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El presidente Trump abraza abiertamente la teoría conspirativa del grupo de extrema derecha QAnon, promueve la consigna de “ley y orden” y, al mismo tiempo, se niega a repudiar los ataques de sus seguidores armados contra manifestantes antirracistas. Hablamos con Jason Stanley, filósofo de Yale especialista en propaganda, autor de “How Fascism Works: The Politics of Us and Them” (Cómo el funciona el fascismo: la política de 'nosotros' y 'ellos'). Stanley dice que Trump construyó un culto a la personalidad dentro del Partido Republicano, lo que se evidenció durante la Convención Nacional Republicana (RNC), y llevó a Estados Unidos firmemente hacia el autoritarismo durante su mandato. “El fascismo es el culto a un líder que promete la restauración nacional ante presuntas amenazas de extremismos de izquierda, minorías e inmigrantes. Asegura que solo él puede salvarnos”, dice Stanley. “En la RNC vimos cómo se desplegó ese culto al líder”.
Para ampliar esta información, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Jason Stanley.