantes, ya sea por correo o de otro modo”.

El testimonio del director del FBI se produjo al tiempo que un fiscal federal y una oficina local del FBI en el estado de Pensilvania emitieron una inusual declaración en la que alegan estar investigando denuncias de manipulación de nueve votos emitidos por militares. El fiscal federal afirma que los votos fueron “abiertos de forma indebida” y que las papeletas de votación en favor de Donald Trump fueron “descartadas” por funcionarios electorales. El equipo de campaña de Trump aprovechó el anuncio y manifestó: “Los demócratas están intentando robar las elecciones”.

El profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad de Loyola Justin Levitt cuestionó el momento en que se realizó el anuncio y afirmó en la Radio Nacional Pública (NPR, por sus siglas en inglés): “Es un deber fundamental del Gobierno no anunciar hechos parciales ni 'problemas potenciales' de investigaciones en curso. De hecho, es bastante inapropiado anunciar que se lleva a cabo una investigación y completamente fuera de lugar anunciar a favor de quién se emitieron los votos, como si eso importara en la investigación”.

En la ciudad de Louisville, en el estado de Kentucky, grupos de manifestantes desafiaron por segunda noche consecutiva el toque de queda impuesto en esa ciudad y marcharon en demanda de justicia para Breonna Taylor, la técnica de urgencias afroestadounidense de 26 años de edad que en marzo murió baleada dentro de su propio apartamento por policías vestidos de civil que cumplían una orden de allanamiento que les permitía ingresar sin anunciarse. Durante la noche, la legisladora estatal de Kentucky Attica Scott transmitió en vivo su propio arresto, junto con el de su hija y otras 22 personas, por cargos de disturbios en primer grado, incumplimiento de órdenes de dispersión y asamblea ilícita. El día anterior, Scott filmó cuando decenas de policías antidisturbios fuertemente armados inundaron las calles de Louisville, tras el anuncio de un gran jurado de que ninguno de los policías que dispararon 32 balas en el interior del apartamento de Taylor enfrentaría cargos por homicidio.

La legisladora Attica Scott expresó: “Las personas que marchaban por la calle se encontraron literalmente con decenas de vehículos policiales de los que salían agentes con sus porras, sus palos, desenfundados”.

La familia de Breonna Taylor habló públicamente en la mañana del viernes por primera vez desde la decisión tomada el miércoles por el gran jurado. El gobernador de Kentucky y el alcalde de Louisville solicitan al fiscal general de Kentucky que haga públicas las transcripciones del gran jurado.

En el Congreso de Estados Unidos, el senador republicano de Kentucky Rand Paul arremetió contra el movimiento Black Lives Matter, acusándolo de atacar a funcionarios electos con actos de terrorismo.

El Senador Rand Paul sostuvo: “Su objetivo es el terrorismo. Lo admiten. Si observamos sus conversaciones en las redes sociales, dicen que su objetivo es aterrorizar a los funcionarios públicos y, francamente, a cualquiera”.

En ciudades de todo Estados Unidos continúan las protestas en demanda de justicia para Breonna Taylor. En Los Ángeles, una marcha pacífica por las vidas de las personas negras fue atacada por automovilistas en dos incidentes distintos que tuvieron lugar el jueves por la noche y dejaron al menos a una persona hospitalizada. Se han producido al menos 69 ataques con vehículos contra manifestantes de Black Lives Matter desde que George Floyd fue asesinado por agentes de policía de Minneapolis a finales de mayo.

En la ciudad de Tucson, en el estado de Arizona, la familia de Carlos Ingram López, de 27 años de edad, quien fue asesinado bajo custodia policial en abril, exige que se presenten cargos contra los agentes involucrados en su muerte, luego de que la fiscalía anunciara que no serían acusados. Ingram López murió el 21 de abril luego de que agentes de policía lo mantuvieran inmovilizado boca abajo contra el suelo durante 12 minutos en la casa de su abuela. En imágenes de video captadas por cámaras corporales de la policía, se puede escuchar a Carlos Ingram López pidiendo agua y llamando a su abuela. En un momento, dice: “No puedo respirar”.

Los casos de coronavirus en Estados Unidos aumentan vertiginosamente en al menos 22 estados. Los mayores aumentos se han observado en el Medio Oeste y el Oeste, lo que incluye los estados de Texas, Arizona y Minnesota, entre otros. El jueves, el presidente Trump reunió a unos 15.000 de sus partidarios en un multitudinario evento de campaña que tuvo lugar en la ciudad de Jacksonville, en el estado de Florida, donde no se observaron las medidas de distanciamiento social y pocas personas usaron tapabocas. En el estado de Virginia, funcionarios de Salud Pública exigen la cancelación del mitin previsto para el viernes por la noche en el aeropuerto internacional de Newport News/Williamsburg y advierten sobre una “grave amenaza a la salud pública” si se permite la realización del evento. Un decreto del gobernador de Virginia, Ralph Northam, prohíbe las reuniones de más de 250 personas.

En el estado de Iowa, el Gobierno de Trump multó a los directores de una planta empaquetadora de carne vacuna con solo 957 dólares por no proteger a los trabajadores para evitar que contrajeran coronavirus en el trabajo. Durante un importante brote registrado en abril en la planta de Premium Beef en Iowa se contagiaron 338 de los 850 trabajadores de la planta. Esta semana, la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional impuso a esa compañía una multa de 1.914 dólares por violaciones al mantenimiento de registros, pero luego acordó reducir la multa a la mitad tras negociaciones con ejecutivos. La agencia de noticias Associated Press informa que no se impusieron multas a otras cuatro plantas de procesamiento de carne de Iowa que tuvieron brotes importantes, a pesar de los cientos de casos de COVID-19 y las nueve muertes que se registraron en las plantas.

En la Asamblea General de las Naciones Unidas, el secretario general António Guterres advirtió el jueves que la pandemia de coronavirus ha provocado casi un millón de muertes y 30 millones de contagios y que sigue fuera de control debido a la falta de preparación, cooperación, unidad y solidaridad entre los gobiernos del mundo.

El secretario general António Guterres expresó: “Esta pandemia es una llamada de atención para los desafíos aún más catastróficos que podrían surgir, comenzando con la crisis climática. Si nos enfrentamos a ellos con la misma falta de unión y de organización que hemos visto este año, temo lo peor”.

Jóvenes activistas contra el cambio climático vuelven a salir a las calles de todo el mundo para participar en la huelga del movimiento Fridays for Future (Viernes por el futuro, en español), por primera vez desde que comenzó la pandemia de coronavirus. En Corea del Sur, Filipinas, Alemania y Suecia, así como en más de 3.000 lugares de todo el mundo, se llevan a cabo acciones organizadas por estudiantes. La joven activista sueca contra el cambio climático Greta Thunberg tuiteó: “Volveremos la semana que viene, el mes que viene y el año que viene. Por el tiempo que sea necesario”.

Esta semana, en el círculo polar Ártico, la activista por el clima de 18 años de edad Mya-Rose Craig realizó una protesta de pie sobre un iceberg y rodeada de mar abierto, luego de que el hielo marino del Ártico se redujera al segundo mínimo de extensión registrado.

Mya-Rose Craig afirmó: “Estoy aquí con Greenpeace en el Ártico. Y estoy aquí para ser testigo del mínimo nivel de hielo marino, pero también estoy aquí haciendo la huelga de jóvenes por el clima que ha tenido lugar más al norte, para hacer una declaración sobre lo efímero que es este asombroso paisaje y sobre la decisión que deben tomar ahora mismo nuestros líderes para poder salvarlo”.

El Departamento de Trabajo de Estados Unidos informa que 1,5 millones de trabajadores estadounidenses presentaron nuevas solicitudes de subsidios por desempleo durante la semana pasada. Esa cifra incluye a 870.000 solicitantes de beneficios estatales por desempleo y a otras 630.000 personas que solicitaron Asistencia por Desempleo por la Pandemia. En la actualidad, unos 26 millones de trabajadores perciben prestaciones por desempleo. La Oficina del Censo informa que 23 millones de adultos estadounidenses integran núcleos familiares que no tienen suficientes alimentos para comer y estima que uno de cada cuatro inquilinos con menores a cargo habita en una vivienda que está atrasada en el pago de alquiler.

Esto ocurre mientras los legisladores se preparan para dejar Washington durante un receso prolongado en medio de la peor crisis económica que ha tenido lugar desde la Gran Depresión. La mayoría republicana del Senado no ha aprobado aún un nuevo paquete de ayuda económica por el coronavirus, más de cuatro meses después de que la Cámara de Representantes aprobara su Ley HEROES, un paquete de ayuda económica por el coronavirus de 3 billones de dólares.

El presidente Donald Trump visitó la Corte Suprema el jueves, durante el velatorio de los restos de la jueza Ruth Bader Ginsburg, fallecida el pasado viernes a la edad de 87 años. Trump usó un tapabocas mientras él y la primera dama Melania Trump posaban junto al ataúd de Ginsburg en los escalones de la corte, lo que constituye una de las pocas veces que Trump ha usado tapabocas en público desde el inicio de la pandemia. Miembros del público que reconocieron a Trump en los escalones de la Corte Suprema estallaron en un coro de abucheos y cánticos de “¡Voten para que se vaya!”

Manifestantes: “¡Voten para que se vaya! ¡Voten para que se vaya! ¡Voten para que se vaya!”

Cuando las protestas se incrementaron, Trump volvió al interior del edificio de la Corte Suprema y los manifestantes cambiaron su cántico a “¡Honren su último deseo!”.

La última voluntad de Ginsburg, dictada a su nieta días antes de su muerte, dice: “Mi más ferviente deseo es no ser reemplazada hasta que se nombre un nuevo presidente”. Trump anunció que nombrará al candidato para reemplazar a la jueza Ginsburg el sábado. Senadores republicanos se han comprometido a acelerar los procedimientos de confirmación del candidato del presidente antes del día de las elecciones.

En el día de hoy, Ruth Bader Ginsburg será velada en el Capitolio, convirtiéndose así en la primera mujer y la primera persona judía en recibir ese honor.

En noticias sobre inmigración, el medio BuzzFeed informa que el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de Estados Unidos concluyó que prisioneros fallecidos bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) fueron víctimas de negligencia médica y que el personal carcelario del ICE “falsificó registros para encubrir” problemas dentro de las instalaciones. El informe publicado el jueves detalla muertes de inmigrantes encarcelados que podrían haberse evitado, entre las que figuran muertes producidas debido a que los reclusos enfermos no fueron trasladados a una sala de emergencia o fueron puestos en aislamiento con escasa vigilancia.

Mientras tanto, otro informe del Congreso emitido a principios de esta semana detectó que prisioneros bajo custodia del ICE reciben una inadecuada atención médica, dental y de salud mental de forma sistemática y que se les castiga con reclusión en aislamiento por denunciar la situación.

Autoridades mexicanas se preparan para emitir órdenes de arresto que podrían apuntar a soldados del Ejército, por primera vez desde el comienzo de la investigación sobre la desaparición y presunta masacre en 2014 de 43 estudiantes de un instituto de formación docente de la localidad de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero. Reuters informa que también se emitirán nuevas órdenes judiciales contra policías locales, estatales y federales. Esta semana, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo que revelará más información sobre el caso durante el fin de semana, al cumplirse el sexto aniversario de la desaparición de los estudiantes.

En Brasil, Volkswagen acordó pagar 6,4 millones de dólares a exempleados que fueron arrestados y torturados luego de que la compañía automotriz los denunciara como “subversivos” durante la dictadura militar brasileña de las décadas de 1960, 1970 y 1980. En un acuerdo alcanzado con fiscales brasileños, Volkswagen admitió haber señalado a activistas sindicales de su enorme planta automotriz cercana a São Paulo, donde los jefes espiaban a los trabajadores e informaban a la policía sobre periódicos y folletos ilícitos. Estas son palabras del ex empleado de Volkswagen Expedito Batista.

Expedito Batista afirmó: “Volkswagen perseguía a los trabajadores. Nos encarcelaban adentro de la fábrica. Otros trabajadores eran entregados al Departamento de Orden Político y Social, que era la autoridad política en ese momento. La conducta de Volkswagen en ese momento fue deliberada. Este acuerdo no nos satisface plenamente. Merecemos más, en virtud de nuestros derechos, pero esto es mejor que nada”.

Este acuerdo compensará a víctimas que fueron arrestadas, golpeadas y despedidas de sus trabajos, cuyos nombres fueron ingresados en listas negras, debido a lo cual no pudieron conseguir trabajo durante años. El presidente Jair Bolsonaro, quien es un ex capitán del Ejército de extrema derecha, ha elogiado la dictadura militar y ha reclamado que se restituyan muchas de sus políticas.