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El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y otros líderes mundiales se reúnen en Glasgow para participar de la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático, conocida como COP26, en medio de protestas multitudinarias. En este contexto, analizamos la creciente presión para que los países limiten el aumento global de la temperatura a 1,5 °C y eviten así los efectos más perjudiciales de la crisis climática. Líderes del G20, que representan a los veinte países más ricos del mundo, se reunieron en vísperas de la COP26 y se comprometieron a hacer mayores esfuerzos para frenar las emisiones. Sin embargo, ofrecieron pocos detalles acerca de cómo se alcanzará ese objetivo, a pesar de que estos países son responsables de cerca del 80% de las emisiones de gases que provocan el efecto invernadero a la atmósfera. “Lo que estamos viendo aquí son un montón de discursos duros sobre el clima, pero ningún plan ni política concreta, y una negativa a poner el dinero sobre la mesa”, dice Asad Rehman, director ejecutivo de la organización War on Want y portavoz principal de la organización COP26 Coalition. Rehman también brinda una descripción general de las demandas expresadas en las manifestaciones y los planes para las próximas dos semanas.
Para ampliar esta información, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Asad Rehman.
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